La residencia de Alcorc¨®n: "Las chicas no dan abasto. Son muy pocas"

Al final del pasillo amarillo de la primera planta de la residencia concertada Amma Alcorc¨®n hay una sala grande con mesas en la que descansan cerca de 40 ancianos, todos en sus sillas de ruedas. Hay una televisi¨®n encendida, pero ninguno la mira. Algunos balbucean palabras ininteligibles, reclamando la atenci¨®n de quien pasa a su lado, pero la mayor¨ªa est¨¢ en silencio. Una mujer permanece inm¨®vil con la cabeza apoyada en la mesa. S¨®lo una persona les cuida. En el tiempo que permaneci¨® all¨ª un periodista de EL PA?S ayer por la tarde, otra trabajadora iba y ven¨ªa del sal¨®n.

"No siempre podemos tener m¨¢s trabajadores", responde el centro

"?ste es el principal problema que tenemos en la residencia, las chicas no dan abasto. Son muy pocas", explicaba la hija de una residente mientras enfilaba el pasillo con su madre. Apenas unos metros m¨¢s adelante, la cuidadora que sale y entra se sincera con unos familiares: "Para este pasillo estamos s¨®lo tres", se justifica. "Habr¨¢ que dar cuartelillo a la empresa", le responden. En el pasillo hay 20 habitaciones. Algunas est¨¢n ocupadas por dos mayores. Otras, por uno.

La residencia est¨¢ bajo la lupa tras las denuncias de los familiares de dos ancianas: una de ellas muri¨® en el hospital despu¨¦s de caerse, la otra sufre una necrosis en un pie. Ambos casos fueron denunciados ante los juzgados y la comisar¨ªa, respectivamente, por considerar que la residencia actu¨® de manera negligente. El Ayuntamiento de Alcorc¨®n recibi¨® s¨®lo en el d¨ªa de ayer una quincena m¨¢s. Cinco de ellas por escrito. En todos los casos existe una coincidencia: la falta de personal provoca una mala atenci¨®n y problemas de higiene, as¨ª como "descuidos" al suministrar medicamentos. Excepto en uno de los casos, los pacientes pertenecen al ¨¢rea privada del centro.Un paseo por cada una de las dos plantas de la residencia en una tarde como la de ayer basta para darse cuenta de la escasez de personal encargado directamente del cuidado de los mayores. Entre dos y tres por cada pasillo, en el que hay 20 habitaciones, unas dobles y otras individuales, alrededor de 30 ancianos. No faltan sin embargo los familiares de los pacientes, que van y vienen de un lado para otro. "Hoy hay mucha m¨¢s gente. Lo que ha salido en los medios estos d¨ªas ha preocupado", explican algunos de los visitantes.

El pasado 17 de octubre un familiar de una anciana de 87 a?os con demencia senil escribi¨® una carta al subdirector general de Programas y Centros de la Consejer¨ªa de Familia para denunciar "las grandes deficiencias, sobre todo falta de personal, y las continuas irregularidades" con las que funcionaba el centro y solicitaba que tomase cartas en el asunto antes de que pudiera producirse "alg¨²n suceso irremediable". Estos mismos familiares ya hab¨ªan presentado dos reclamaciones ante la direcci¨®n del geri¨¢trico los d¨ªas 6 y 12 de septiembre. El 3 de octubre, el Gobierno regional admit¨ªa en otra misiva que hab¨ªa solicitado informaci¨®n detallada a la residencia.

Pero hay m¨¢s reclamaciones. Muchas de ellas por escrito ante la propia residencia: el 8 de marzo por una supuesta mala administraci¨®n de la medicaci¨®n a una paciente, el 19 de septiembre porque la falta de personal hab¨ªa provocado que una anciana no pudiese recibir su sesi¨®n de rehabilitaci¨®n.

Tambi¨¦n existen cartas ante la direcci¨®n de la empresa que gestiona el centro. Una de ellas, firmada por los hijos de Miguel ?ngel P¨¦rez Heras, enfermo de Alzheimer, denunciaba que su padre se hab¨ªa ca¨ªdo hasta en cinco ocasiones en 18 meses, o que no se cuidaba correctamente su higiene personal. En su respuesta, la empresa reconoc¨ªa que ser¨ªa la m¨¢s interesada en tener m¨¢s trabajadores, si bien, indicaba, "no siempre podemos hacerlo". Adem¨¢s dejaba claro que el centro "cumple los ratios de personal que establece la Comunidad".

Las quejas no son s¨®lo individuales. La comisi¨®n de familiares del centro envi¨® en junio del pasado a?o a la empresa una circular en la que se quejaban por la escasez de personal. "No obtuvimos respuesta", explic¨® ayer uno de los miembros, Fernando Ruiz, quien anunci¨® que la pr¨®xima semana se celebrar¨¢ una asamblea de familiares en la que se pedir¨¢ el visto bueno a una nueva carta de queja, dirigida a la Comunidad de Madrid y al Ayuntamiento de Alcorc¨®n.

Precisamente el regidor de la localidad, el socialista Enrique Cascallana, pidi¨® ayer m¨¢xima transparencia al Ejecutivo regional en la inspecci¨®n de la residencia y anunci¨® que el Ayuntamiento pondr¨¢ en marcha una comisi¨®n de investigaci¨®n que estar¨¢ presidida por la oposici¨®n. El Gobierno de Esperanza Aguirre insisti¨® en que la residencia tiene abierto un expediente desde el pasado 7 de abril "por problemas de personal".

As¨ª es el asilo de Alcorc¨®n acusado de negliencia