Garc¨ªa Lorca es todos los muertos
La decisi¨®n de la familia abre un nuevo debate: ?qu¨¦ hacer con los restos? - Intelectuales, escritores e historiadores opinan sobre este poema inacabado
Con la decisi¨®n de la familia Lorca de permitir que se abra la fosa com¨²n en la que sus asesinos enterraron al poeta no acaba la controversia en torno a lo que ha de pasar con sus restos.
Francisco Ayala, granadino como Lorca, y casi contempor¨¢neo suyo, aseguraba ayer que ¨¦l es "partidario de no tocarle". El autor de Di¨¢logo de los muertos cree que "no hay que trapichear con los cad¨¢veres. Lo creo muy se?aladamente en el caso de Lorca. No hay que hacer nada".
Otro paisano, el poeta Luis Garc¨ªa Montero, advert¨ªa contra el peligro de que el desentierro se convierta en "un circo medi¨¢tico". "Lorca representa en Granada a todas las v¨ªctimas, y V¨ªznar apelaba simb¨®licamente a la memoria de todos los asesinados. Lorca defiende a los 5.000 granadinos muertos. Aquello no es una cuneta, es un mausoleo de la memoria, y est¨¢ muy bien que se haya defendido del morbo".
Francisco Ayala, granadino como Lorca, es "partidario de no tocarlo"
Gibson: "No es bueno para la historia no tener la certeza de donde est¨¢"
?se es el temor: que, en el caso de Lorca, el morbo sustituya la reivindicaci¨®n hist¨®rica.
Lo explica Javier Mar¨ªas, que estudi¨® con Laura Garc¨ªa Lorca, presidenta de la fundaci¨®n del poeta. "Lo que ha dicho Lauri es bastante claro y sensato. No se oponen a que otros familiares hagan lo que quieran con sus muertos, pero ellos desear¨ªan que a Lorca se le deje donde est¨¢. Eso es sensato y acertado".
Cualquier traslado, adem¨¢s, considera Mar¨ªas, "atraer¨ªa a pol¨ªticos a una romer¨ªa que convertir¨ªa aquello en una industria tur¨ªstica pol¨ªtico-cultural". "Que no se toquen ni se examinen los restos. Siempre me ha parecido una falta de respeto que toquen a los muertos, sobre todo si son muertos antiguos". Caballero Bonald explic¨®: "Que le dejen descansar sin alharacas".
Antonio Mu?oz Molina, que naci¨® en ?beda pero pas¨® muchos a?os en Granada, considera "leg¨ªtimo" el deseo de las personas "de recuperar los restos de sus mayores". Esas personas fueron fusiladas, "y fueron enterradas fuera de la ley". A estas alturas del tiempo, a?ade el escritor, "?hasta qu¨¦ punto la autoridad m¨¢xima es la familia, con todos mis respetos? Pues los restos de Lorca no son los de un hombre en su ¨¢mbito privado, aqu¨ª se mezcla lo privado con lo p¨²blico, y Garc¨ªa Lorca es lo m¨¢s universal que tenemos. Eso es algo que no pueden eludir ni la familia ni el p¨²blico".
Francisco Rico se posiciona en lo contrario del espectro. "No apruebo la idea de exhumar los restos de Lorca. Me parece mejor que sigan donde est¨¢n, en el mismo lugar que los otros asesinados. Lorca es todos los muertos, y todos los muertos son Lorca. Levantar el barranco de V¨ªznar, limpiar y clasificar los huesos, tomar muestras de los an¨¢lisis de ADN... todo eso es un espect¨¢culo que me desagrada. Respeto los sentimientos de algunos familiares, pero no entiendo demasiado ese af¨¢n por recuperar esqueletos. Y, adem¨¢s, ?luego qu¨¦? ?Lorca, a un mausoleo, y los dem¨¢s, a nichos? Prefiero un parque donde 'no haya cosa en que posar los ojos / que no sea imagen de la muerte'. Pero con piedad y serena distancia".
El historiador Santos Juli¨¢ respira la misma convicci¨®n que Rico, y la subraya con una frase de Manuel Aza?a respecto a la controversia creada en Espa?a sobre el traslado desde Finlandia, donde se suicid¨®, del cad¨¢ver de ?ngel Ganivet, granadino tambi¨¦n. Dec¨ªa Aza?a: "Lo primero que se hace con los hombres ilustres es desenterrarles. En Espa?a la man¨ªa de la exhumaci¨®n sopla por r¨¢fagas". Y ahora estamos en una r¨¢faga, "y no la comprendo", dice Juli¨¢. "Qui¨¦n gana con eso, y cu¨¢nto se pierde. Se ha conservado en V¨ªznar un lugar de la memoria, all¨ª est¨¢ el lugar del crimen, es un cementerio que nunca nadie deber¨ªa tocar. Me da tristeza que eso pueda destruirse. ?Qu¨¦ va a pasar cuando se exhumen los restos? Que se haga lo que en derecho corresponda, pero me produce perplejidad que aquel lugar sobrio de V¨ªznar termine siendo un sitio trivial, banalizado".
