G¨¦nero negro (Gans of Pa¨ªs Valenci¨¤)
Sinceramente conf¨ªo en que alguien de la nueva narrativa valenciana (varios, periodistas) est¨¦ tomando notas acerca del creciente c¨²mulo de dislates que jalonan nuestra vida pol¨ªtica. Menudo jugo, vaya mina de ideas para el g¨¦nero negro... ?y qui¨¦n necesita la imaginaci¨®n?
La ¨²ltima peripecia es la de los empresarios-periodistas tratando de derramar el cuerno de la abundancia sobre un abogado denunciante de Carlos Fabra, unto que deb¨ªa quedar convenientemente grabado y que se supone podr¨ªa ser utilizado para chantajear al inc¨®modo letrado. Tapadle la boca, habr¨¢n encargado los padrinos de una operaci¨®n que Mortadelo y Filem¨®n ejecutar¨ªan con mayor solvencia.
En nuestra Gomorra particular, como en las dem¨¢s, las cosas funcionan as¨ª: se compran votos y voluntades y se venden montes y playas. Y si no se puede sobornar, se amenaza y acogota a ver si cuela. En muchos casos ni siquiera necesitan llegar a la segunda fase ya que ediles traidores (?en qu¨¦ cloaca se les habr¨¢ reclutado para las listas?) hacen gala de sincretismo ideol¨®gico y se pasan con armas y bagajes a los beneficios de la recalificaci¨®n. Todos muy honrados, en la intimidad.
Igual resulta que es la crisis la que salvar¨¢ del capitalismo ("can¨ªbal" seg¨²n Manuel Rivas, "de casino", seg¨²n Joan Romero) lo poco que a¨²n queda por destruir en nuestro territorio. Pero lo hecho, hecho est¨¢, y es muy grave. No s¨®lo la destroza f¨ªsica, sino tambi¨¦n la moral, la ponzo?a inoculada aqu¨ª y all¨¢. El a?o pasado Greenpeace contabiliz¨® que hab¨ªa 354 cargos p¨²blicos implicados en corrupci¨®n urban¨ªstica, entre ellos varios alcaldes. La cifra no ha hecho m¨¢s crecer, y muchos de ellos nos corresponden. No es que nuestros aprovechados sean especiales, distintos de los de Mallorca o Marbella, pero no me negar¨¢n que algunos de estos sospechosos tienen su aquel. Sin ¨¢nimo de exhaustividad, recordemos las empresas fantasma de Terra M¨ªtica; los jaleos en Orxeta y X¨¤bia; las investigaciones en Ontinyent; los y las tr¨¢nsfugas, de Benidorm a Calp pasando por El Puig; los alcaldes (o ex) de Vila-real y Burriana; el ex alcalde y falso doctor de La Vila Joiosa; la complicidad paterno-filial en Zarra; Carlos Fabra y su socio chivato, los l¨ªos de alcoba, su ch¨®fer, su sobrino guardaespaldas presunto delincuente, aquellos falsos periodistas que actuaron de diques para contener a una reportera preguntona... Sin olvidar Alicante (Alperi) y La Vega Baja, que ya antes de los recientes l¨ªos en San Fulgencio y Bigastro ofrec¨ªa una buena cosecha: Torrevieja, Medina con chal¨¦ y Rolls; Cartagena, las monjitas saqueadas y sus supuestas primas ¨²nicas... pero primas de las opacas al fisco, no primas hermanas, aunque casi siempre queda en familia. Y toda familia ha de tener quien le cante, solo que ni Luis Aguil¨¦ ni Julio Iglesias son Frank Sinatra. Ser¨¢ que en el fondo a¨²n nos queda mucho que aprender...
PD. El mi¨¦rcoles se celebr¨® una jornada por la dignidad laboral y profesional de los periodistas. Aclaremos que los medios vendidos al mejor postor y quienes escriben o hablan al dictado no tienen nada que ver con esta profesi¨®n. Que se acojan al convenio de g¨¢ngsteres y babosos.
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