Apostando por la generaci¨®n del Bicentenario

Los estudios realizados sobre la inmigraci¨®n ponen de relieve que hay tres factores principales que influyen en los procesos migratorios: las reducidas posibilidades de educaci¨®n, la falta de trabajo y el desajuste entre la formaci¨®n alcanzada y el trabajo disponible. Ante el convencimiento de que no hay un futuro mejor en el propio pa¨ªs, las personas se atreven a buscar nuevas alternativas en los pa¨ªses desarrollados. Tal vez no encuentren un oficio o profesi¨®n en consonancia con su formaci¨®n, pero al menos esperan lograr un trabajo que les permita vivir mejor, conseguir una educaci¨®n de mayor calidad para sus hijos y disponer de las prestaciones sociales del pa¨ªs de acogida.

Iberoam¨¦rica debe tener en el a?o 2021 la juventud mejor preparada de su historia

El Ecuador actual es un buen ejemplo de compromiso con la educaci¨®n

Hemos de valorar la riqueza potencial que supone la inmigraci¨®n, ya que favorece el encuentro entre culturas y lenguas, ayuda a conocer y respetar la diversidad existente y aporta beneficios econ¨®micos y sociales a los pa¨ªses y a sus ciudadanos. Pero no debemos olvidar que tambi¨¦n tiene enormes riesgos: descapitaliza a los pa¨ªses menos desarrollados, provoca tensiones en las familias y ahonda las diferencias entre los pa¨ªses. Adem¨¢s, no parece justo que las personas tengan que dejar su pa¨ªs muy a su pesar porque las puertas del futuro est¨¢n cerradas.

A pesar de los grandes esfuerzos realizados durante los ¨²ltimos a?os, la situaci¨®n de la educaci¨®n en la mayor¨ªa de los pa¨ªses iberoamericanos es grave: el porcentaje de personas analfabetas se sit¨²a en torno a los 34 millones de personas, el 40% de los j¨®venes y adultos de la regi¨®n no ha terminado la Educaci¨®n Primaria y mientras los alumnos cuyas familias se sit¨²an en el 20% de mayores ingresos logran estudiar m¨¢s de once a?os, aquellos que viven en el 20% de las familias m¨¢s pobres s¨®lo alcanzan como promedio algo m¨¢s de tres a?os.

Pero aunque los j¨®venes actuales tienen un promedio entre tres o cuatro a?os m¨¢s de formaci¨®n que sus padres, se mantiene un amplio desajuste entre el nivel educativo y el empleo. Ello es debido a las mayores competencias laborales exigidas, a la falta de vinculaci¨®n entre educaci¨®n y formaci¨®n t¨¦cnico-profesional y a los problemas en la regulaci¨®n del mercado de trabajo.

Con el fin de enfrentarnos colectivamente a estos retos urgentes, la Organizaci¨®n de Estados Iberoamericanos (OEI) para la Educaci¨®n, la Ciencia y la Cultura est¨¢ impulsando un enorme proyecto con motivo de los bicentenarios de las independencias de la mayor¨ªa de sus pa¨ªses miembros. Su aspiraci¨®n es lograr que la generaci¨®n de los bicentenarios sea la mejor preparada de la historia. El proyecto formula metas ambiciosas que deben lograrse en 2021, a?o en el que culminan su independencia buena parte de los pa¨ªses. Su consecuci¨®n va a exigir un gigantesco esfuerzo y un compromiso sostenido de todas las sociedades iberoamericanas.

El proyecto no establece s¨®lo unas metas y unos indicadores adaptados a la situaci¨®n de cada pa¨ªs. Tambi¨¦n incluye la creaci¨®n de un Fondo para la Cohesi¨®n Educativa que ayude a los pa¨ªses m¨¢s pobres a lograr las metas establecidas. En la misma direcci¨®n se plantean un conjunto de programas de acci¨®n que faciliten el logro de las principales metas. Entre ellos conviene destacar el destinado al fortalecimiento de la Formaci¨®n Profesional, lo que puede contribuir, si est¨¢ acompa?ado de otras iniciativas educativas y laborales, a que los j¨®venes encuentren atractivo formarse y trabajar en su pa¨ªs.