Ian Gibson, el historiador que m¨¢s ha trabajado sobre el asesinato de Lorca, tiene una postura radicalmente distinta. "Es el poeta m¨¢s famoso del mundo; lo que importa es la verdad hist¨®rica, y hoy se ha dado un paso muy importante para saber d¨®nde est¨¢. Mataron a un genio. No es bueno ni para la familia ni para la historia no tener la certeza de d¨®nde est¨¢. No hay raz¨®n para que no se abran las tumbas. Esa fosa es, adem¨¢s, simb¨®lica de lo que pas¨® en la guerra: ah¨ª est¨¢ un poeta, un maestro al que asesinaron por su ate¨ªsmo, y dos toreros. El descubrimiento de lo que pas¨® con ellos abre paso a la verdad sin manique¨ªsmos".
Jos¨¦ ?lvarez Junco, historiador que trabaj¨® en la Ley de V¨ªctimas, afirma: "Yo soy muy laico, creo que despu¨¦s de la vida no hay nada, pero respeto los deseos de las familias. La ley es ambigua con respecto a sus derechos sobre la exhumaci¨®n; es evidente que unas familias tienen derecho a pedir que se deje en paz a sus muertos, y otras tienen derecho a desenterrarlos".
En Di¨¢logo de los muertos, Ayala hace hablar a cad¨¢veres de ambos bandos. ?ste es un subrayado que acaso sirva para la incesante controversia: "Ya todo acab¨®; ya todos somos unos. Nos une la tierra; nos iguala la tiniebla de la tierra; nos liga, tanto como nuestro amor, nuestro odio; nos hermana la comunidad de nuestro destino".
Lorca escribi¨®: "T¨² solo y yo quedamos. / Prepara tu esqueleto para el aire. / Yo solo y t¨² quedamos".
Todo en esta historia parece remitir al drama que hay en los poemas.
Un paseo por Granada tras las pasos de Garc¨ªa Lorca en EL VIAJERO
Un gesto "elegante" y un "acto humanitario"
- Nieves Galindo (nieta de Di¨®scoro Galindo, el maestro republicano fusilado junto a Garc¨ªa Lorca por sus ideas laicas): a la familia Lorca "no le ha quedado m¨¢s remedio que ceder" respecto a la exhumaci¨®n de la fosa com¨²n en la que yacen sus restos. Su familia no pondr¨¢ objeci¨®n a la apertura de la fosa, pero cree que una exhumaci¨®n parcial "desvirtuar¨ªa" su memoria. "Puede que para ellos sea doloroso, pero en mi caso recuperar los restos es cerrar una herida, una llaga que ha permanecido abierta mucho tiempo".
- Asociaci¨®n para la Recuperaci¨®n de la Memoria Hist¨®rica. Su presidente, Francisco Gonz¨¢lez Arroyo, considera "elegante" la decisi¨®n de la familia de Lorca, al "asumir el respeto que merecen" las familias del maestro y los banderilleros.
- Asociaci¨®n de la Memoria Hist¨®rica: "La exhumaci¨®n de una fosa com¨²n, que es un enterramiento ilegal y que existe por la comisi¨®n de un delito, es, adem¨¢s de un acto humanitario, una cuesti¨®n de derecho".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Antonio Mu?oz Molina
- Ley Memoria Hist¨®rica
- Francisco Rico
- Gente
- Luis Garc¨ªa Montero
- Francisco Ayala
- Santos Juli¨¢
- Jos¨¦ Manuel Caballero Bonald
- Javier Mar¨ªas
- Laura Garc¨ªa Lorca
- Jos¨¦ ?lvarez Junco
- Declaraciones prensa
- Guerra civil espa?ola
- Franquismo
- Legislaci¨®n espa?ola
- Federico Garc¨ªa Lorca
- Derechos humanos
- Poetas
- Generaci¨®n del 27
- Dramaturgos
- Poes¨ªa
- Teatro
- Literatura espa?ola
- Historia contempor¨¢nea
- Movimientos literarios