El FMI apoya los planes de rescate con ayuda p¨²blica

La crisis se cuela en todos los rincones del mercado de cr¨¦dito. Y con cada marea de p¨¦rdidas y quiebras, el pensamiento econ¨®mico que ciment¨® la exuberancia financiera retrocede para dejar en primera l¨ªnea a los Gobiernos. "Es cada vez m¨¢s dif¨ªcil que el sector privado solucione esto solo, es necesaria la asistencia del poder p¨²blico", mantuvo ayer Jaime Caruana, director del departamento de mercados del Fondo Monetario Internacional (FMI).

Porque el contador de p¨¦rdidas sigue en marcha, como evidencian las dificultades extremas por las que pasa la banca a ambos lados del Atl¨¢ntico. En su ¨²ltimo informe sobre estabilidad financiera, el FMI eleva a 1,4 billones de d¨®lares (1,026 billones de euros, equivalente al PIB espa?ol) su estimaci¨®n de da?os. Es un 45% m¨¢s que lo calculado en abril. Y como destacaron los t¨¦cnicos del Fondo, hace referencia s¨®lo a p¨¦rdidas por pr¨¦stamos (sobre todo las hipotecas subprime) y t¨ªtulos de deuda sobre activos originados en EE UU.

Los bancos europeos habr¨ªan sufrido el 40% de las depreciaciones por t¨ªtulos sobre hipotecas basura, que rondan los 600.000 millones de d¨®lares en la cuenta total. Pero no hay a¨²n estimaciones sobre sus p¨¦rdidas por la devaluaci¨®n de otros t¨ªtulos de deuda.

Crisis sin precedentes

"Es una crisis sin precedentes", dijo Caruana, gobernador del Banco de Espa?a durante la ¨²ltima legislatura del PP. Tampoco tiene muchos precedentes el respaldo que brinda el FMI, al¨¦rgico hasta ahora a intervenciones p¨²blicas, a los planes de los Gobiernos. La crisis lo ha cambiado todo.

El Fondo calcula que sin una inyecci¨®n de dos billones de d¨®lares de dinero p¨²blico (1,5 billones de euros) el cr¨¦dito que se suministra a la econom¨ªa mundial retroceder¨¢. Y cree que al menos un tercio de esa cantidad debe aportarse como capital directo a cambio de participaciones estatales en los bancos.

Caruana sostuvo que el plan del Gobierno de EE UU "va en el camino correcto", aunque abog¨® por "m¨¢s equilibrio" entre la toma de capital de bancos y la compra de activos t¨®xicos, principal objetivo de la iniciativa estadounidense, valorada en 700.000 millones de d¨®lares. Y reclam¨® a la UE m¨¢s coordinaci¨®n y consistencia en sus decisiones. "La armonizaci¨®n de la garant¨ªa de los dep¨®sitos debe ser una prioridad", adujo.