El nudista, la pizza y el 'caso Ekin'
En cierta ocasi¨®n le preguntaron al catcher de los Yankees de Nueva York Yogi Berra -una suerte de Maradona del b¨¦isbol de los a?os cincuenta- si hab¨ªa visto a un nudista que corr¨ªa por el estadio. "No podr¨ªa decir si era hombre o mujer", contest¨®, "porque se tapaba la cabeza con una bolsa".
Berra, del que he descubierto que tiene un club de admiradores en este peri¨®dico, es el autor de una serie de frases tan carentes de l¨®gica como sorprendentemente l¨²cidas que han perdurado en el tiempo.
Entre ellas -sin que mi selecci¨®n sea necesariamente la mejor- figuran: "Hay que ir siempre a los entierros de los dem¨¢s porque, de lo contrario, ellos nunca vendr¨¢n al tuyo"; "suelo dormir una siesta de dos horas, de una a cuatro"; "ya nadie va all¨ª porque siempre hay demasiada gente"; "el b¨¦isbol es mental en un 90%, la otra mitad es f¨ªsica"; "era imposible mantener la conversaci¨®n porque todo el mundo estaba hablando demasiado" o "si llegas a una bifurcaci¨®n, t¨®mala".
La Audiencia Nacional afirm¨® que Ekin era parte esencial de ETA
Ahora el Supremo estudia rebajar las penas por desproporcionadas
Esta ¨²ltima frase de Berra me ha recordado, en una acrobacia del pensamiento, que el Tribunal Supremo se encuentra precisamente en una encrucijada a prop¨®sito del caso Ekin. Ya saben, aquel macroproceso instruido por el juez Baltasar Garz¨®n contra los responsables de varias organizaciones del entorno de ETA que supuestamente abarcaban el entramado de financiaci¨®n, de medios de comunicaci¨®n y de relaciones internacionales de la banda terrorista y que, gr¨¢ficamente, el magistrado calific¨® como "el est¨®mago, el coraz¨®n y la cabeza de ETA".
El juicio se inici¨® en noviembre de 2005 -con 56 acusados en el banquillo, a los que el fiscal acusaba de formar parte de ETA o de cumplir las ¨®rdenes de su direcci¨®n- y dur¨® a?o y medio. La Audiencia Nacional conden¨® a 47 de los procesados a penas que oscilaban entre los 2 y los 22 a?os de c¨¢rcel.
La presidenta del tribunal que juzg¨® el caso y ponente de la sentencia, ?ngela Murillo, lo dej¨® muy claro: "La Koordinadora Abertzale Socialista (KAS) no constitu¨ªa s¨®lo un conjunto de organizaciones sat¨¦lites que giraban alrededor de ETA, no. Era mucho m¨¢s que eso, era parte de las entra?as de ETA, conformando la direcci¨®n de uno m¨¢s de sus frentes, junto al armado y el pol¨ªtico, llamado por la misma organizaci¨®n terrorista "frente de masas" y "frente medi¨¢tico", consider¨¢ndolo de vital importancia sobre todo a la hora de actuar en conjunci¨®n con la lucha armada".
Respecto a Ekin, la sentencia explicaba: es un "manto de legalidad" escogido por KAS para seguir actuando; "integra una parte esencial de ETA, no siendo simplemente una organizaci¨®n que le preste su apoyo, que est¨¦ en su entorno, sino que est¨¢ en su coraz¨®n, exactamente igual que KAS".
Ahora -el 20 de abril- el Supremo revisa el caso, y eso es precisamente lo que est¨¢ en juego, el concepto de que ETA no est¨¢ formada solamente por sus comandos.
El alto tribunal ya lo estableci¨® en la sentencia sobre Jarrai, el movimiento juvenil del entorno etarra, pero de nuevo vuelve a ser cuestionado.
La Fiscal¨ªa insta una rebaja generalizada de las penas impuestas por la Audiencia y apoya parcialmente los recursos de 33 de los condenados por entender que en la mayor¨ªa de los casos se "exasper¨®" la pena por delito de pertenencia a banda terrorista, llev¨¢ndola al l¨ªmite m¨¢ximo.
El Supremo se halla ahora en la encrucijada, porque adem¨¢s varios casos se encuentran pendientes en la Audiencia Nacional de lo que se decida en esta sentencia, como, por ejemplo, Batasuna, Udalbiltza o Egunkaria, sin ser exhaustivos.
Fuentes del alto tribunal han indicado que presumiblemente habr¨¢ absoluciones y rebajas de condenas, porque las penas impuestas fueron desproporcionadas.
A juicio de estos expertos, "existe un problema de prueba y de c¨®mo se construye la prueba sobre los hechos", pero previsiblemente se confirmar¨¢ la doctrina sentada en el caso Jarrai, sin cuestionar que ETA no est¨¢ formada ¨²nicamente por sus comandos.
En todo caso, y hasta que los cinco magistrados del Supremo hayan firmado la resoluci¨®n, todo puede pasar. Ya lo dec¨ªa Yogi Berra, "nada se termina hasta que se acaba", aunque a la vista de la indigesti¨®n que una sentencia como ¨¦sa puede generar ser¨ªa m¨¢s apropiada su frase: "Voy a cortar la pizza en cuatro pedazos porque no tengo tanta hambre como para comer seis pedazos".
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