La ley de Gobierno no pone l¨ªmites a la acci¨®n del Ejecutivo en funciones

La inexistencia en la Ley de Gobierno vasca de previsiones respecto a los l¨ªmites de la actuaci¨®n del Ejecutivo en funciones est¨¢ facilitando la pol¨ªtica de manos libres que viene practicando el tripartito en los dos meses que mediar¨¢n entre las elecciones y su abandono del mando. Sin embargo, la reforma aplicada en 1997 a la Ley de Gobierno estatal s¨ª fija prohibiciones y se?ala que el equipo saliente "limitar¨¢ su gesti¨®n al despacho ordinario de los asuntos p¨²blicos, absteni¨¦ndose de adoptar, salvo casos de urgencia debidamente acreditados (...) cualesquiera otras medidas".

El futuro lehendakari, Patxi L¨®pez record¨® ayer que ya emplaz¨® a tripartito en funciones a ce?irse a ese proceder, de modo que el nuevo Gobierno cuente con "un presupuesto que manejar para hacer pol¨ªtica". Las numerosas decisiones de ¨²ltima hora del tripartito de Juan Jos¨¦ Ibarretxe las considera "intentos de dejarlo todo atado y bien atado", y de recortarle el margen de maniobra. No lo lograr¨¢, advirti¨®, porque su equipo usar¨¢ "todas las palancas y recursos presupuestarios, incluida la capacidad de endeudamiento, para ponerlos al servicio de las pol¨ªticas que hay que hacer".

El Ejecutivo central s¨ª tiene constre?ida su actuaci¨®n al entrar en funciones

?Qu¨¦ es urgente y qui¨¦n lo determina? Esa fue la pregunta con la que la portavoz del Gobierno, Miren Azkarate respondi¨® a los primeros cuestionamientos de acciones del Ejecutivo en estas semanas. Obviamente, y m¨¢s a¨²n en ausencia de norma expresa, el propio Gobierno.

"La doctrina tiene establecido que urgente, en la situaci¨®n de funciones de un Ejecutivo, es s¨®lo aquello cuya postergaci¨®n perjudicar¨ªa el inter¨¦s general", se?al¨® a EL PA?S el profesor de Derecho Constitucional de la UPV Eduardo V¨ªrgala, partidario de introducir en la Ley de Gobierno vasca previsiones sobre el ejercicio en funciones. Incluso la f¨®rmula establecida para el Gobierno central deja ya un margen grande de discrecionalidad en la interpretaci¨®n de los conceptos de urgencia y de inter¨¦s general, pero en el caso vasco ese margen es absoluto.

?Entra en la calificaci¨®n de urgente la provisi¨®n de 120 millones para apoyo financiero a las pymes en la actual situaci¨®n de crisis y una vez agotada la cantidad anterior? La respuesta es s¨ª. ?Est¨¢n en la misma categor¨ªa decisiones como la compra de veh¨ªculos, sillas o equipos inform¨¢ticos, licitaciones diversas o la contrataci¨®n de la plantilla de un organismo como el Instituto Vasco de Cr¨¦dito, que estaba sin ella desde su creaci¨®n hace dos a?os? ?Perjudica al inter¨¦s general -y en ese caso, por qu¨¦ ahora s¨ª y antes no- el que las subvenciones de Cultura se hubieran convocado en las fechas en que se ha hecho otros a?os? La respuesta es m¨¢s bien no. V¨ªrgala se?ala que habr¨ªa que analizar decisi¨®n por decisi¨®n, pero que, exista o no previsi¨®n legal sobre los l¨ªmites de un gobierno en funciones, la gu¨ªa debe ser "la prudencia pol¨ªtica".

Para la parlamentaria socialista Joana Madrigal, portavoz en la Comisi¨®n de Econom¨ªa, Hacienda y Presupuestos, "el frenes¨ª productivo" que posee al tripartito en estas semanas se vuelve en su contra y le deja en evidencia. Sus numerosas y r¨¢pidas decisiones actuales, incluso sin entrar en detalles sobre su justificaci¨®n o no, "demuestran, como poco, que era posible otro modo de actuar m¨¢s ¨¢gil, y, por tanto, que antes se ha movido en la indolencia y ahora lo hace en el sectarismo en el uso de la ejecuci¨®n presupuestaria", se?al¨®. Para Madrigal la intenci¨®n es clara: "El Gobierno quiere cumplir, por el procedimiento de dejar pr¨¢cticamente liquidado el presupuesto, la bravuconada de "gobernar desde la oposici¨®n".