El libro electr¨®nico ya sabe hablar

En el siglo XXI los directivos del mundo digital han alcanzado la misma cotizaci¨®n medi¨¢tica que las estrellas de Hollywood. Cualquiera que pasase ayer frente a la Morgan Library de Nueva York podr¨ªa haber pensado que dentro se escond¨ªan Nicole Kidman o Pen¨¦lope Cruz. Pero no, los m¨¢s de 200 periodistas que a primera hora se peleaban por entrar en este museo de dise?o limpio y luminoso acud¨ªan a ver a Jeff Bezos, fundador y presidente de Amazon.com. Intentando emular al maestro Steve Jobs (de Apple) en el arte de crear expectativas y conseguir publicidad gratuita, Bezos, con la inestimable ayuda del escritor de terror superventas Stephen King, hab¨ªa convocado "secretamente" a la prensa hace d¨ªas para presentar el Kindle2, la nueva versi¨®n del llamado iPod de los libros.

Antes hab¨ªa alimentado todo tipo de rumores, entre ellos, que el aparato se iba a doblar como un libro. Sin embargo, Bezos dej¨® claro al mostrarlo p¨²blicamente que f¨ªsicamente a¨²n no se dobla nada. En realidad, para el com¨²n de los mortales, el Kindle y el Kindle2 resultan parecidos, tanto f¨ªsicamente como en lo relativo a sus capacidades. La ¨²nica gran variante respecto al primer Kindle, que inaugur¨® la era del eBook en diciembre de 2007, es que el Kindle2 habla: adem¨¢s de leerse, puede escucharse como un libro sonoro. Adem¨¢s, tiene una aplicaci¨®n nueva, el Whispersync, que permitir¨¢, en un futuro cercano, sincronizar el aparato con tel¨¦fonos m¨®viles.

Todo lo dem¨¢s son mejoras t¨¦cnicas respecto a la primera versi¨®n, de la que se han vendido unos 500.000 aparatos, aunque nadie lo sabe con certeza puesto que Amazon mantiene sus cifras en secreto. Desde el pasado noviembre, es imposible adquirir un Kindle porque las reservas de la empresa se agotaron tras la publicidad que recibieron gracias a Oprah Winfrey, la reina de las sobremesas televisivas. El Kindle2 puede pedirse con antelaci¨®n desde ayer, pero hasta el 24 de febrero no estar¨¢ oficialmente a la venta. De momento, no se podr¨¢ adquirir fuera de Estados Unidos, costar¨¢ 359 d¨®lares (igual que el primero) y tendr¨¢ acceso a una biblioteca de 230.000 t¨ªtulos, una parte ¨ªnfima de Amazon, la mayor librer¨ªa online del planeta, aunque, seg¨²n dijo ayer Bezos, "el objetivo es conseguir que en un futuro pr¨®ximo se puedan leer en el Kindle todos los libros que existen, en todas las lenguas".

El nuevo Kindle volaba ayer de mano en mano entre los periodistas que, tras la presentaci¨®n, pudieron acribillar a preguntas a varios especialistas de Amazon. ?stos insist¨ªan en repetir el mantra de Bezos: todas las mejoras est¨¢n dirigidas a hacer m¨¢s placentera la experiencia de leer. Este aparato pesa menos, es m¨¢s fino que un iPhone, tiene mejor resoluci¨®n y puede almacenar una biblioteca de 1.500 libros que en apenas un minuto llegan a la pantalla v¨ªa conexi¨®n inal¨¢mbrica 3G. Aunque en Amazon no lo dicen muy alto, el Kindle2 permite navegar online gratuitamente gracias a este ingenio de ¨²ltima generaci¨®n, por lo que se pueden leer todas las webs. Los v¨ªdeos, webs con tecnolog¨ªa flash o MP3, as¨ª como los servicios de streaming tendr¨¢n que esperar para poder contemplarse en la pantalla.

Stephen King ley¨® un extracto de UR, un relato corto que se vender¨¢ en exclusiva para Kindle2. Frente a la fanfarria de Bezos, la start-up Plastic Logic anunci¨® sigilosamente en Nueva York la llegada de otro eBook, ¨¦ste con una pantalla tama?o folio. Se sumar¨¢, por tanto, a la lucha que se libra en el campo de batalla del futuro de los libros. Todav¨ªa el eBook es un cacharro minoritario. La clave es cual de los soportes se llevar¨¢ el gato al agua y qu¨¦ libro digital formar¨¢ parte de nuestras vidas.