Brasil halla los primeros restos del avi¨®n franc¨¦s

Los pilotos de la Fuerza A¨¦rea brasile?a encontraron ayer flotando, a 650 kil¨®metros de la isla de Fernando de Noronha, manchas de queroseno, restos del fuselaje, un salvavidas y partes de asientos del Airbus de Air France que desapareci¨® la madrugada del lunes con 228 personas a bordo, seg¨²n confirm¨® anoche el ministro de Defensa brasile?o, Nelson Jobim. Fue, al fin, la primera pista cierta del destino del aparato desde que a las 4.15 del lunes (hora de la Espa?a peninsular) lanzara, de forma autom¨¢tica, una decena de se?ales informando de una aver¨ªa el¨¦ctrica. Media hora antes, el piloto hab¨ªa hablado con un control a¨¦reo brasile?o inform¨¢ndole de que entraban en una zona de tormentas y turbulencias.

La zona en la que han sido encontrados los restos, esparcidos en un radio de 60 kil¨®metros, est¨¢ m¨¢s cerca de Brasil de lo que se hab¨ªa previsto. En principio, los aviones encargados de rastrear el Atl¨¢ntico para tratar de hallar huellas del avi¨®n ten¨ªan asignada una zona de 2.000 kil¨®metros de per¨ªmetro, una extensi¨®n inmensa, mayor que Mauritania, equidistante de Brasil y de ?frica.

Tras el hallazgo de los restos, la zona de la ca¨ªda queda fijada con cierta precisi¨®n y empieza una verdadera carrera contrarreloj para tratar de recuperar la caja negra. ?sta emite una se?al localizadora que se escucha a cierta distancia, que en teor¨ªa est¨¢ sonando ahora en el fondo del mar, pero que tiene una duraci¨®n limitada: 30 d¨ªas. Si pasado ese tiempo no se ha recuperado, se perder¨¢n todas las posibilidades de encontrarla y de saber qu¨¦ fall¨® y qu¨¦ precipit¨® el avi¨®n al mar.

En Francia, la palabra que m¨¢s se repite es "misterio". Nadie se explica c¨®mo un avi¨®n casi nuevo, de 2005, tachado de seguro, inspeccionado en abril y con un comandante experimentado pudo desaparecer as¨ª en medio del mar, sin siquiera lanzar una se?al de auxilio. En las primeras horas, Air France recurri¨® a la explicaci¨®n meteorol¨®gica: a las tormentas, especialmente duras y violentas en esa zona del planeta, y al impacto de un rayo en el fuselaje que hubiera dejado sin electricidad al avi¨®n.

Ayer, Air France ya no dijo nada. Han sido los responsables pol¨ªticos los que se han encargado de airear las escasas explicaciones a las que pueden agarrarse. El primer ministro, Fran?ois Fillon, asegur¨® ayer en la Asamblea Nacional que "no hay ninguna hip¨®tesis que prime sobre otra", una manera de decir que no se descarta ni siquiera un atentado terrorista.

Tambi¨¦n el ministro de Transportes, Jean-Louis Borloo, a la pregunta de si se ha excluido un atentado respondi¨®: "No se excluye nada porque no sabemos nada". De ah¨ª, a?ade Borloo, que sea vital encontrar la se?al de localizaci¨®n de la caja negra para rescatarla y aclarar, gracias a sus grabaciones, qu¨¦ hizo que al Airbus se lo tragara el mar. El avi¨®n desapareci¨® con 228 personas a bordo, la mayor¨ªa franceses y brasile?os. Tambi¨¦n hab¨ªa dos espa?oles. Adem¨¢s, una de las azafatas, Clara Mar Amado, ten¨ªa doble nacionalidad espa?ola y argentina.

Durante todo el d¨ªa de ayer Francia sigui¨® estupefacta las noticias de la aparici¨®n de los restos del avi¨®n y, sobre todo, la falta de una explicaci¨®n definitiva. Hoy se celebrar¨¢ un solemne funeral en Notre Dame con la asistencia de Nicolas Sarkozy y los familiares de las v¨ªctimas.

Mientras tanto, segu¨ªa la b¨²squeda de los restos en el Atl¨¢ntico. Por la ma?ana, un avi¨®n militar brasile?o avist¨® varios objetos flotando en la superficie del oc¨¦ano: pedazos met¨¢licos blancos, asientos, una boya naranja, un tambor y manchas de queroseno y aceite. La pista la hab¨ªa dado casi seis horas antes una aeronave radar R-99 que detect¨® la presencia de "materiales met¨¢licos y no met¨¢licos" en las mismas coordenadas.

La recogida de las piezas halladas flotando sobre el oc¨¦ano es importante porque su an¨¢lisis podr¨ªa aportar alguna pista sobre lo sucedido. Para ello tienen que llegar a la zona -previsiblemente hoy- los tres buques de la Marina brasile?a que a ¨²ltima hora de ayer a¨²n navegaban rumbo a esas coordenadas, localizadas unos 650 kil¨®metros al noreste de la isla de Fernando de Noronha, una de las reservas marinas mejor conservadas de Brasil y meca del turismo ecol¨®gico.