Cincuenta a?os de un joven sonero mayor
Cheo Feliciano celebra en Madrid y Barcelona su amor a la salsa
Ha venido a Europa de la mano de Coc¨®, "esa negrita que me ha apoyado tantos a?os", dice el septuagenario cantante Cheo Feliciano (Ponce, 1935), mientras le sonr¨ªe a su esposa. Esta noche, el puertorrique?o que se hizo famoso por interpretar El rat¨®n junto a la Fania y con los m¨ªticos solos de Santana har¨¢ un recorrido por sus 50 a?os de vida musical en la sala Juanchito de Madrid, ma?ana estar¨¢ en Par¨ªs y el 1 de febrero cierra su peque?a gira europea en el Casino de la Alianza de Barcelona. Es viejo visitante de las islas Canarias, pero la pen¨ªnsula s¨®lo la ha pisado con el enorme combo de la Fania all Stars en 1982 y con la discogr¨¢fica RMM para presentar el Tributo a los Beatles, en el que interpreta Yesterday en versi¨®n salsa.
"A los diez a?os hice una orquesta de instrumentos de lata"
"A m¨ª me interesa crear una conexi¨®n con quienes me escuchan"
"En mi barrio de Ponce [Puerto Rico], un vecindario muy pobre pero riqu¨ªsimo en amor, mis amigos y yo nos hicimos instrumentos de lata para armar una orquestita a la que llamamos El Combo de Lata, y yo era el latero mayor. No ten¨ªa m¨¢s de 10 a?os y creo que as¨ª empez¨® todo". Cheo Feliciano relata sus primeros coqueteos con la m¨²sica como una travesura que le llena de orgullo.
El latero mayor, que quer¨ªa ser trombonista, se inici¨® profesionalmente en las congas casi por azar, ya en Nueva York, adonde lleg¨® con su familia en medio de la crisis del "exilio puertorrique?o" en los a?os cincuenta. Su inter¨¦s por estar con sus ¨ªdolos lo hizo apuntarse como ayudante de la orquesta del que se convirti¨® en su maestro y padrino, el cantante y director Tito Rodr¨ªguez. "Un d¨ªa mis compa?eros le dijeron que yo cantaba. ?l me pregunt¨®: '?Es verdad eso, Cheo?'. Y yo dije: '?Yo soy el mejor cantante del mundo!'. As¨ª debut¨¦ en el famoso Palladium de Nueva York". Su audacia le puso el micr¨®fono en la mano, pero fueron su talento y el lema "sentimiento t¨²" con el que sella cada uno de sus temas los que le convirtieron en un sonero mayor, equiparable con su maestro Tito Rodr¨ªguez, sus contempor¨¢neos Celia Cruz o el Conde Rodr¨ªguez, y a quienes ¨¦l llama sus hijos: H¨¦ctor Lavoe y Frankie Ruiz.
El esplendor de la carrera art¨ªstica de Cheo Feliciano lleg¨® a fines de los cincuenta con la orquesta que se puso de moda en las salas de baile de Nueva York: El sexteto de Joe Cuba. "Estoy celebrando un doble aniversario, porque yo debut¨¦ como el cantante oficial de Joe el 5 de octubre de 1957, el mismo d¨ªa que me cas¨¦. La ceremonia fue por la ma?ana y por la noche tuve un bolo, as¨ª que no nos fuimos de luna de miel hasta el d¨ªa siguiente". Fue con Joe Cuba que se le ocurri¨® la historia del gato Quejicas, ¨¦se al que el rat¨®n le malogra sus conquistas. "Grab¨¦ El rat¨®n con Joe Cuba por primera vez, y sali¨® un d¨ªa que conversaba con mis compa?eros, todos casados, sobre los cotilleos que circulaban entre las esposas por todos los viajes que hac¨ªamos".
Una sombra de 15 a?os le acompa?a. Cheo Feliciano reconoce que el exigente y alocado mundo de la salsa de los sesenta y setenta lo llevaron, como a tantos de sus compa?eros, a las drogas, pero ¨¦l es un superviviente. "Tuve que parar y me intern¨¦ en un centro de rehabilitaci¨®n para adictos durante tres a?os. De ah¨ª, ya limpio, sal¨ª a grabar con el productor musical Jerry Masucci. En 1972 lleg¨® Anacaona y desde entonces no he parado, han sido los mejores a?os de mi vida", dice con un gui?o. Ha convertido en ¨¦xitos descargas desordenadas como El pito (I never go back to Georgia), o Qu¨ªtate t¨² pa ponerme yo -ambas de la Fania-, boleros rom¨¢nticos como Amada m¨ªa o Delirio y canciones reivindicativas como Los entierros de mi gente pobre.
"Estoy feliz de venir a cantar a la madre patria [risas] y de reencontrarme con muchos latinoamericanos a quienes debo mi carrera", comenta sobre esta gira en la que le acompa?a la Orquesta del Solar, de Julio Mena. No presume de voz, sino del sentimiento con el que habla -no canta, dice- sus canciones. "A m¨ª me interesa identificarme con las canciones y crear una conexi¨®n con quienes me escuchan". A sus 74 a?os y despu¨¦s de alcanzar sitio de honor en el mundo de la salsa y la descarga, Cheo Feliciano vive en su Puerto Rico natal y regenta su propia orquesta, Sentimiento 25. ?Qu¨¦ otro nombre podr¨ªa recibir todo lo que acompa?a a este gentleman de la m¨²sica latina?
Babelia
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