'Road movie' por corredoiras

La protagonista de esta pel¨ªcula de aventuras es una rubia espectacular que, con su primera experiencia en el cine, ya se ha ganado el derecho a que digan de ella que es una aut¨¦ntica profesional. En sus escenas en los lugares orteganos de Loiba y Porto de Espasante no tuvo que repetir ni una sola toma y, como se puede advertir en el copi¨®n de Crebinsky, posee una mirada impactante, una apasionada mezcla de firmeza y ternura.

Esta estrella cinematogr¨¢fica en ciernes, que responde al nombre de Kitana y pesa cerca de 500 kilos, acumula varias jornadas de traj¨ªn y de desplazamientos entre su casa, en Espasante, y Portomar¨ªn, donde su personaje, Mucha, vuelve a cobrar protagonismo. Ella se lo toma con bastante aplomo y procura no ponerse nerviosa, aunque a veces, cosas de las estrellas, bufe un poco.

La estrella es una rubia espectacular. Pesa 500 kilos y se llama 'Kitana'

"M¨¢s que los hermanos Coen, somos los hermanos Coren"

Bien atento a todos sus gestos est¨¢ Coco, su due?o, porque Kitana, por cierto, es una vaca, la ¨²nica compa?¨ªa que los hermanos Feodor (Miguel de Lira) y Mija¨ªl (Sergio Zearreta, el cantante de Lamatumb¨¢) tuvieron desde que, siendo ni?os, perdieron a sus padres. Adem¨¢s, es una ayuda excelente en su tarea cotidiana, que no es otra que la de andar ¨¢s crebas, es decir, recogiendo los objetos imprevisibles que las mareas dejan en la costa, como los restos de los naufragios.

De ah¨ª que este gui¨®n que narra sus avatares se desarrolle en cinco lenguas: el idioma vaca, un c¨®digo de gestos y gru?idos con el que se comunican los hermanos entre s¨ª y con su madre de cuatro patas, ruso, en honor a las ra¨ªces eslavas de la familia Crebinsky-Cribeiro, gallego, castellano, alem¨¢n e ingl¨¦s. Aunque nunca lleguen a enterarse, estos R¨®mulo y Remo en versi¨®n galaica se convierten en testigos de la historia, y casi protagonistas de la Segunda Guerra Mundial, en el deambular que retrata la pel¨ªcula a modo de road movie, no de carretera, que no hab¨ªa en la Galicia de la primera mitad del siglo XX, sino de corredoira. "Van sin saber ad¨®nde y acaban descubriendo de d¨®nde vienen", explica el director, Enrique Otero, que con Crebinsky se estrena en el terreno del largometraje.

Miguel de Lira comparte con ¨¦l la realizaci¨®n y el gui¨®n. "Es la historia de nuestra amistad", bromean. Sus respectivas empresas, Control Z y Cabo San Lourenzo, son, adem¨¢s, las productoras ejecutivas del proyecto, junto con Zircozine, la factor¨ªa reci¨¦n creada por Lu¨ªs Tosar y Farruco Castrom¨¢n, que tambi¨¦n cuentan con peque?os papeles. Para las tres productoras es su primera pel¨ªcula, "una cinta 100% gallega", remarcan. "Al ver las caracter¨ªsticas de la producci¨®n, un tipo de Madrid nos dijo que ¨¦ramos como los hermanos Coen. Nosotros le respondimos que, m¨¢s bien, somos los hermanos Coren", bromea el actor. Con algo m¨¢s de un mill¨®n de euros, la pel¨ªcula se considera de bajo presupuesto; eso y el tiempo r¨¦cord de seis semanas entre septiembre y octubre para el rodaje. Celso Bugallo, Patricia de Lorenzo y Iolanda Mu¨ª?os completan el elenco principal.

Tras la operaci¨®n de soltar una boya en la playa de Esteiro, De Lira presenta sus quejas por la falta de especialistas en las escenas de riesgo. Los acantilados de O Pic¨®n imponen mucho respeto y con la mar rizada de octubre, la cosa pinta mal. "El 70% de la pel¨ªcula transcurre en escenarios naturales, eso es una aventura en s¨ª misma que casa perfectamente con la l¨®gica de los personajes, te?ida de realismo fantasioso", explica Otero quien, ligado personalmente a estos parajes, no ha podido renunciar a su belleza apabullante en sustituci¨®n de los enclaves de la Costa da Morte en los que rod¨®, en 2002, el cortometraje que ahora deviene en pel¨ªcula.

Algunos de los interiores se recrean en la lonja de Espasante, un edificio inaugurado en 2001 que no ha tenido m¨¢s actividad aparte del rodaje anterior. Para los vecinos de la localidad, la pel¨ªcula es toda una atracci¨®n que incluso rivaliza con el cerdo Ant¨®n, que se pasea por sus calles como un marqu¨¦s y llama a todas las puertas reclamando comida. Lo de soltar un cerdo por el pueblo antes de sortearlo a beneficio de la comisi¨®n de fiestas es una tradici¨®n centenaria. Todos arriman el hombro: la ingenier¨ªa dom¨¦stica es cosa de Macanudo, Pizano aporta cuerdas y canciones, Teresa cocina para ellos a diario, Coco les present¨® a Kitana. Quiz¨¢ porque la historia de estos hermanos les recuerda a Agapito, un crebeiro legendario de Espasante.