"?D¨®nde est¨¢ mi dinero?"
Los inversores espa?oles afectados por la bancarrota de Lehman se movilizan
Muchos son inversores de perfil conservador. Otros, no. Hay jubilados con unos ahorrillos y empresarios pudientes. Unos han visto desvanecerse 50.000 euros y tambi¨¦n los hay pillados con 1,5 millones. Pero todos creyeron que destinar su capital a comprar un producto garantizado implicaba que tal vez no fueran a ganar nada, pero nunca que iban a perderlo todo. Es lo que les ha ocurrido por ahora con la quiebra de Lehman Brothers. En Espa?a se calcula que las inversiones relacionadas con el ¨¢ngel ca¨ªdo de Wall Street podr¨ªan llegar a los 3.000 millones de euros, aunque las cifras estimadas por las distintas plataformas son contradictorias.
Los afectados, convertidos en acreedores improvisados de Lehman pensaron que s¨®lo hac¨ªan tratos con la entidad que les vendi¨® el producto, no con otra de la que sostienen que no se les habl¨® cuando se les present¨® la inversi¨®n y que result¨® ser su emisor y garante: Lehman Brothers.
Muchos dicen que ignoraban con qu¨¦ entidad hac¨ªan realmente el trato
"Entre los afectados, cada caso es un mundo. Por eso hemos empezado a clasificar a los clientes seg¨²n el tipo de producto adquirido, de la cantidad invertida y hasta de su cultura financiera, porque las soluciones jur¨ªdicas ser¨¢n en cada caso distintas", explica Jos¨¦ Mar¨ªa de Pablo, abogado del bufete Mas y Calvet, que lleva una semana entrevistando a afectados en Madrid. "No descartamos emprender tanto acciones civiles como penales", a?ade. "Como m¨ªnimo, se ha pecado de desinformaci¨®n por parte de las entidades comercializadoras de esos productos en Espa?a, pero no creemos que pueda hablarse de estafa", opina Jordi Calvo, del despacho Roca Junyent, en Barcelona.
La Asociaci¨®n de Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros (Adicae), a la que se han dirigido 400 afectados, subraya en todo caso que "no se puede colocar a la gente de perfil conservador productos complejos como un bono estructurado, que no puede entender. A veces, ni el propio empleado del banco lo entend¨ªa bien", seg¨²n su vicepresidente, Fernando Herrero.
El malestar se plasmar¨¢ hoy en Madrid, en una primera concentraci¨®n ante la sede del Banco de Espa?a. Un lugar simb¨®lico, ya que ¨¦ste vigila la solvencia de la banca, no la inversi¨®n del cliente.
Los primeros datos apuntan que una parte importante de las inversiones relacionadas con Lehman se contrataron con Banif, filial del Santander, pero bonos de Lehman, unos m¨¢s y otros menos, vend¨ªa casi todo el mundo, como han reconocido Bankinter, Citibank, BBVA, Bancaja, Altae (Caja Madrid) o Sabadell. En algunas entidades circulan notas internas -como la de UGT en Citibank- denunciando el "agobio" de la plantilla para vender notas estructuradas hasta el punto de que "ya no se sab¨ªa a qui¨¦n ni c¨®mo colocarlas". Preguntado al respecto, Citibank se remite a un comunicado en que muestra comprensi¨®n por la "preocupaci¨®n y ansiedad" de los clientes y en la que defiende que les da "toda la informaci¨®n" y que se trabaja por un "correcto asesoramiento".
Y es que muchos de los clientes acusan a su entidad de no informarles lo bastante sobre la procedencia del bono y sobre su riesgo. Sobre todo en la presentaci¨®n promocional inicial, en la que en algunos casos no se precisa que ser¨¢ otra la entidad emisora y garante del producto vendido (en otros casos, s¨ª se especifica, como ha constatado este peri¨®dico). El inversor decid¨ªa sobre esa presentaci¨®n primera. Luego, el banco llamaba al cliente para que pasara a firmar un contrato que algunos le¨ªan a fondo y otros, no. En el contrato firmado s¨ª aparece siempre Lehman, el riesgo de este banco emisor (que asume el inversor) y la ausencia de responsabilidad del banco comercializador.
Nomura, que se ha quedado con los negocios de Lehman en Europa, no ha hablado de quedarse con sus deudas. Los inversores siempre pueden dirigirse al servicio de reclamaciones de la CNMV, pero ¨¦sta subraya que los informes que concluya caso por caso no obligan a la entidad comercializadora a resarcir al cliente de la inversi¨®n.
"La operaci¨®n no era de riesgo, ?es que quebr¨® el banco!"
