Un grito de rabia en la noche

No fue una noche tranquila. Pero el grito de Fernando Alonso surgi¨® de lo m¨¢s profundo de la oscuridad y retumb¨® por todos los rincones del circuito urbano de Singapur. "?S¨ª, s¨ª! ?He ganado!", chillaba el asturiano mientras se sub¨ªa al coche, levantaba los brazos hacia el cielo y se pegaba golpes en el pecho. Nadie pod¨ªa imaginarse, ni siquiera ¨¦l mismo, que saliendo en la decimoquinta posici¨®n, en un circuito urbano donde apenas se pod¨ªa adelantar, en la primera carrera nocturna de la historia de la F-1, y con un coche que no estaba entre los mejores, pudiera acabar ganando ante los Ferrari y los McLaren. Pero Alonso se ali¨® con la suerte y lo hizo.

?Hizo falta un milagro? Sin duda. Alonso hab¨ªa vivido el s¨¢bado una de las peores noches de su carrera. "Estaba muy decepcionado, porque cre¨ªa que pod¨ªa estar en el podio y que hab¨ªa perdido todas sus opciones", indic¨® Luis Garc¨ªa Abad, su representante. Sin embargo, Alonso nunca se hunde. Siempre suele encontrar alguna brizna para mantener el esp¨ªritu competitivo que le caracteriza. Esta vez sab¨ªa que la rotura de la bomba de gasolina en la segunda tanda de la cronometrada le hab¨ªa arruinado el fin de semana, pero en su cabeza permanec¨ªa intacta la idea de que en este trazado tan sinuoso y bacheado ten¨ªa un coche capaz de luchar por la victoria. Y volv¨ªa a sentirse el mejor.

Sali¨® hecho una furia y adelant¨® de golpe a tres coches antes de la primera curva. Despu¨¦s se qued¨® parado detr¨¢s del tap¨®n que provocaba Trulli, hasta que consigui¨® superarle en la novena vuelta. Hab¨ªa hecho un buen trabajo, pero entr¨® a repostar en la 12? vuelta cuando iba en 11? posici¨®n. Y sali¨® del repostaje el ¨²ltimo y con una dosis enorme de desesperanza. Sin embargo, s¨®lo una vuelta m¨¢s tarde se produjo una circunstancia que dio un vuelco espectacular a la carrera y le devolvi¨® la ilusi¨®n. Su compa?ero de equipo, Nelsinho Piquet, perdi¨® el control del Renault en la entrada de la recta opuesta a boxes y empotr¨® su coche en el ra¨ªl en medio de la pista. Y Alonso se frot¨® las manos cuando vio que el coche de seguridad entraba en la pista: era el ¨²nico que hab¨ªa repostado.

Dos coches, los de Rosberg y Kubica, se vieron forzados a entrar a pesar de que el pit-lane estaba cerrado, con lo que acabaron siendo penalizados con un stop and go -parada en boxes de 10 segundos-. Y despu¨¦s, cuando el sem¨¢foro estuvo en verde, hubo una caravana de coches hacia los talleres para repostar. Algunos, como Massa y Raikkonen, perdieron ah¨ª todas sus opciones. El brasile?o, que entonces era l¨ªder, sali¨® disparado cuando el sem¨¢foro de Ferrari se puso en verde y arranc¨® la manguera de la gasolina, todav¨ªa enganchada a su coche. Un grav¨ªsimo error del equipo, que retras¨® tambi¨¦n el repostaje de Raikkonen. Massa no puntu¨® y el finland¨¦s se estrell¨® a dos vueltas del final cuando iba quinto. Hamilton repost¨® sin problemas, pero perdi¨® posiciones. Alonso pas¨® de golpe de ser el ¨²ltimo a ser el quinto, por detr¨¢s de Rosberg, Trulli, Fisichella y Kubica. El cielo se le abri¨®: Rosberg y Kubica ser¨ªan sancionados, Trulli y Fisichella deb¨ªan entrar en boxes. Iba a ser l¨ªder.

La situaci¨®n se produjo en la 34? vuelta. Era la primera vez esta temporada que Alonso lideraba una carrera. Y ten¨ªa grandes posibilidades de ganarla, porque cuando entr¨® por segunda vez a repostar llevaba una ventaja de 23,7 segundos sobre Coulthard y Hamilton, que deb¨ªan tambi¨¦n entrar. Sali¨® l¨ªder, cerrando pr¨¢cticamente el paso a estos dos pilotos. La carrera parec¨ªa decidida. Alonso llevaba 23,5 segundos a Rosberg y 25 a Hamilton cuando un accidente de Sutil oblig¨® a la segunda entrada del safety car. El asturiano perdi¨® esa ventaja. Pero nada m¨¢s. Quedaban 10 vueltas, y conserv¨® el primer puesto. "Cruc¨¦ los dedos y pens¨¦ que a¨²n pod¨ªa ocurrir algo". Pero no pas¨® nada. Gan¨® su 20? carrera, la primera desde Italia del a?o pasado.

Alonso es el n¨²mero uno... en popularidad (lalistaWIP)

El regreso del campe¨®n