Dudas

Debe el Gobierno central despejar cuanto antes las dudas y temores de Andaluc¨ªa sobre el nuevo modelo de Financiaci¨®n Auton¨®mica. En la ronda de contactos que se inicia esta semana, con el encuentro entre Gri?¨¢n y Chaves, se han de dejar las cosas bien claras. El criterio debe ser el de la poblaci¨®n. Los problemas vienen a ra¨ªz de la llegada a la Vicepresidencia Segunda de Elena Salgado, a quien se atribuye haber cedido a las presiones catalanas para introducir otras variables, como la de la capacidad fiscal de cada uno de los territorios. De momento, Gri?¨¢n no se conforma con que Zapatero le haya dicho que Andaluc¨ªa va a ser la que m¨¢s recursos recibir¨¢.

Resulta inquietante el silencio del Ejecutivo ante las quejas surgidas. Chaves insiste en que, efectivamente, ser¨¢ la poblaci¨®n el elemento fundamental pero, al mismo tiempo, asegura que ninguna comunidad tiene capacidad de veto, que no descarta que alguna se descuelgue y, quiz¨¢ en un excesivo af¨¢n de quitar hierro al debate, que hay determinadas comunidades que hacen mucho ruido, en referencia as¨ª a las pretensiones de los pol¨ªticos catalanes. En cualquier caso, en Madrid se muestran extra?amente tranquilos. Ni siquiera se han molestado en establecer contactos discretos a ra¨ªz del toque de atenci¨®n dado. Tal vez porque conf¨ªan en que el Gobierno andaluz debe estar m¨¢s que satisfecho con el reconocimiento de la liquidaci¨®n de la Deuda Hist¨®rica. Si es as¨ª, alguien deber¨ªa decirles a estos magn¨¢nimos dirigentes que Andaluc¨ªa no se vende por un plato de lentejas, y que el pago, cuando se haga, no les exime de establecer una financiaci¨®n justa y equilibrada.