Encarcelados los padres del beb¨¦ hallado muerto en un contenedor

Naci¨® vivo. El beb¨¦ que hallaron muerto un indigente y un frutero en un contenedor de Villaverde, el viernes, no falleci¨® por causas naturales. Seg¨²n el informe forense, su cuerpo, que a¨²n ten¨ªa el cord¨®n umbilical, presentaba "signos evidentes de violencia". Sus padres, Jos¨¦ Antonio F. C., de 47 a?os, y Mar¨ªa de las Nieves L. A., de 32 a?os, ambos de nacionalidad espa?ola, ingresaron ayer en prisi¨®n por orden judicial hasta la celebraci¨®n del juicio, inform¨® ayer una portavoz de la Jefatura Superior de Polic¨ªa de Madrid. Est¨¢n acusados de homicidio.

"Siempre estaba en el bar", aseguraban ayer los vecinos m¨¢s moderados sobre la madre de la criatura. "Era alcoh¨®lica", dec¨ªan los m¨¢s atrevidos. Todos estaban consternados. "Algo as¨ª no lo hacen ni los animales", bramaba ayer por la tarde Justi, una vecina del portal en el que viv¨ªan los detenidos. "Ella era bajita, morena, siempre iba en ch¨¢ndal, desarreglada", la describ¨ªa. Nadie le recuerda oficio conocido. "S¨®lo iba al bar", coincid¨ªan. El padre, seg¨²n varios vecinos, trabajaba en un matadero.

La mujer es madre de varios ni?os m¨¢s tutelados por la Comunidad

El portal de los presuntos homicidas estaba a menos de 30 metros del contenedor. Su puerta, en un primer piso, permanec¨ªa ayer precintada por el Grupo VI de Homicidios de la Polic¨ªa. "El viernes por la noche o¨ªmos un ruido y salimos a ver qu¨¦ pasaba", explicaba ayer una vecina ucrania de la misma planta. "Hab¨ªa cerca de 10 agentes de polic¨ªa, con m¨¢scaras, que hab¨ªan abierto la puerta para inspeccionar el piso". Dentro, seg¨²n fuentes policiales, hab¨ªa indicios de un nacimiento reciente: manchas de sangre en el suelo del sal¨®n, una fregona y un cubo con m¨¢s sangre. Los padres no estaban all¨ª.

La mujer tiene al menos otros cuatro hijos, todos ellos tutelados por la Comunidad de Madrid. La mujer tiene una orden de alejamiento de uno de sus hijos por dictamen judicial. El mayor, seg¨²n sus vecinos, apenas supera los ocho a?os.

Seg¨²n fuentes cercanas al caso, la madre no acud¨ªa a los programas de apoyo de Servicios Sociales. Ni siquiera ten¨ªa r¨¦gimen de visitas. "Mi consuegra vive pared con pared con ella. Hace tiempo puso una denuncia: dentro escuchaba golpes, gritos y a ni?os llorando. Despu¨¦s, los ni?os dejaron de venir a verla los fines de semana", aseguraba otra vecina.

Todos coinciden en otras cosas: "Nadie deb¨ªa de limpiar en aquella casa", cuyo hedor llenaba el pasillo del primer piso, sobre todo en verano.