La sombra y la tormenta
Los aviones entre Europa y Suram¨¦rica vuelan hasta tres horas fuera de radar
El piloto espa?ol Luis Lacasa volaba en mitad del Atl¨¢ntico cuando se puso a pensar que 24 horas antes, seguramente cerca de donde se encontraba, el comandante del avi¨®n de Air France desaparecido luch¨® a las bravas por mantener el vuelo. "Me invadi¨® una sensaci¨®n terrible de soledad nada m¨¢s cruzar el frente intertropical", cuenta el piloto. Estaba dejando atr¨¢s una franja complicada, donde a menudo se crean lluvias fuertes y granizo. El Airbus desapareci¨® en medio de una de estas violentas tormentas, justo en una zona de sombra del oc¨¦ano, donde el radar no concreta su posici¨®n. Dos factores que agrandan el misterio del vuelo AF-447.
El frente intertropical, por el que tienen que cruzar todos los aviones que se dirigen a Am¨¦rica del Sur, crea una barrera de cumulonimbos, que son nubes verticales que suelen producir tormentas el¨¦ctricas y lluvias intensas, y pueden superar en algunos casos los 16 kil¨®metros de altura. Excede el techo operativo de los aviones. "Hay que atravesar ese frente. Normalmente no es una barrera compacta, sino que suele haber cielos despejados por donde puede pasar el avi¨®n", dice Luis Lacasa, piloto de Iberia.
Un piloto teme m¨¢s un temporal al aterrizar que en pleno vuelo
Lacasa, nuevo decano del Colegio Oficial de Pilotos de Aviaci¨®n (COPAC), afirma que en el momento en el que ¨¦l pas¨® hab¨ªa tormentas aisladas "muy f¨¢ciles de evitar". Otro piloto, tambi¨¦n con una gran experiencia en los vuelos a Suram¨¦rica, sostiene que es una ruta "en la que hay que prestar especial atenci¨®n por la climatolog¨ªa", pero en la que no debe haber en principio ning¨²n problema. "En el plan de vuelo ves la meteorolog¨ªa que hay en la ruta y en los caminos alternativos. Si ves el frente muy activo cargas m¨¢s combustible y te preparas".
Los pilotos temen mucho m¨¢s las tormentas cuando se encuentran con ellas en la aproximaci¨®n a tierra. El 70% de los accidentes a¨¦reos suelen producirse al aterrizar o al despegar, como el siniestro del avi¨®n de Spanair ocurrido en Madrid en 2008. "Es extra?o que un vuelo caiga en aguas internacionales y fuera de radar", dice Arturo Benito, profesor de la Escuela T¨¦cnica Superior de Ingenieros Aeron¨¢uticos.
Los radares tienen un alcance limitado y los aviones que cruzan el Atl¨¢ntico sur se encuentran hasta tres horas "en sombra" (desde Fernando de Noronha a la isla de la Sal). El avi¨®n de Air France se encontraba en ese tramo cuando ocurri¨® la tragedia.
En general, aunque algunos creen que en pleno siglo XXI ya deber¨ªa tenerse una cobertura total en el oc¨¦ano, muchos opinan que no representa mayor problema, pues las comunicaciones por radio son continuas y aplican lo que se llama la navegaci¨®n estimada. Cada cierto tiempo, el piloto notifica el punto en el que est¨¢, la hora y la altura, y las dos posiciones siguientes.
El avi¨®n de Air France deber¨ªa haber aparecido en las pantallas de los controladores del aeropuerto de Gando (Gran Canaria) tras salir de la zona de sombra. No lo hizo. Los investigadores franceses precisaron ayer que las condiciones meteorol¨®gicas no eran "particularmente excepcionales".
Ese mismo d¨ªa, el piloto de un avi¨®n de Air Comet que volaba de Lima a Madrid vio, a la derecha de la cabina, algo parecido a "un destello de luz que descend¨ªa vertiginosamente". En tierra, al conocer la noticia de la desaparici¨®n del avi¨®n, pens¨® que podr¨ªa tratarse del AF-447. En un informe que remiti¨® a su compa?¨ªa destaca que el "destello" tard¨® cinco o seis segundos en caer. Anot¨® tambi¨¦n que en esa direcci¨®n se observaban tormentas el¨¦ctricas, mientras que ellos volaban por cielo despejado. El subdirector general de Air Comet, Fernando Gil, explica que toda esta informaci¨®n se ha puesto a disposici¨®n de los investigadores.
Un tripulante del vuelo IB-6024 de Iberia que aterriz¨® el lunes en el aeropuerto de Madrid procedente de R¨ªo de Janeiro estaba saliendo del aparcamiento de la T-4 con su coche cuando encendi¨® la radio. El bolet¨ªn informativo contaba que un avi¨®n de Air France hab¨ªa desaparecido en mitad del oc¨¦ano. Apag¨® de golpe la radio. Y record¨® que, apenas 10 horas antes, se hab¨ªa cruzado con la tripulaci¨®n de este vuelo en el hangar, a punto de embarcar. Se cruzaron unos saludos. "Nuestro avi¨®n [que volaba en teor¨ªa a pocos minutos de la cola del accidentado, a la misma altura y en el mismo pasillo a¨¦reo] no tuvo ning¨²n problema meteorol¨®gico. Hab¨ªa tormentas, s¨ª, pero como un d¨ªa cualquiera", cuenta. No se explica qu¨¦ pudo ocurrir en el vuelo que sali¨® siete minutos antes que el suyo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.