Las aulas se llenan con los que huyen del paro
La dificultad para encontrar trabajo frena la tasa de abandono escolar - Las familias empujan a los adolescentes a seguir estudiando para evitar que pasen el d¨ªa sin nada que hacer
El n¨²mero de estudiantes en bachillerato y formaci¨®n profesional (FP), el escal¨®n que representa claramente el punto negro educativo en Espa?a, ha empezado a crecer. Despu¨¦s de quince a?os de descenso continuado, est¨¢ aumentando el 3%. En un panorama sombr¨ªo del 55% de ca¨ªda acumulada, no es un dato como para lanzar las campanas al vuelo, pero s¨ª apunta a un cambio de tendencia en un pa¨ªs donde el abandono escolar temprano -los alumnos que dejan de estudiar despu¨¦s de la ESO-, es del 31%, el doble de la media europea. Este porcentaje ha configurado una pir¨¢mide de poblaci¨®n activa deforme, con mucha mano de obra sin cualificaci¨®n, exceso de titulados universitarios y una tremenda escasez de puestos intermedios.
El empleo f¨¢cil en la costa favorece que los j¨®venes dejen las aulas
138.000 adultos se han matriculado para obtener el graduado escolar
El auge estudiantil se ve en la Comunidad Valenciana, Baleares y Catalu?a
El objetivo de la UE es que en 2010 el 80% de la poblaci¨®n tenga bachillerato o FP
El ministro de Educaci¨®n, ?ngel Gabilondo, se ha mostrado contento porque "cada vez m¨¢s espa?oles eligen mayor formaci¨®n en lugar de un mal empleo o el desempleo, y tambi¨¦n es destacable que m¨¢s j¨®venes adquieran m¨¢s conocimientos para aumentar sus oportunidades", dijo al presentar los datos de alumnos en el Senado. Sin embargo, su departamento no se atreve a ligar claramente este cambio de tendencia con la crisis econ¨®mica que atenaza el pa¨ªs: "Es demasiado pronto", dice una fuente oficial. Sin embargo, desde el departamento catal¨¢n de Educaci¨®n s¨ª afirman que la crisis est¨¢ detr¨¢s de este cambio de tendencia que no puede explicarse por razones demogr¨¢ficas, ya que en el escal¨®n anterior, la Educaci¨®n Secundaria Obligatoria (ESO), la cifra de alumnado sigue bajando y la llegada de los inmigrantes a Espa?a se ha estabilizado.
Un portavoz del Departamento de Educaci¨®n de Catalu?a hace referencia a la escasez creciente de empleos no cualificados, por ejemplo, en la hosteler¨ªa, que se est¨¢ produciendo en Catalu?a, la Comunidad Valenciana y Baleares. Las dos primeras, con subidas mayores del 5,5%, y un 4% en Baleares: "Llevamos a?os diciendo que el trabajo no cualificado es pan para hoy y hambre para ma?ana", dice Miquel Mestre, director general de FP de Baleares, la comunidad con m¨¢s abandono escolar de toda Espa?a, del 44% (s¨®lo superado por Ceuta y Melilla).
Muchos expertos se?alan como una de las causas del abandono educativo temprano la facilidad de la ¨²ltima d¨¦cada, sobre todo en zonas costeras, para encontrar empleos no cualificados en la construcci¨®n y el turismo.
Algunos incluso vaticinaban -o esperaban- que la crisis les har¨ªa volver la vista a la formaci¨®n profesional. Hab¨ªa indicios de que as¨ª ser¨ªa, como el repunte de la educaci¨®n de adultos, hoy ocupada mayoritariamente por j¨®venes que retoman sus estudios a?os despu¨¦s de haberlos dejado. Durante el pasado curso, 138.000 adultos se inscribieron para conseguir el graduado escolar, 22.500 m¨¢s que cuatro a?os antes.
El catedr¨¢tico de Econom¨ªa de la Universidad Pompeu Fabra Jos¨¦ Garc¨ªa Montalvo esperaba esta subida: "Uno de los pocos puntos positivos de la crisis es que los j¨®venes seguir¨¢n m¨¢s tiempo en el sistema educativo. Esto facilita que haya mejoras de cualificaci¨®n en la mano de obra para un futuro cambio productivo basado m¨¢s en la econom¨ªa del conocimiento", aseguras. Jos¨¦ Mar¨ªa Peir¨®, director del Observatorio de Inserci¨®n Profesional de la Universidad de Valencia, a?ade: "En una sociedad con una amplia clase media, las familias quieren evitar que el adolescente est¨¦ todo el d¨ªa en la calle. As¨ª que si no hay trabajo, se le empuja a seguir estudiando... Esto, en principio, es positivo, ya que puede incrementar el capital humano de los j¨®venes para cuando vengan tiempos mejores", explica.
