Suelo nuevo sobre Sol

"Cuando lo vea terminado me lo creer¨¦", dice la dependienta de un estanco. "Nos va a resultar extra?o no ver las gr¨²as", comenta ir¨®nico el encargado de la farmacia con "vistas" a la nueva estaci¨®n de Cercan¨ªas que realiza Fomento.

Y es que las obras en la Puerta del Sol casi superan, seg¨²n los comentarios castizos, la famosa longevidad de las obras de El Escorial. Desde 2005 m¨¢quinas, vallas, ruido, polvo y accesos cortados han decorado el rile?a. El pasado mi¨¦rcoles las obras de la c¨¦ntrica plaza madrile?a entraron en la fase final (o de remate; el final de obras en la capital es un concepto dif¨ªcil de asimilar). Porque ha empezado la peatonalizaci¨®n. De los 6.681 metros cuadrados que ten¨ªa tras su reforma hace 20 a?os pasar¨¢ a tener 10.466, lo que supone un incremento del 57% para los viandantes.

Seg¨²n las previsiones municipales, lucir¨¢ nuevos esplendores dentro de seis meses. ?Y de verdad ser¨¢n seis meses de obras? "Las haremos corriendo lo que podamos y molestando lo menos posible", afirma a prop¨®sito de la ejecuci¨®n de las obras Pablo Us¨¢n, director general de V¨ªas y Espacios P¨²blicos del Ayuntamiento de Madrid.

Pero las molestias no han faltado desde 2005, sobre todo las econ¨®micas, para los negocios de la zona, resentidos por la menor afluencia de gente. "Nos ha afectado la facturaci¨®n un 25%. ?ramos entonces nueve empleados y ahora somos cinco", cuenta Ricardo, hijo del due?o de una farmacia abierta en Sol desde 1925. Las vistas de anta?o enfocan ahora a "un edificio fantasma", con el extinto Hotel Par¨ªs y un rosario de locales vac¨ªos (bancos, agencias de viajes...). Sobrevive en una pared la placa que recuerda las tertulias valleinclanescas en el Caf¨¦ de la Monta?a y en el tejado la famosa figura del sombrero rojo.

En el nuevo suelo de Sol el tr¨¢fico rodado se reduce. La plaza s¨®lo tendr¨¢ un cintur¨®n de circulaci¨®n (de transporte p¨²blico) en paralelo al edificio de la sede regional. Menos asfalto y m¨¢s baldosas. Nuevas e hist¨®ricas (el Ayuntamiento recuperar¨¢ losa antigua de granito y adoquines actuales). En la parte central y en los accesos habr¨¢ pavimento especial, granulado, con guiado t¨¢ctil para las personas ciegas.

El presupuesto de la peatonalizaci¨®n -que ejecutar¨¢ la constructora Sacyr- es de 3,9 millones de euros con cargo al Fondo Estatal de Inversi¨®n Local. El Gobierno central pone sus euros para las piedras municipales que pisar¨¢n los pies de los ciudadanos nacionales y extranjeros.

Unos pies que entre las prisas, las obras y el gent¨ªo que les rodean casi ni se percatan de que pasan por un grabado que no es la tapa de una alcantarilla, sino una placa met¨¢lica que pone kil¨®metro cero, al borde de la calzada, y con su brillo salpicado de colillas. "?Esto tan peque?o es el centro de Madrid?", pregunta una joven americana. "Pues como las estrellas donde ponen las manos en Hollywood", comenta un paseante, meti¨¦ndose en conversaci¨®n. "Si quieres ver el oso, yo te digo, que lo mismo no viene en tu gu¨ªa", se ofrece el hombre. S¨ª viene, pero dice que est¨¢ en la Puerta del Sol, as¨ª en general. La turista y sus amigos son conducidos por el gu¨ªa espont¨¢neo a la calle del Carmen. El plant¨ªgrado situado all¨ª se mudar¨¢ pronto bajo la sombra del cartel del T¨ªo Pepe.

Cerca del madro?o abrazado por el oso, unos andamios forrados de amarillo tropical enroscan la manzana en la que se ubica la hist¨®rica Casa de Diego, donde las empleadas limpian con mimo los objetos de las vitrinas, que parecen porosas al polvo de las reformas. Este lugar de peregrinaci¨®n para los amantes de los abanicos, los mantones y paraguas, expone su lujo de "firma artesanal desde 1858" a pesar de las dificultades. Tras tantos a?os de trasiego encaran la obra de peatonalizaci¨®n con optimismo. "Los trastornos servir¨¢n para algo bueno: que la Puerta del Sol quede bonita", dice Arturo, encargado de la tienda. Reconoce que la menor afluencia de turismo y clientela local estos a?os como consecuencia de las obras influy¨® en las ventas, "pero la crisis afecta m¨¢s".

La nueva Puerta del Sol, que formar¨¢ parte de la "malla peatonal" del centro (Callao, Fuencarral, Santo Domingo, ?pera...) ser¨¢ una "plaza dura", sin vegetaci¨®n que oxigene el paisaje urbano. "Parece que est¨¢ pensada para momentos puntuales, como Nochevieja o manifestaciones, cuando una masa ciudadana invade el espacio. ?Es un lugar para estar o s¨®lo de paso?", plantea el arquitecto Uriel Fogu¨¦, coordinador del grupo de investigaci¨®n [Inter]secci¨®n de Filosof¨ªa y Arquitectura. Otro colectivo de urbanistas, Oficina de Innovaci¨®n Pol¨ªtica, reclama en su blog que sean o¨ªdas las opiniones de los ciudadanos.

Y de la falta de informaci¨®n se queja uno de los afectados, Pedro, que regenta uno de los quioscos de la plaza. "El Ayuntamiento no nos ha comunicado c¨®mo van a ser los nuevos quioscos. Lo que sabemos [por ejemplo, que cada caseta nueva costar¨¢ 50.000 euros] es a trav¨¦s de la Asociaci¨®n de Vendedores. S¨®lo ha venido un t¨¦cnico para vigilar que no tap¨¢ramos la instalaci¨®n de Madrid Visi¨®n". As¨ª que tiene que "comprimir" el g¨¦nero. Cada vez hay m¨¢s cosas, adem¨¢s de peri¨®dicos, "y lo que no se ve no lo compran, ah¨ª est¨¢ el problema", se queja. La venta le ha bajado "un 30% en los ¨²ltimos tiempos". Espera que la cosa mejore con la peatonalizaci¨®n: "Estoy a favor. As¨ª se disfrutan m¨¢s los centros hist¨®ricos".

El proyecto del Ayuntamiento para transformar el centro solar de Madrid, sin embargo, "no parece muy imaginativo, no parece un espacio p¨²blico del siglo XXI", opina la arquitecta Belinda Tato, participante en la iniciativa Pensar Madrid. Para Tato, del equipo Ecosistema Urbano (autores del Ecobulevar de Vallecas), repensar la Puerta del Sol "es una oportunidad perdida".