Tira y afloja sobre la fibra ¨®ptica
Bruselas y la CMT se enzarzan a prop¨®sito de la nueva red de Telef¨®nica
Pocas veces algo que a¨²n s¨®lo est¨¢ en los planos hab¨ªa provocado tanta pol¨¦mica. Telef¨®nica se apresta a tender una nueva red de acceso a Internet que responda a las necesidades tecnol¨®gicas del momento como la televisi¨®n de alta definici¨®n, las descargas masivas de datos o el v¨ªdeo de nueva generaci¨®n. Su actual red basada en la tecnolog¨ªa ADSL, que se acopla al par de l¨ªnea de cobre mediante m¨®dems, se ha quedado obsoleta. En principio, todo el mundo deber¨ªa estar a favor de la banda ancha de alta velocidad. Pero nada m¨¢s lejos de la realidad.
Los rivales de Telef¨®nica -con alguna excepci¨®n como Jazztel- se han puesto en pie de guerra (Orange llev¨® el asunto a la Audiencia Nacional), porque quieren tener un acceso regulado a esa nueva red. Es decir, poder alquil¨¢rsela a Telef¨®nica para luego revender servicios a sus clientes, en un modelo id¨¦ntico al que se aplica a la red de ADSL. Telef¨®nica argumenta de que ya est¨¢ cansada de que parasiten sus infraestructuras y, que el que quiera red, que invierta.
Reding dice que no aceptar¨¢ vacaciones normativas para el 'Internet veloz'
La CMT resolver¨¢ en pleno proceso de renovaci¨®n de su consejo
En circunstancias normales, el asunto deber¨ªa quedar zanjado por el regulador, pero resulta que no hay s¨®lo uno, sino dos: la Comisi¨®n del Mercado de Telecomunicaciones (CMT), con sede en Barcelona; y la Comisi¨®n Europea, con sede en Bruselas. Y ambos tambi¨¦n se llevan a matar.
La CMT se alinea con las tesis de Telef¨®nica. Tras su an¨¢lisis de los mercados, ha autorizado a la multinacional a comercializar la fibra ¨®ptica hasta el hogar sin m¨¢s obligaciones que poner a disposici¨®n de sus rivales las canalizaciones necesarias para garantizar que puedan tender su propia red.
Para curarse en salud, y evitar que Telef¨®nica aproveche la nueva legislaci¨®n para extender la oferta comercial a todos sus clientes, la CMT ha decidido que seguir¨¢ habiendo oferta mayorista regulada hasta los 30 megabits por segundo (Mbps). Con la salvedad que divide el territorio en dos: las ¨¢reas con suficiente competencia (en las que Telef¨®nica tiene menos del 50% del mercado), y el resto. S¨®lo en las segundas se aplicar¨¢ la norma de los 30 Megas.
Telef¨®nica se las promet¨ªa muy felices cuando recibi¨® el pasado jueves el permiso definitivo de la CMT. La alegr¨ªa le dur¨® poco. Su bestia negra preferida, la Comisi¨®n Europea, asegur¨® que no puede aceptar "unas vacaciones normativas" para el Internet veloz (a partir de 30 megas). Tampoco le satisfac¨ªa la divisi¨®n territorial "arbitraria" que hace la CMT entre zonas con y sin suficiente competencia. "Si se aplica esta medida, los dem¨¢s operadores no podr¨¢n competir eficazmente con Telef¨®nica", dijo la comisaria de Competencia, Neelie Kroes, la misma que instig¨® la multa a Telef¨®nica por 152 millones. Su compa?era de Telecomunicaciones, Viviane Reding, ha dado dos meses a la CMT para que modifique su propuesta, bajo la amenaza de retirarla. Para complicar a¨²n m¨¢s las cosas, la negociaci¨®n entre la UE y la CMT se har¨¢ en pleno proceso de renovaci¨®n de m¨¢s de la mitad del organismo regulador nacional. O sea, que la discusi¨®n tambi¨¦n tendr¨¢ su punto partidario y su cuota nacionalista. -
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