Si bien este cambio de tendencia coincide con la primera subida de la tasa de paro de m¨¢s de un punto desde 1992 (fue de 3,3 puntos en el tercer trimestre de 2008, justo cuando se formalizaron las matr¨ªculas de FP y bachillerato de este curso), los datos del desempleo por comunidades no sirven para explicar por s¨ª solos el aumento del alumnado por autonom¨ªas. Es cierto que entre septiembre de 2007 y 2008, Baleares ha sido la comunidad donde m¨¢s ha crecido la tasa de paro en menores de 25 a?os (19 puntos, del 7% al 26%), y la Comunidad Valenciana, la tercera. Y, sin embargo, en La Rioja, la segunda autonom¨ªa donde m¨¢s ha crecido esa tasa, el n¨²mero de estudiantes en ense?anzas posobligatorias apenas ha aumentado y, de hecho, ha disminuido levemente en bachillerato.
Por otra parte, en Melilla,donde se ha incrementado el alumnado de posobligatoria un 5,6%, el paro de los j¨®venes no se ha disparado tanto como en otras partes, aunque la cifra ya era m¨¢s alta que en cualquier comunidad aut¨®noma.
Efectos demogr¨¢ficos o de inmigraci¨®n insospechados, caracter¨ªsticas particulares de cada poblaci¨®n, o efectos psicol¨®gicos de lo m¨¢s variado pueden estar influyendo en este cambio de tendencia, comenta Peir¨®. De momento, "los chicos se dan cuenta y saben que ya no tienen un trabajo esperando, de encofrador o de lo que sea, en cuanto salgan por la puerta de la escuela", dice Jes¨²s Herrero, profesor del instituto p¨²blico Enric Valor de Picanya (localidad situada a cinco kil¨®metros de Valencia). Herrero insiste en lo de chicos, ya que ellos abandonan m¨¢s que las chicas, el 23,8% frente al 35,8%.
La directora general de Evaluaci¨®n, Innovaci¨®n y Calidad Educativa y de la Formaci¨®n Profesional de la Comunidad Valenciana, Auxiliadora Hern¨¢ndez, pide precauci¨®n a la hora de tratar los datos, porque, coincidiendo con el ministerio, dice que es prematuro, pero s¨ª cree que se empieza a ver "un cambio sociol¨®gico". Las cifras dan cuenta de ¨¦l. Entre otros, en el importante aumento de la educaci¨®n a distancia, de un 12% en bachillerato y de un 32% en la FP de grado superior.
Esto se ha producido gracias, sobre todo, a los crecimientos en Valencia y Catalu?a. El comportamiento del alumnado en ambas comunidades parece darle la raz¨®n al catedr¨¢tico de Econom¨ªa Aplicada Jorge Calero, quien dijo en estas mismas p¨¢ginas en septiembre del a?o pasado que en Espa?a muy pocos j¨®venes de 16 a?os estudian y trabajan a la vez, s¨®lo un 5,6%, pero que ese porcentaje aumentar¨ªa si se facilitasen "estudios a tiempo parcial o reducciones del horario de trabajo para determinados contratos".
Miquel Mestre, director general de FP de Baleares, cree tambi¨¦n que la clave est¨¢ en las medidas de flexibilizaci¨®n, esto es, multiplicar las posibilidades de reenganche al sistema, algo que apenas acaba de empezar. "Todo lo que se haga en este sentido es poco", dice. En Baleares, los crecimientos se han producido sobre todo en las ense?anzas presenciales (tambi¨¦n en Madrid, Castilla-La Mancha, Andaluc¨ªa y Canarias, las otras comunidades que han crecido por encima de la media), pero, por ejemplo, se ofrecen t¨ªtulos de FP por partes, para quien quiera estudiarlos poco a poco, con horarios flexibles, y a los que quieren prepararse para las pruebas de acceso a la FP de grado superior sin tener el t¨ªtulo, les ofrecen hacerlo estudiando el bachillerato: "As¨ª, aunque no pasen las pruebas de acceso, al menos tendr¨¢n algunas asignaturas de bachillerato aprobadas por si en alg¨²n momento quieren terminar de hacerlo. El caso es que todo lo que se haga, sume", dice Mestre.
