Fritzl escucha "atento" el relato de su hija violada

Ayer fue el turno de las v¨ªctimas en el proceso judicial contra Josef Fritzl, el electricista jubilado que secuestr¨® a su hija y abus¨® de ella en su s¨®tano durante 24 a?os. El jurado popular termin¨® de ver las 11 horas del testimonio de Elisabeth, que dio a luz durante su secuestro a siete hijos fruto de las violaciones del padre.

Las declaraciones de la hija resumen 8.461 d¨ªas de cautiverio. Un portavoz judicial relat¨® que a la mujer le cost¨® mucho hablar. Fue "muy estresante para ella", afirm¨® el representante del juzgado. Fue una de las pocas informaciones que, debido al secreto procesal, trascendieron ayer de la segunda sesi¨®n del juicio. Tanto el portavoz de la audiencia de Sankt P?lten, Franz Cutka, como el abogado de Fritzl, Rudolf Mayer, fueron sumamente escuetos en sus declaraciones a la prensa. S¨®lo se revel¨® que el acusado "sigui¨® la proyecci¨®n con toda atenci¨®n y cuidado", y que respondi¨® a todas las preguntas que se le hicieron.

El grueso del interrogatorio se centr¨® en la muerte, en el cautiverio, de uno de los hijos-nietos que Fritzl tuvo con su hija. Seg¨²n ¨¦sta, su padre se neg¨® a darle tratamiento cuando ella le dijo que el ni?o (gemelo de Alexander, que naci¨® en 1996) estaba malo. El asunto es clave, ya que si se confirma este hecho -que Fritzl niega- el hombre podr¨ªa ser condenado a cadena perpetua, una condena superior a la que le impondr¨ªan si s¨®lo se admite el secuestro y la violaci¨®n.

La jornada de ayer comenz¨® como la primera: el criminal confeso entr¨® en la sala pasadas las nueve de la ma?ana, escoltado por la polic¨ªa y escondiendo la cara tras su famoso archivador azul, que contiene documentos que Fritzl usar¨¢ en su defensa. Con una diferencia: el hombre perdi¨® la batalla contra la prensa gr¨¢fica a mediod¨ªa, cuando baj¨® la guardia un momento, lo que aprovech¨® el fot¨®grafo para retratarlo.