Un ejemplo claro de este compromiso con la educaci¨®n se manifiesta en Ecuador. La Constituci¨®n de 2008, aprobada por los ecuatorianos mediante refer¨¦ndum el 28 de septiembre pasado, est¨¢ atravesada por la idea del buen vivir (sumak kawsay, en quichua). El buen vivir es un concepto ancestral de los pueblos andinos y tiene relaci¨®n con una vida digna, en la que el ser humano est¨¦ en armon¨ªa consigo mismo, con su comunidad y con la naturaleza, entendida como la Madre Tierra, la Pachamama. En este marco, la Constituci¨®n declara como primer deber del Estado, la garant¨ªa para el efectivo goce de los derechos, "en particular la educaci¨®n, la salud, la alimentaci¨®n, la seguridad social y el agua para sus habitantes". (Art. 3, n? 1).

Esta Constituci¨®n blinda el financiamiento del sector educativo. As¨ª, la disposici¨®n transitoria decimoctava, dice: "El Estado asignar¨¢ de forma progresiva recursos p¨²blicos del Presupuesto General del Estado para la educaci¨®n inicial, b¨¢sica y el bachillerato, con incrementos anuales de al menos el 0,5% del Producto Interior Bruto hasta alcanzar un m¨ªnimo del 6% del Producto Interior Bruto". Esta transitoria transforma en precepto constitucional la pol¨ªtica octava del Plan Decenal de Educaci¨®n, aprobado tambi¨¦n mediante refer¨¦ndum el 26 de noviembre de 2006 y que ha permitido que la participaci¨®n del sector educativo sea hoy del 3,5% del PIB, cuando en el 2005 era del 2,11%.

La Constituci¨®n del 2008 recoge en sus preceptos las ocho pol¨ªticas del Plan Decenal y con ello profundiza la institucionalizaci¨®n de un proceso destinado a la universalizaci¨®n de la educaci¨®n b¨¢sica y el bachillerato y a la consecuci¨®n de una educaci¨®n p¨²blica de calidad y calidez. Con ella se refrendan los programas de eliminaci¨®n de barreras para el ingreso y la permanencia: entrega de textos escolares gratuitos desde primero a d¨¦cimo, entrega de uniformes a ni?os y ni?as de primero a s¨¦ptimo del sector rural, supresi¨®n del mal llamado "aporte voluntario", aumento de la cobertura del programa de alimentaci¨®n escolar, etc¨¦tera.

Asimismo, en Ecuador se est¨¢n construyendo las unidades educativas del milenio, que son instituciones completas (desde educaci¨®n inicial hasta bachillerato) que responden a un proyecto arquitect¨®nico novedoso, equipadas con la m¨¢s alta tecnolog¨ªa y que desarrollan variados proyectos educativos. Junto a ellas, desde el 2006 -primer a?o del Plan- se ha recuperado la abandonada infraestructura escolar reparando alrededor de 5.900 locales, esto es aproximadamente un tercio del total.

Al mismo tiempo, se han generado 20.000 nuevas partidas docentes, lo que marca una enorme diferencia con el pasado reciente puesto que desde 1997 hasta el 2005 no se cre¨® ni una sola partida docente. Recientemente, en el a?o 2006, fueron creadas 1.900 partidas nuevas. Para la adjudicaci¨®n de las partidas se construy¨® el m¨¢s riguroso sistema de ingreso al magisterio que haya existido en el pa¨ªs.

Los esfuerzos que hoy realiza el Ecuador para lograr una educaci¨®n p¨²blica de calidad y calidez har¨¢n de ¨¦sta un motivo de esperanza para la gente y sus resultados ser¨¢n visibles en el mediano y el largo plazo. Entre tanto, tenemos la obligaci¨®n ¨¦tica de aceptar la realidad de la migraci¨®n. De hecho, la nueva Constituci¨®n, en su art¨ªculo 9, indica que los extranjeros en Ecuador "tendr¨¢n los mismos derechos y deberes" que los ecuatorianos. Contra la doble moral del mundo desarrollado que promueve el libre flujo del capital y las mercanc¨ªas mientras erige todo tipo de muros para detener el tr¨¢nsito de las personas, el Gobierno ecuatoriano sostiene que no existen seres humanos "ilegales" y que los transe¨²ntes del mundo deben ser tratados con dignidad.

Este art¨ªculo lo firman ?lvaro Marchesi, secretario general de la Organizaci¨®n de Estados Iberoamericanos para la Educaci¨®n, la Ciencia y la Cultura (OEI), y Ra¨²l Vallejo, ministro de Educaci¨®n de Ecuador.