En Catalu?a, adem¨¢s de reforzar la oferta de educaci¨®n a distancia con el Institut Obert de Catalunya -con casi un 60% de alumnos menores de 30 a?os-, el Gobierno tiene firmados convenios con 150 gremios para facilitar que los j¨®venes compatibilicen la FP con el empleo, asegura un portavoz.
Auxiliadora Hern¨¢ndez, de la consejer¨ªa valenciana de Educaci¨®n, insiste en el esfuerzo que est¨¢n haciendo todas las comunidades para llevar a cabo esa flexibilizaci¨®n del sistema. En la suya, por ejemplo, los chicos que aprueben los programas de cualificaci¨®n profesional inicial -durante el que los que los chavales de 16 a?os que no van a conseguir el t¨ªtulo de ESO por la v¨ªa ordinaria aprenden los rudimentos de un oficio mientras avanzan en su educaci¨®n general- podr¨¢n acceder directamente a la FP de grado medio sin tener que hacer ning¨²n examen m¨¢s (en la mayor¨ªa de comunidades los alumnos sin el t¨ªtulo de ESO tienen que pasar necesariamente por esa prueba).
As¨ª, la parte que est¨¢n poniendo las administraciones para aprovechar esa coyuntura econ¨®mica que previsiblemente devolver¨¢ o mantendr¨¢ en el sistema educativo cada vez a m¨¢s j¨®venes -a fin de cuentas, el objetivo que persiguen todos los Gobiernos- consiste principalmente en multiplicar las opciones y las v¨ªas alternativas para mantenerse o reengancharse a las aulas. Ejemplos: la educaci¨®n a distancia, el paso de los programas de cualificaci¨®n profesional inicial a la FP de grado medio...De ah¨ª a la de grado superior y a partir de este punto,a la Universidad.
Como se?alan expertos y administraciones, el cambio de tendencia es esperanzador, pero a¨²n es pronto para ver la calidad de todas estas medidas, ya que sin un esfuerzo extra todo se puede quedar en nada, en un simple amago por el susto colectivo que est¨¢ provocando la crisis. "Puede que en una situaci¨®n adversa la gente un d¨ªa tenga buena intenci¨®n y se ponga a estudiar, pero luego lo deje. En la educaci¨®n a distancia la tasa de abandono es m¨¢s alta que en la presencial", alerta el catedr¨¢tico valenciano Jos¨¦ Mar¨ªa Peir¨®.
Y advierte: "S¨®lo por estar m¨¢s tiempo en la escuela no est¨¢ garantizado el aumento de capital humano. El riesgo ser¨ªa que se fuera a la escuela como se aparca un coche en un garaje, habida cuenta de que no puede circular. Esto tiene efectos perversos, porque la gente que va a la escuela en esas condiciones rinde poco y aprende poco (los profesores han de hacer un sobresfuerzo para motivarles). Y, si a la desmotivaci¨®n se juntan problemas de disciplina y de comportamiento, se deteriora el clima educativo del aula y empeora el rendimiento del conjunto". En resumen, "si una vez empujamos a los j¨®venes a estar en la escuela, las familias, y las autoridades y la administraci¨®n no hacen nada m¨¢s, muy probablemente aumentar¨¢ el des¨¢nimo del profesorado", concluye Pier¨®.
Y a¨²n si se consigue efectivamente en los pr¨®ximos a?os aumentar en gran medida el nivel de formaci¨®n -el gran objetivo europeo para 2010, al que Espa?a previsiblemente no llegar¨¢, es que el 80% de la poblaci¨®n tenga al menos bachillerato o FP-, a¨²n queda otro escollo que salvar fuera del sistema educativo. El catedr¨¢tico de Econom¨ªa de la Universidad Pompeu Fabra Jos¨¦ Garc¨ªa Montalvo advierte de que el aumento de la formaci¨®n general de los j¨®venes podr¨ªa traer al principio m¨¢s sobrecualificaci¨®n, teniendo en cuenta que el mercado laboral espa?ol todav¨ªa no ofrece suficientes puestos cualificados y mucha gente acaba en un empleo por debajo de su formaci¨®n, lo que a su vez provoca gran frustraci¨®n.
Estas circunstancias, con suerte, se ir¨¢n poco a poco corrigiendo si de verdad hay un cambio de modelo econ¨®mico, a?ade.
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