"El Gobierno no ha pagado un c¨¦ntimo por el rescate de Cend¨®n"
Apenas ha dormido en los ¨²ltimos d¨ªas, dedicados a negociar la liberaci¨®n del fot¨®grafo gallego Jos¨¦ Cend¨®n, secuestrado por piratas somal¨ªes. Anoche, el reportero dorm¨ªa en una de las habitaciones de su residencia en Nairobi y Nicol¨¢s Mart¨ªn Cinto, embajador espa?ol en Kenia, pod¨ªa, por fin, descansar. Pero el diplom¨¢tico, pieza clave tambi¨¦n en la negociaci¨®n para la liberaci¨®n de los marineros del Playa de Bakio y las cooperantes secuestradas a finales de 2007 en Somalia, sabe que corre el riesgo de nuevos sobresaltos. Teme que en cualquier momento pueda volver a producirse otro secuestro.
A Mart¨ªn Cinto, gallego de 64 a?os, nunca le ha asustado el trabajo. En los a?os 80, el Gobierno le envi¨® para tantear a ETA antes de iniciar las conversaciones de Argel para poner fin al terrorismo de esa banda.
"La operaci¨®n sigue abierta para detener a los cerca de 50 piratas implicados"
Es discreto -quiz¨¢ por eso le siguen llamando para resolver este tipo de faenas-, casi herm¨¦tico, como la gente que guarda un secreto. En su caso, va incluido en el sueldo.
Pregunta. ?Ha pagado el Gobierno espa?ol alg¨²n rescate por la liberaci¨®n de Jos¨¦ Cend¨®n y Colin Freeman?
Respuesta. Absolutamente, no. El Gobierno espa?ol no ha pagado ning¨²n rescate. No ha puesto ni un solo c¨¦ntimo.
P. ?Pero se ha pagado rescate?
R. No me consta.
P. ?Ha pagado la empresa para la que trabajaban Cend¨®n y Freeman, el Daily Telegraph?
R. Tendr¨¢n que decirlo ellos.
P. ?Dialog¨® usted directamente con los piratas? ?Hicieron alguna reclamaci¨®n econ¨®mica?
R. No puedo decir si he sido yo el que ha hablado con ellos porque es informaci¨®n reservada, pero s¨ª, ped¨ªan dinero, claro.
P. ?Qu¨¦ saben de los secuestradores?
R. La operaci¨®n sigue abierta porque las autoridades de Puntlandia est¨¢n trabajando para detener a los autores del secuestro. En Somalia hay tres clanes de piratas y unos 1.000 subclanes, todos peleados entre ellos. En el secuestro de Cend¨®n y Freeman hubo unas 50 personas implicadas, todas pertencientes al clan somal¨ª de los Warsgile. Ninguno de estos clanes tiene alguna pretensi¨®n pol¨ªtica o ideol¨®gica, son clanes de naturaleza puramente delictiva.
P. Parece que Cend¨®n y Freeman estuvieron a punto de ser secuestrados de sus propios secuestradores por otra banda rival.
R. Estos clanes se mueven por el olor del dinero y no me extra?a que se acercaran para intentar sacar parte del bot¨ªn.
P. Las cooperantes secuestradas a finales de 2007 fueron liberadas una semana despu¨¦s y los marineros del Playa de Bakio, a los seis d¨ªas. ?Ha sido m¨¢s dif¨ªcil esta negociaci¨®n que las anteriores? ?Son cada vez m¨¢s exigentes los piratas?
R. Cada negociaci¨®n es distinta, porque tenemos que adaptar las hojas de ruta a cada caso particular. En este caso, como en los anteriores, la liberaci¨®n ha sido posible gracias a mucho trabajo, paciencia, ilusi¨®n y mucho tel¨¦fono para hablar con unos y otros. Le hemos dedicado 24 horas al d¨ªa a esto. Ha sido una negociaci¨®n con muchos altibajos.
P. ?A cu¨¢ntas bandas ha sido la negociaci¨®n?
R. Todo el mundo ha echado una mano. El Gobierno brit¨¢nico, el Daily Telegraph, las autoridades de Puntlandia... Yo quiero destacar el trabajo del personal de la embajada, especialmente mi n¨²mero dos, Sergio Carranza. Sin ellos no habr¨ªa sido posible.
P. Durante las negociaciones para liberar a la tripulaci¨®n del Playa de Bakio se desplaz¨® a Somalia escoltado por geos y soldados ugandeses y durmi¨® en una tienda de campa?a en la base de operaciones. ?Ha corrido peligro durante esta negociaci¨®n?
R. Siempre que est¨¢s en Somalia corres peligro. Digamos que hemos asumido los riesgos necesarios.
P. ?Cree que puede volver a pasar?
R. Por supuesto. Todo occidental que vaya a Somalia tiene que saber que se la est¨¢ jugando a la ruleta rusa. As¨ª que yo recomiendo que no viajen a Somalia.
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