El colista desquicia al l¨ªder
El Espanyol, impulsado por De la Pe?a, gana 27 a?os despu¨¦s en el Camp Nou
El Espanyol arrambl¨® al Bar?a. Familiarizado con las situaciones extremas, los blanquiazules desquiciaron a los azulgrana, acostumbrados a jugar con el viento de cola, incapaces de revertir anoche una situaci¨®n tan adversa como dolorosa, personificada en De la Pe?a. Tras cuatro a?os de sequ¨ªa, Lo Pelat se reencontr¨® con el gol en el estadio que m¨¢s le ador¨®, circunstancia que ahond¨® en la herida del Barcelona. Los azulgrana han perdido su punto de forma y cedido cinco puntos en dos partidos tras encadenar diez victorias. Hac¨ªa 27 a?os que el Espanyol no ganaba en el Camp Nou, y la actuaci¨®n de ayer guarda paralelismo con la de 1982. Queda tela por cortar, siete puntos de por medio, y el Madrid le disputar¨¢ la Liga al Bar?a.
BARCELONA 1 - ESPANYOL 2
Barcelona: Vald¨¦s; Alves, Piqu¨¦, M¨¢rquez, Abidal (Puyol, m. 23); Xavi, Tour¨¦, Keita; Messi, Eto'o (Gudjohsen, m. 65) y Henry (Busquets, m. 46). No utilizados: Jorquera, Bojan, Sylvinho y Hleb.
Espanyol: Kameni; Sergio S¨¢nchez, Pareja, Jarque, David Garc¨ªa; Mois¨¦s Hurtado; Luis Garc¨ªa, ?ngel (Rom¨¢n, m. 36), De la Pe?a (Corominas, m. 71), Nen¨¦ (Tamudo, m. 88); e Iv¨¢n Alonso. No utilizados: Cristian ?lvarez, Beranger, Torrej¨®n y Juanjo.
Goles: 0-1. M. 50. De la Pe?a, de cabeza. 0-2. M. 54. De la Pe?a. 1-2. M. 61. Tour¨¦.
?rbitro: Delgado Ferreiro. Amonest¨® a Pareja, Piqu¨¦, Eto'o, Luis Garc¨ªa, Busquets, Jarque, Xavi, Tour¨¦, Puyol, Tamudo e Iv¨¢n Alonso. Roja directa a Keita (m. 37).
76.942 espectadores en el Camp Nou.
'Lo Pelat' se reencontr¨® con el gol en el estadio que m¨¢s le ador¨® tras cuatro a?os de sequ¨ªa
En tiempos de Carnaval, a veces cuesta distinguir entre el l¨ªder y el colista, y ayer el ¨²ltimo le gan¨® al primero en un encuentro agresivo y mal arbitrado, muy bronco, como pretend¨ªa el Espanyol, superior en el cuerpo a cuerpo. Los espa?olistas llevaron el derby a su terreno y los azulgrana volvieron a perder, cosa que no ocurr¨ªa desde la jornada inaugural en Soria, faltos de juego y de futbolistas como estuvieron frente a un Espanyol que estira el cuello. Victorias como las de ayer refuerzan la moral propia y debilitan la del rival, demasiado alborotado durante la previa por la actuaci¨®n de Laporta y el futuro de Eto'o, que a¨²n suma m¨¢s goles que toda la plantilla del Espanyol. La cosa acab¨® tan mal que el Bar?a intent¨® el remonte sin Eto'o ni Henry.
A Guardiola le preocupaba atacar bien, porque recordaba los apuros ofensivos que hab¨ªa tenido en los tres derbies anteriores. As¨ª que form¨® el Bar?a con la delantera titular, sin tener en cuenta el partido de Lyon, y Keita como volante, quiz¨¢ porque entend¨ªa que le aguardaba un encuentro de pierna fuerte. Acert¨® en el diagn¨®stico y err¨® en el plan. Al Espanyol le interesaba ciertamente insistir en su f¨²tbol f¨ªsico e intenso a partir de una alineaci¨®n con dos medios opuestos: Mois¨¦s como pivote defensivo por delante de los centrales y De la Pe?a en calidad de medio ofensivo. Y a Mauricio Pochettino la apuesta le sali¨® a pedir de boca.
Tan cerrado como concentrado, el Espanyol tap¨® la salida de bal¨®n azulgrana con la presi¨®n de Iv¨¢n Alonso, procur¨® no conceder ocasiones e impacient¨® al Barcelona, poco l¨²cido, nada fino, impreciso, especialmente Henry, fall¨®n en un cabezazo que era gol o gol. Pocos equipos incomodan m¨¢s y niegan mejor al Barcelona que el Espanyol, y el encuentro de ayer s¨®lo fue deparando malas noticias en el bando barcelonista.
Apenas hab¨ªa remates que contar mientras en el Bernab¨¦u se cantaba la goleada y ca¨ªa lesionado Abidal por ocho semanas. A la hinchada le dio entonces por corear "?A segunda oe?" para ver si espabilaba Messi o se enchufaba el equipo, falto de velocidad. El partido adquiri¨® entonces la carga ambiental y la tensi¨®n propias de un derby. ?ngel volte¨® a Messi y los acontecimientos superaron progresivamente al ¨¢rbitro, que no dio ni una, desbordado por la refriega. El Espanyol supo trampear la contienda, reducir el tiempo de juego cada dos por tres, con y sin raz¨®n, y al Bar?a le entr¨® la prisa, como si le fuera la Liga. La expulsi¨®n de Keita, desproporcionada, aument¨® el l¨ªo para suerte del a Espanyol, a gusto con el tono ¨¢spero del choque.
Incluso Eto'o y Lo Pelat estuvieron a punto de llegar a las manos despu¨¦s que tres futbolistas dejaran la cancha antes del descanso. Ante la falta de f¨²tbol, a Guardiola no le qued¨® m¨¢s remedio que poner un medio (Busquets) por un delantero (Henry). La reorganizaci¨®n azulgrana coincidi¨® con el resurgimiento blanquiazul. Al Espanyol le alcanz¨® con llegar una vez para sumar dos goles. De la Pe?a cabece¨® una asistencia de Nen¨¦, el primer gol de cabeza de su vida, y sancion¨® despu¨¦s con una de sus preciosas par¨¢bolas un error de Piqu¨¦ y Vald¨¦s, presos de la ansiedad. Al Bar?a le cost¨® corregirse con la pelota y apel¨® a la ¨¦pica. Un gol de Tour¨¦ le meti¨® a tiempo en el partido. A Guardiola le dio entonces un ataque de cruyffismo cuando en una decisi¨®n controvertida retir¨® a Eto'o por Gudjohnsen y puso a Busquets de ariete, demarcaci¨®n que, por otra parte, ya hab¨ªa ocupado alguna vez en el filial.
Tampoco espabil¨® el Bar?a. No hubo manera siquiera de forzar el empate porque los azulgrana apenas remataron a gol y los espa?olistas reclamaron incluso un penalti para adornar su primer triunfo despu¨¦s del alcanzado en octubre con Osasuna. Excelso en el triunfo, el Bar?a fue grandilocuente tambi¨¦n en la derrota: perdi¨® con el colista que no es precisamente un cualquiera sino un Espanyol al que le sacaba 42 puntos. Hay Liga porque el Madrid hizo ayer de Bar?a y el Bar?a no supo hacer de Madrid.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.