Fuentes de Banif, entidad muy activa en la comercializaci¨®n de productos de Lehman en Espa?a, recalcan que "en todo momento hemos cumplido escrupulosamente las exigencias de la Comisi¨®n Nacional del Mercado de Valores (CNMV) sobre distribuci¨®n de productos financieros que marca el manual de 2003 y recogida despu¨¦s en las nuevas normativas". La entidad recalca que los productos estructurados de Lehman "son aptos para un inversor conservador. ?Lo que ha ocurrido es que ha quebrado el banco emisor! No tiene que ver con el producto". Banif reh¨²sa hacer declaraciones sobre las quejas de los clientes -"porque hablamos directamente con ellos"-.
Algunas de las entidades consultadas se?alaron que las presentaciones comerciales de los productos estructurados vendidos a los clientes no llevan el nombre del emisor porque primero se elige el producto y el emisor no se elige hasta despu¨¦s.
"Para m¨ª, 15.000 euros es mucho"
En septiembre de 2007 ya hab¨ªa estallado la tormenta financiera en EE UU, aunque nadie acert¨® sobre lo que se avecinaba. Fue entonces cuando M. J. L., de 44 a?os, economista, se hizo con varios bonos Semestre X 5 que le vendi¨® Citibank, un producto a cinco a?os referenciado a los ¨ªndices DJ Eurostoxx 50 y Nikkei 225, con el 100% del capital protegido al vencimiento. Invirti¨® en ellos 15.000 euros. "Para m¨ª, es mucho dinero", explica con expresi¨®n desolada. Su perfil de inversora es P2, "Sensible al riesgo", conservador. "Ya hab¨ªa le¨ªdo sobre las subprime y la crisis, pero no pens¨¦ que Lehman Brothers tuviera nada que ver conmigo", dice, convencida de que debe entend¨¦rselas con su interlocutor, el Citibank, aunque el nombre de Lehman figure en el documento que tras varios d¨ªas pas¨® a firmar. En ¨¦l se dice adem¨¢s que el inversor asume "el riesgo de cr¨¦dito completo de la entidad emisora".
"Hab¨ªa perdido en Bolsa y quer¨ªa un bono seguro"
Miguel ?ngel Gil, un empresario de 42 a?os residente en Madrid y que acaba de perder 200.000 euros, admite que invertir "implica asumir cierto riesgo", si buscas rentabilidad. "En el pasado hab¨ªa jugado en la Bolsa y perdido dinero, s¨¦ a lo que uno se expone. Por eso quer¨ªa un producto garantizado, m¨¢s seguro", explica, antes de preguntarse: "?Si a Lehman Brothers le hubiera ido estupendamente, me hubieran dado mayor rentabilidad de la prevista? No, la rentabilidad prevista era el Eur¨ªbor a tres meses m¨¢s un punto. Pues entonces, si ahora que las cosas han ido mal, el ¨²nico peor escenario que asumo es el que he firmado: que si en un d¨ªa bajaba el ¨ªndice Eurostoxx un 15%, algo que no ha ocurrido ni cuando se cayeron las Torres Gemelas, perder¨ªa el 20% del capital. ?Por qu¨¦ tengo que perderlo todo?". Gil quiere que Banif, el comercializador, responda de su inversi¨®n.
"Ahora tengo que empezar desde cero"
Mont¨® su propio negocio de hosteler¨ªa en Santander y le fue bien. En abril de 2007 lo vendi¨® y al mes siguiente invirti¨® todo lo ganado -100.000 euros en un bono estructurado de Lehman, entre otros- para tratar de vivir con las rentas. "Ahora no tengo ni dinero ni negocio, tengo que empezar de cero", explica de D. G., de 37 a?os, que acaba de impulsar una de las plataformas de afectados. Compr¨® a trav¨¦s de Banif un bono estructurado referenciado a los valores de BBVA y Santander a siete a?os, garantizado, y dice que no supo que el emisor era otra entidad, Lehman Brothers, hasta que su oficina le telefone¨® para informarle de la bancarrota del banco americano, pese a que el nombre de Lehman figuraba en el contrato. "Nos lo vendieron como un producto sin ning¨²n riesgo, y ahora lo hemos perdido. La crisis americana est¨¢ aqu¨ª. Existimos", lamenta.
"Est¨¢ en juego el 80% de mi patrimonio"
Carlos (nombre ficticio) G., de Barcelona, est¨¢ a¨²n digiriendo la llamada que recibi¨® de su oficina de Banif, hace unas semanas. Los 150.000 euros invertidos en aquel bono estructurado hab¨ªan quedado, en el mejor de los casos, en el aire por el fiasco de Lehman Brothers. Pierde m¨¢s que sus ahorros. "Yo puse 50.000 euros para invertir y me animaron a prestarme 100.000 m¨¢s para invertirlos, me dijeron que no me preocupara, que en caso de problemas, yo s¨®lo ten¨ªa que responder por los 50.000, pero no es cierto". Ahora, dice la entidad le ha eximido de pagar las cuotas del pr¨¦stamo durante los pr¨®ximos meses.
Este profesional del sector industrial se declara "un inversor conservador, de poco riesgo". Sabe que firm¨® un contrato que dice que asume ese riesgo que en realidad no busca, pero critica falta de transparencia por parte de la entidad.
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