Matilde Ucelay Ma¨®rtua, la primera arquitecta espa?ola
Obtuvo el Premio Nacional de Arquitectura 2004
En la madrugada del pasado lunes falleci¨® en Madrid Matilde Ucelay Ma¨®rtua, la primera mujer titulada en arquitectura en Espa?a, en 1936, y tambi¨¦n la primera en ejercer una carrera profesional plena: m¨¢s de 120 proyectos realizados ¨ªntegramente por ella misma con la sola ayuda ocasional de un aparejador, algunos en el extranjero, en m¨¢s de 40 a?os de ejercicio profesional. La mayor parte de sus obras son casas unifamiliares, como la que construy¨® para Jos¨¦ Ortega Spottorno, pero tambi¨¦n proyect¨® f¨¢bricas, laboratorios, almacenes y tiendas. En sus obras destaca la sensibilidad por el uso y el cuidado en los detalles constructivos. Por las ma?anas, Ucelay visitaba las obras; por las tardes trabajaba en el tablero. Una trayectoria excepcional reconocida por el Premio Nacional de Arquitectura 2004.
Nacida en 1912, Ucelay pertenece a esa generaci¨®n de mujeres de la burgues¨ªa ilustrada espa?ola que, educadas en ambientes liberales, art¨ªsticos y profesionales, empiezan a acceder a las universidades en las primeras d¨¦cadas del siglo XX. Su padre, Enrique, es abogado; a su madre, Pura, la encontramos compartiendo escena con Federico Garc¨ªa Lorca. Ucelay estudia brillantemente el bachillerato en el Instituto Escuela, que simultanea con la carrera de piano, y, en 1931, ingresa en la Escuela de Arquitectura de Madrid. All¨ª coincide con F¨¦lix Candela, a quien unir¨¢ una amistad de por vida, y con Fernando Chueca Goitia, con quien, estudiando durante un verano, realiza dos cursos en uno. Cuando termina la carrera, sus compa?eros le ofrecen un homenaje al que asiste Am¨®s Salvador, ministro de Gobernaci¨®n.
En 1937 aparece como secretaria del Colegio de Arquitectos de Madrid, siendo presidente Eduardo Robles Piquer. El colegio, cerrado en los inicios de la guerra, hab¨ªa vuelto a abrir sus puertas por iniciativa personal de Ucelay. Se casa en Valencia en 1937 con Jos¨¦ Ruiz Castillo, editor de los m¨¢s importantes autores de las generaciones del 98 y del 27, y tiene dos hijos. En 1940 es depurada por la Direcci¨®n General de Arquitectura y condenada en Consejo de Guerra a inhabilitaci¨®n perpetua para cargos p¨²blicos, directivos y de confianza, y, durante cinco a?os, para el ejercicio privado de la profesi¨®n. Como consecuencia de ello nunca recibi¨® encargos p¨²blicos y sus primeros proyectos no pudieron llevar su firma.
Las mujeres de la generaci¨®n de Ucelay abrieron en Espa?a caminos en las distintas ramas del arte, la ciencia y las profesiones, aunque muchas de ellas abandonaron o simplemente no llegaron a ejercer sus profesiones en el ambiente hostil del franquismo. No fue el caso de Ucelay. M¨¢s bien al contrario, en una ¨¦poca en la que las mujeres carec¨ªan de derechos legales, Ucelay, con gran inteligencia, dedicaci¨®n y car¨¢cter, ejerci¨® plenamente una profesi¨®n liberal de importantes responsabilidades hasta su jubilaci¨®n en 1981. Sirva la integridad de su trayectoria ejemplar de modelo y referente a las nuevas generaciones de arquitectos, y sobre todo, de arquitectas, que desde este a?o son m¨¢s de la mitad del alumnado en nuestras escuelas.
In¨¦s S¨¢nchez de Madariaga, Doctora Arquitecta. Profesora Titular de la Escuela de Arquitectura de Madrid.
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