Emery sale herido de Son Moix

En su hora m¨¢s baja, cuando la posibilidad de estrenar la segunda vuelta como colista estaba m¨¢s cerca que nunca, el Mallorca sac¨® pecho y se impuso al Valencia, cuarto clasificado, con ins¨®lita autoridad. El conjunto de Emery fue un gui?apo en manos de Jurado, el mejor del encuentro, en una primera parte pat¨¦tica de los valencianistas. Al final, el Mallorca lleg¨® a disponer de 14 ocasiones de gol por tan s¨®lo tres los visitantes. La defensa de Emery volvi¨® a ser un coladero y tan s¨®lo mejor¨® ligeramente en el segundo tiempo, cuando entr¨® Moretti en el centro en sustituci¨®n de un desenfocado Maduro. Albiol, por cierto, se resinti¨® de una lesi¨®n muscular anterior y ser¨¢ baja para el choque copero del pr¨®ximo jueves ante el Sevilla en el S¨¢nchez Pizju¨¢n (3-2 en la ida).

El t¨¦cnico admite su culpa en el descalabro y dice que le doli¨® ver jugar a su equipo

Hicieron memoria los de Manzano y recordaron que tienen mucho f¨²tbol en sus botas. El Mallorca gan¨® la partida en el centro del campo, donde brill¨® la pareja formada por Mart¨ª y Mario Su¨¢rez, y marc¨® las diferencias por la izquierda con Jurado en plan estrella. Inspirado y desequilibrante, el ex mediapunta del Madrid y del Atl¨¦tico rompi¨® el partido ¨¦l solito. No hall¨® oposici¨®n actuando como interior y despleg¨® un f¨²tbol pillo y so?ador. A los siete minutos, abri¨® el camino de la victoria con un gol de oportunista, cuando recogi¨® el rechace del portero a una fort¨ªsima volea de Varela. Enga?¨® luego a Iturralde dej¨¢ndose caer ante el acoso de Albiol -en todo caso, la supuesta falta habr¨ªa sido fuera del ¨¢rea- para que Mart¨ª marcara desde el punto de penalti. Y, apenas un minuto despu¨¦s, sali¨® disparado como una flecha, esquiv¨® las acometidas de sus rivales y volvi¨® a agujerear la red de Guaita. Tarde redonda para el que ya es, con cinco goles y empatado con Aduriz, el m¨¢ximo goleador del equipo balear.

Es cierto que el Valencia ven¨ªa tocado de su partido de Copa ante el Sevilla. Las bajas de Villa y Joaqu¨ªn dejaron hu¨¦rfano al ataque. Pero no es menos cierto que ayer su t¨¦cnico, Emery, equivoc¨® de arriba abajo la lectura del encuentro. En una jornada situada en medio de una eliminatoria copera y ante un rival que s¨®lo hab¨ªa sumado tres de los ¨²ltimos 33 puntos posibles, decidi¨® dar descanso a Albelda y dejar en el banquillo a Baraja y Moretti. Resultado: el Valencia no existi¨® hasta la segunda mitad, cuando en el marcador ya figuraba el 3-0. Nada pudo oponer al rabioso vendaval que fue el juego del Mallorca durante todo el primer tiempo y ¨²nicamente hall¨® consuelo tras el descanso cuando los de Manzano optaron por echar el freno y ceder la iniciativa. Tras el descalabro, Emery asumi¨® "gran parte de la culpa de la derrota" y reconoci¨®: "Desde que soy entrenador del Valencia, es el d¨ªa que m¨¢s me ha dolido ver jugar a mi equipo".

Le doli¨® al t¨¦cnico la falta de ambici¨®n de los suyos. A veinte minutos del final, Silva puso la puntera en un barullo dentro del ¨¢rea para que Vicente enviara el bal¨®n a la red. Pareci¨® entonces que al Mallorca le iba a entrar el tembleque y que la contienda no estaba a¨²n resuelta. Pero fue pura ilusi¨®n. Ni las sustituciones mejoraron la imagen del Valencia. En cambio, los espacios que dejaba en la defensa bien pudieron costarle una goleada a¨²n mayor. En la porter¨ªa, Guaita, que fall¨® en el primer gol, mantuvo el tipo frenando, una y otra vez, a Jurado, Varela, Mario, Mart¨ª y Aduriz.

Al final, pinchazo sin paliativos de todo un aspirante a los puestos de la Champions en su visita a un rival presuntamente menor. El orgulloso Mallorca de Manzano est¨¢ condenado a bracear sin respiro en lo que resta de temporada. Ayer se demostr¨® a s¨ª mismo que, si quiere, es capaz de alcanzar la orilla.