Cortos para "vivir con may¨²sculas"

"El teatro me salv¨® la vida", cuenta Mar¨ªa, de 44 a?os y ex drogadicta. "Te lo juro, jam¨¢s volv¨ª a meterme nada". Esta vecina de una peque?a poblaci¨®n cercana a Santiago se emociona al contar c¨®mo descubri¨® el teatro, y con ¨¦l, la actriz que lleva dentro. Es la protagonista de dos de los tres cortometrajes que realiza la UMAD (Unidade Municipal de Atenci¨®n a Drogodependentes) del Ayuntamiento compostelano, como terapia de integraci¨®n social. "Es buena en todos los registros", explica Pilar Sabio, trabajadora social del centro y una de las organizadoras del taller de trabajo, "te hace re¨ªr y llorar, llorar mucho".

Mar¨ªa se pierde en halagos a Ram¨®n Molina, el director: "Es el mejor director del mundo", no para de repetir. Hace cuatro a?os que este educador social, dirige al grupo en el plano audiovisual, y elabora los guiones ayudado por profesionales como Pilar Sabio. Es un proyecto pionero en el pa¨ªs: utilizar el audiovisual como herramienta para la integraci¨®n social de drogadictos y ex adictos alrededor de un grupo de teatro. La UMAD se sirve de la ayuda de un montador, que es sobre todo, psicopedagogo. "No nos sirve una persona que tenga un m¨¢ster en cine, nos sirve una persona con ese perfil", explica el director, "alguien que d¨¦ m¨¢s importancia a lo que se cuenta y se vive que a la luz o el plano".

"Lo que m¨¢s cuesta es la constancia, no est¨¢n acostumbrados a organizarse"

"En los cortos no prima la est¨¦tica, el gui¨®n nos importa cero"

Cada lunes, la puerta del taller est¨¢ abierta para todo el que quiera entrar. Es un grupo variable y flexible, que nunca ha tenido m¨¢s de 10 personas, y en el que sus directores se esfuerzan por dejar claro que no les interesa la masificaci¨®n, por miedo a que las relaciones interpersonales no fluyan. Hacer teatro, en vez de cine, resultar¨ªa complicado: "Aqu¨ª podemos parar, avanzar y no les presiona el p¨²blico". Sin presiones y sin obligaciones, los participantes entregan la tarea el lunes. "Durante la semana han de plantearse que tienen que entregar un ejercicio, han de planificarse, organizarse y pensar sobre ¨¦l", cuenta Molina. "Lo que m¨¢s cuesta es la constancia", a?ade el director. "Lo m¨¢s dif¨ªcil es perseverar en ese trabajo. No son personas acostumbradas a organizarse, y esto les ayuda a tomar decisiones, a rellenar esos ratos que tienen libre, espacios de riesgo".

En total, esta especial cantera de actores ha dado luz tres proyectos: Xan e Lios te?en un problema, Lazos y Buxaina. Ahora preparan un sugerente libro de poemas audiovisuales. "Se saca a la luz sus emociones y hay que pulir y minimizar lo negativo". Cada participante ha de escribir un poema, que despu¨¦s interpreta. Molina graba sus sombras sobre una pared azul. Es el primer paso antes de ponerles im¨¢genes a sus palabras. En sus proyectos, "no prima la est¨¦tica, y nos importa cero el gui¨®n", explica Molina, "no pueden ser prisioneros de nada, y menos de un di¨¢logo". "Han de trabajar c¨®modos, sin cors¨¦, a su ritmo".

El laboratorio de comunicaci¨®n, la autoestima y la toma de decisiones son el eje de los trabajos preparados. Los monitores plantean estos conflictos sobre un gui¨®n y adaptan los personajes y tramas a los actores que tienen. El trabajo de integraci¨®n da un paso m¨¢s all¨¢ cuando se pone en marcha un nuevo proyecto. Se buscan intercambios para trabajar, con alumnos de disciplinas sociales de universidades como la de Santiago o talleres conjuntos por medio de programas de integraci¨®n como el que mantuvieron con Aveiro (Portugal) en Lazos. Directores y cantera hablan con especial ilusi¨®n de ese proyecto. Mar¨ªa se emociona: "T¨² no sabes lo que es verte en pantalla grande, en Portugal, ante un auditorio que no te conoce", y sorbe las l¨¢grimas, "aquello es lo m¨¢s grande que me ha pasado en la vida".

Recibir la respuesta a su trabajo, a su esfuerzo, ver c¨®mo se valora esa rotura de su muro de silencio, y ver que ha merecido la pena, es el premio m¨¢s valioso para este grupo. "El proyecto es lo que es por ellos", cuenta Sabio. Las personalidades que componen el grupo son cambiantes, delicadas, y sus vidas y circunstancias, fluctuantes. "Van y vienen", cuenta la educadora, "uno est¨¢ fuera de Santiago, otro en desintoxicaci¨®n... No siempre est¨¢n aqu¨ª".

La suya no es una tarea f¨¢cil, pero transmiten el mismo entusiasmo que los actores. La clave es ilusionar; durante y, sobre todo, despu¨¦s del proyecto. "En el proceso de rodaje hab¨ªa adrenalina y magia", cuenta Sabio. El momento del estreno est¨¢ cuidado al m¨¢ximo. "Entregamos oscars con alfombra roja y todo", cuenta Pilar Sabio, "donde todos ganan por algo: por la mejor peluca, la mejor carcajada...". Nadie podr¨¢ decir que los monitores no sienten ni se emocionan igual que los propios actores, se sienten parte, se enorgullecen de verles evolucionar, de verles abrirse poco a poco, "hacer el esfuerzo de vivir de verdad, con may¨²scula", a?ade Molina. "El proyecto es lo que es por ellos", a?ade Sabio.