Yves sigue vivo en Saint Laurent

"Es hora de volver a la esencia de las cosas", argumentaba Stefano Pilati tras presentar una soberbia colecci¨®n de oto?o 2009 para Yves Saint Laurent. Un extremado y elegante estudio de forma y funci¨®n en franela gris, popel¨ªn blanco y cuero negro. A partir de la cazadora de cuero (protagonista de la colecci¨®n beatnik de Saint Laurent para Dior en 1960), Pilati defendi¨® una mujer independiente con chaquetas estructuradas, camisas blancas y pantalones sueltos y favorecedores. Todo era pr¨¢ctico, pero a la vez sugerente e innovador. En un curioso momento de hermandad entre industrias con problemas, se importaron t¨¦cnicas automovil¨ªsticas para moldear tejidos. Tras cinco a?os en la casa, Pilati recuper¨® el m¨¢s valioso e intangible legado del fundador: vestir la libertad a las mujeres con ropa "que invita a llenar de vida los espacios vac¨ªos".

Las mejores colecciones para la pr¨®xima temporada coinciden en una curiosa mezcla de funcionalismo y elegancia parisiense. La de Chanel no es una excepci¨®n. No hubo recortes para Karl Lagerfeld que exhibi¨® en el Grand Palais. Pero all¨ª donde seis meses atr¨¢s se construy¨® una calle, esta vez se levantaron habitaciones para crear la atm¨®sfera de intimidad que parece de rigor. La ropa fundi¨® a negro tras el despliegue de blanco de la alta costura. Para no lanzar un mensaje demasiado pesimista, Lagerfeld salpic¨® la oscuridad de cuellos y pu?os blancos y de brochazos de jade y rosa. "Porque el verde es el color de la esperanza", explicaba.

En 25 a?os, el septuagenario alem¨¢n ha adaptado el revolucionario discurso de Coco Chanel a los m¨¢s variados tiempos. Ayer consigui¨® que sus ic¨®nicos trajes resultaran otra vez rabiosamente modernos: la mejor prueba de su ¨¦xito era Kate Moss prob¨¢ndose ropa entre bambalinas. Invitada al desfile, correte¨® despu¨¦s entre los percheros y expres¨® su adoraci¨®n por una cl¨¢sica chaqueta cuadrada bordada. Seguramente, anoche ya durmi¨® con ella.

"Nunca estoy orgulloso de nada, porque cuando algo termina, ya estoy pensando en lo siguiente", dec¨ªa el m¨¢s ¨¢cido de los dise?adores. Incluso en un contexto tan sombr¨ªo, Lagerfeld se permiti¨® la iron¨ªa con una funda de pl¨¢stico que muestra los complementos de la mujer Chanel: el bolso, el iPod, el n?5... Un humor que no hubiera hecho da?o a Maria Grazia Chiuri y Pier Paolo Piccioli, los nuevos dise?adores de Valentino. Tras estrenarse en la alta costura, ayer lo hicieron en el pr¨ºt-¨¤-porter. El objetivo era "un cambio de perspectiva", pero se vio lo contrario. Aunque un vestido corto rojo de gr¨¢cil movimiento alert¨® de su potencial si escapan de las garras del respeto reverencial.