Aprobado justo en n¨²mero de turistas
La temporada estival se cierra con una ocupaci¨®n hotelera del 80%, pero los ingresos que generan los visitantes caen el 5,7% en un a?o
Charles Baudelaire recurr¨ªa en sus ensayos a la figura de un hombre contemplativo: el flaneur. "Recorre la ciudad sin m¨¢s objetivo que la experiencia que de ello se deriva", escribe, en contraposici¨®n a quien cruza las calles con la mente puesta en su pr¨®xima parada. Lo que para el franc¨¦s decimon¨®nico era una opci¨®n filos¨®fica, para el turismo espa?ol es un lastre: el turista que aterriza en Espa?a es muy parecido a este flaneur. Disfruta de sus vacaciones como siempre, pero ya no consume. Se ahorra las entradas que pueda, las tiendas de souvenirs y las paradas cada dos horas en el bar de turno. Reduce gastos. En su lugar, goza horas y horas de la gratuidad de la v¨ªa p¨²blica.
Muchas reservas se hacen ahora tres o cuatro d¨ªas antes de iniciar el viaje
Los datos de afluencia tur¨ªstica en Espa?a durante el verano, tanto internacional como nacional, han mantenido niveles tolerables o, al menos, no tan malos como los esperados. Juan Molas, presidente de la Confederaci¨®n de Hoteleros y Alojamientos Tur¨ªsticos (CEHAT) calific¨® la semana pasada la temporada estival con un "aprobado muy justito". La ocupaci¨®n media en Espa?a se sit¨²a para los meses veraniegos en torno al 80%, seg¨²n unos datos que avanz¨® la patronal a espera del cierre de temporada, el 15 de septiembre. Adem¨¢s, la encuesta Frontur del Ministerio de Industria, que cifra la entrada de extranjeros al pa¨ªs, dice que en julio entraron apenas un 6,1% menos de turistas que en 2008.
Uno podr¨ªa pensar que son cifras impermeables a la crisis. Mantener el 80% de ocupaci¨®n en agosto implica que una buena mayor¨ªa de establecimientos han hecho lleno o casi lleno. No obstante, los datos de ocupaci¨®n resultan enga?osos, pues si aumenta el n¨²mero de plazas hoteleras puede ocurrir que, con los mismos turistas (o incluso m¨¢s), la ocupaci¨®n baje.
Molas pone de ejemplo a la Costa Blanca, C¨¢diz o Catalu?a como lugares en que la afluencia de veraneantes ha salvado el pellejo, en un a?o que iba a ser desastroso, con una ocupaci¨®n muy parecida a la de hace a?os.
"No son datos malos", dice Jos¨¦ Manuel Maci?eiras, presidente de la Asociaci¨®n Empresarial de Agencias de Viaje Espa?olas (AEDAVE). Pero pronto vislumbra el factor m¨¢s negativo: "La crisis est¨¢ en el precio". Explica que nunca se habr¨ªan mantenido esos ¨ªndices de ocupaci¨®n si los hoteleros no hubieran hecho un esfuerzo por ajustar precios.
El ¨ªndice de precios hoteleros del Instituto Nacional de Estad¨ªstica refleja estos esfuerzos. Catalu?a rebaj¨® sus tarifas un 8,8% respecto al mes anterior, Andaluc¨ªa, un 5,9% y la Comunidad Valenciana, un 5,6%.
Pero el sector es receloso a quedarse en esa operaci¨®n. "Las estad¨ªsticas de entrada de turistas y ocupaci¨®n no reflejan la realidad. Los turistas no han gastado este a?o", explica un empresario hotelero.
Aunque se trata de otro indicador, tambi¨¦n de Industria, la encuesta Egatur de julio dice que el gasto tur¨ªstico disminuy¨® un 6,6% respecto a julio de 2008. Y ese mes ya represent¨® una rebaja de 1,3 puntos respecto al de 2007. Se espera que la rebaja de agosto haya sido todav¨ªa mayor. Adem¨¢s, la estancia de los turistas es cada vez menor.
Nuria Monte, secretaria general de la patronal Hoteleros de Benidorm y Costa Blanca (Hosbec), tiene una valoraci¨®n positiva -la ocupaci¨®n se coloca en el 90,5%- pero lo atribuye a la promoci¨®n. Calcula que se ha traducido en 40 o 50 millones de euros para los empresarios de Benidorm. "La rentabilidad ha ca¨ªdo en torno al 10%", cuenta. "Y los ingresos son inferiores".
Para Monte y Maci?eiras, los turistas nacionales han cubierto las bajas extranjeras. Los principales mercados emisores -Reino Unido y Alemania- han venido en mucha menor medida, pero "si han faltado 25.000 ingleses, por ejemplo, podemos decir que han venido 30.000 espa?oles m¨¢s", explica Monte.
Los consultados coinciden en el cambio de h¨¢bitos de los turistas. "En mayo preve¨ªamos un desastre de temporada, pero las reservas vinieron despu¨¦s, cosa poco habitual", dice Nuria Monte.La buena reacci¨®n ha sido "poco menos que una sopresa".
Maci?eiras, como representante de las agencias de viaje, avala esta conclusi¨®n. Las reservas sol¨ªan hacerse con meses de antelaci¨®n. La decisi¨®n se sit¨²a ahora a tres o cuatro d¨ªas del viaje. "La gente tiene la percepci¨®n de que no hay prisa: con la crisis siempre habr¨¢ d¨ªas libres", cuenta. Por otro lado, la inestable situaci¨®n del mercado laboral conlleva que muchos no sepan d¨®nde van a estar -ni lo que podr¨¢n gastar- en dos o tres meses.
Un poco menos de turistas y muchos menos ingresos. ?Es s¨®lo la coyuntura? El sector lleva a?os hablando de un problema estructural. Espa?a, que depende del turismo como agua de mayo, acusa la competencia. Las costas del Adri¨¢tico y Latinoam¨¦rica se imponen. "Hay que abordar medidas ya", reclama Maci?eiras. La semana pasada, el sector se reuni¨® con Hacienda para pedir rebajas fiscales.
Habr¨¢ que esperar para valorar los resultados de la temporada estival, pero las previsiones del mayor lobby tur¨ªstico espa?ol, Exceltur, dan una idea. El tercer trimestre del a?o termina con una reducci¨®n del PIB tur¨ªstico del 5,7% y 70.000 empleos menos. Un verano marcado, como dice la asociaci¨®n, por "menos alegr¨ªas del gasto". Un verano lleno de flaneurs.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.