Obama da 60 d¨ªas a General Motors para evitar la suspensi¨®n de pagos

La Casa Blanca dio ayer 60 d¨ªas de gracia a General Motors (GM) para que presente un plan cre¨ªble de reestructuraci¨®n que garantice su viabilidad a largo plazo. Si en ese plazo, durante el que el gigante de Detroit recibir¨¢ fondos para seguir operando, no se dan pruebas convincentes, la suspensi¨®n de pagos ser¨¢ una opci¨®n real. La misma "ayuda limitada" se ofrece a Chrysler, que en 30 d¨ªas tendr¨¢ que cerrar las negociaciones para aliarse con la italiana Fiat.

La Administraci¨®n que preside Barack Obama subi¨® ayer muy alto el list¨®n de su asistencia futura al sector del autom¨®vil, y empez¨® a preparar el camino hacia lo que puede ser la suspensi¨®n de pagos de una o de las dos marcas. "Lleg¨® el momento de afrontar los problemas y de solventarlos", dijo Obama, que habl¨® de "un nuevo comienzo" para la industria del motor. "No vamos a dejar que desaparezca", remach¨®.

Chrysler asegura que ya tiene firmado un acuerdo marco con Fiat

El punto de partida es simple: las dos automovil¨ªsticas deben elaborar planes de reestructuraci¨®n que den confianza, antes de movilizar nuevas ayudas que acompa?en el proceso de reflote. Obama reconoci¨® el "esfuerzo" realizado por GM, pero le dio un suspenso. Esto forz¨® la renuncia de Rick Wagoner como presidente ejecutivo. Su puesto ser¨¢ ocupado por Fritz Henderson, director de operaciones. Kent Kresa presidir¨¢ el Consejo de Administraci¨®n.

El Gobierno de Estados Unidos tendr¨¢ un papel mucho m¨¢s activo al definir el proceso de reestructuraci¨®n de GM, aunque precisa que no tiene intenci¨®n de gestionar las operaciones diarias de la compa?¨ªa. Y aunque Obama se mostr¨® confiado en que retomar¨¢ el vuelo, dijo que la suspensi¨®n de pagos puede ser el mecanismo m¨¢s efectivo para reducir costes y limpiar GM de deudas. "No hablo de un proceso en el que la compa?¨ªa se rompe, se vende o se queda atascada durante a?os en los tribunales sin despegar", dijo.

El caso de Chrysler es a¨²n m¨¢s complicado, como advirti¨® el presidente. Washington le da un plazo de 30 d¨ªas para completar la alianza con Fiat. La Casa Blanca cree que la tercera automovil¨ªstica estadounidense no es capaz de sobrevivir por s¨ª sola en este mercado y que necesita "un socio viable". Si la v¨ªa de estrechar lazos estrat¨¦gicos con Fiat no funciona, dejar¨¢ de darle ayudas, lo que forzar¨ªa su liquidaci¨®n.

Robert Nardelli, consejero delegado de Chrysler, respondi¨® diciendo que ya tiene firmado un "acuerdo marco" con Fiat y garantiz¨® a clientes, empleados y concesionarios que seguir¨¢ operando con normalidad durante el periodo de gracia. Los t¨¦rminos precisos de la alianza siguen en negociaci¨®n. Si se completa con ¨¦xito, el Departamento del Tesoro invertir¨¢ 6.000 millones.

El presidente reiter¨® que Detroit es un "emblema del esp¨ªritu estadounidense" y un pilar de la econom¨ªa. Sin embargo, dej¨® claro que su supervivencia no puede estar vinculada a la generosidad del contribuyente. "Deben subsistir por s¨ª solas". GM recibi¨® hasta la fecha 13.400 millones en ayudas y solicit¨® otros 16.400 millones. Chrysler recibi¨® 4.000 millones y pidi¨® 5.000 millones m¨¢s.

El miedo a que GM no sea capaz de escapar a la suspensi¨®n de pagos hizo mella en Wall Street, donde los t¨ªtulos de la automovil¨ªstica perdieron un 25% en la apertura, tras un repunte del 6% el viernes. Ford, mientras, parece controlar su destino y podr¨ªa evitar la ayuda gubernamental si la econom¨ªa empieza a repuntar y se agiliza el cr¨¦dito.