La plana mayor del PP arropa la manifestaci¨®n de Galicia Biling¨¹e
Unas 3.000 personas secundan la marcha, boicoteada por 250 independentistas
A falta de Feij¨®o, de precampa?a en Buenos Aires, a la manifestaci¨®n convocada ayer en Santiago por Galicia Biling¨¹e acudieron, entre otros, Alfonso Rueda, Ana Pastor, Corina Porro, Carlos Negreira e Ignacio L¨®pez Chaves. Ni rastro del sector de la boina. Los pol¨ªticos del PP compartieron la pancarta que encabezaba la marcha con la presidenta de Galicia Biling¨¹e, Gloria Lago, la l¨ªder del UPyD, Rosa D¨ªez, personajes como Miguel Cancio y representantes de Ciudadanos como Albert Rivera y Antonio Robles.
En total, entre las personas que llegaron en buses de toda Galicia y los colectivos procedentes de Catalu?a y el Pa¨ªs Vasco, en la manifestaci¨®n participaron unas 3.000 personas, aunque los organizadores aseguraron que eran "decenas de miles". Por su parte, el delegado del Gobierno, Manuel Ameijeiras, dijo que "aunque al final de la protesta llegaron 3.000, al principio ser¨ªan 5.000".
La polic¨ªa carg¨® con pelotas de goma contra los independentistas
"A estos hay que tirarlos al mar como en Chile", suger¨ªa un manifestante
La marcha, que parti¨® al mediod¨ªa de la Alameda coreando el lema "Libertad para elegir", se vio interrumpida de inmediato por los grupos de independentistas que luego intentar¨ªan boicotear la manifestaci¨®n, en varias ocasiones, en su recorrido hacia la Quintana. A las 12.05, se produjo la primera detenci¨®n. En previsi¨®n de enfrentamientos, la ciudad qued¨® tomada todo el d¨ªa por las lecheras de los antidisturbios. Los agentes, una parte venidos de Andaluc¨ªa, obligaron a identificarse a todos los nacionalistas que lograron acorralar en las callejuelas de la zona vieja y en total detuvieron a 10 personas. Los j¨®venes (en su mayor¨ªa, aunque entre los identificados hubo una mujer de 77 a?os) intentaron por todas las v¨ªas reventar la manifestaci¨®n de Galicia Biling¨¹e, y organizaron una guerra de escaramuzas, saliendo al paso de la marcha por el laberinto de r¨²as de la ciudad monumental. En su defensa del gallego, unas 250 personas, seg¨²n los agentes, derribaron y quemaron contenedores; rompieron escaparates, marquesinas y un coche de la polic¨ªa; arrojaron contra los manifestantes piedras y botellas de cristal y tiraron al suelo canicas para provocar resbalones. Los antidisturbios respondieron con porras y cargas de pelotas de goma.
Uno de los 10 detenidos, Carlos Morais, miembro de Nos-UP y personaje conocido de la ciudad, tuvo que ser trasladado al hospital con golpes en la cabeza. Entre las personas que terminaron en comisar¨ªa y que hoy ser¨¢n puestas a disposici¨®n judicial hab¨ªa dos integrantes de esta formaci¨®n y tres militantes de Isca!, dos hombres y una mujer, que fueron apresados por agentes cuando se hallaban entre los manifestantes pro castellano en la Quintana.
Entonces, Gloria Lago estaba leyendo un manifiesto en espa?ol y gallego, y la mascota Gabi (el puercoesp¨ªn o porcoteixo de Galicia Biling¨¹e) animaba la fiesta. Los antidisturbios, que intentaban distinguir por su diferente manera de vestir a los defensores del gallego entre la muchedumbre, sacaron en volandas de la plaza a Diego Santorio y Breixo Lousada. A la vuelta de la esquina, enfilando ya la r¨²a Nova, les pusieron las esposas pese a que los de Isca!, angustiados, intentaban explicar a los polic¨ªas nacionales que no estaban "m¨¢s que escuchando" y que "defender la lengua propia no es un delito".
A los agentes de azul marino les cost¨® bastante detener a los que lanzaban petardos y botellas. Los j¨®venes, muchos ocultos bajo cascos de moto y pasamonta?as, atacaban la Quintana desde el tejado de la Catedral (treparon por la fachada de la Corticela) y desde lo alto de la escalinata. Despu¨¦s desaparec¨ªan por San Paio de Antealtares y, mejores conocedores del casco antiguo que los agentes tra¨ªdos de fuera, lograban escabullirse y esconderse en pisos. Por la tarde, la ciudad apareci¨® sembrada de carteles escritos a mano convocando a una concentraci¨®n para pedir la liberaci¨®n de los detenidos. La protesta, a la que acudi¨® Beiras para interceder, se celebr¨® ante la comisar¨ªa.
En los enfrentamientos y durante uno de los contrataques de la polic¨ªa, tambi¨¦n dos agentes y dos manifestantes de GB resultaron heridos. Un hombre que intent¨® agredir a los nacionalistas con un paraguas qued¨® con un ojo seriamente da?ado y una mujer, sangraba por una mano. Los dos recibieron los golpes de la polic¨ªa, pese a que quienes se vieron acosados por los antidisturbios no fueron los que protestaban contra la pol¨ªtica ling¨¹¨ªstica de la Xunta, sino los independentistas. Los agentes incluso les confiscaron las tarjetas de memoria de las c¨¢maras fotogr¨¢ficas a varios que no eran reporteros y estaban captando instant¨¢neas de las primeras filas de la manifestaci¨®n.
Sobre las cabezas de los de GB (los ¨²nicos que ten¨ªan autorizaci¨®n para manifestarse) ondeaban varias banderas de Espa?a. Al final del acto apareci¨® sobre el escenario, como una an¨¦cdota, una de Galicia. A pesar del tono moderado con el que el colectivo planeaba llevar a cabo su manifestaci¨®n, de principio a fin se oyeron comentarios salidos de tono e insultos a los radicales. "Asquerosos", "nazis", "quer¨¦is convertir Galicia en un pa¨ªs de paletos", dec¨ªan algunos. Mientras el popular frente de la comitiva entonaba Ondi?as ve?en, detr¨¢s un hombre ofrec¨ªa una soluci¨®n al conflicto ling¨¹¨ªstico: "A ¨¦stos hay que tirarlos al mar como en Chile. ?Fascistas! ?Hijos de puta!".
Desde las 12 hasta las 14 horas, cuando acab¨® el acto en la Quintana, bastantes bares mantuvieron bajadas las verjas met¨¢licas para proteger a sus clientes. No eran los ¨²nicos que estaban asustados: muchos de los ni?os que asistieron con sus padres a la manifestaci¨®n (y hab¨ªa cientos) lloraban desconsolados ante las escenas de violencia que tuvieron que presenciar.
En el acto reivindicativo de GB que tuvo lugar en la Quintana se soltaron globos, se pidi¨® libertad para que cada cual viva en la lengua que quiera y se dieron las gracias a varias personas que han dado su apoyo al colectivo: Jos¨¦ Ram¨®n Otero Novas, Esperanza Guis¨¢n, Marta Rivera de la Cruz y Manuel Manqui?a. Despu¨¦s, los organizadores fueron juntos a comer a El Quijote.
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