Opiniones contundentes en el ¨¢gora
Cuando le¨ª que eran 71 las personas imputadas en el caso G¨¹rtel de Madrid me vino a la memoria de inmediato una imagen soberbia de la pel¨ªcula que ahora va a estrenar Alejandro Amen¨¢bar, ?gora.
En ese filme, que es sobre el fin de las dudas y el principio de las certezas, cuando los cristianos arrasan el ¨¢gora donde se discut¨ªa y se estudiaba, para implantar all¨ª la ley de la fe, aparece un grupo numeros¨ªsimo de extras que le dan a la singular batalla el aire de una confrontaci¨®n multitudinaria, violenta, espectacular y escalofriante. Como si se acabara un mundo y se fundara otro.
Y pens¨¦ que con tanta gente implicada, si adem¨¢s le sumamos el G¨¹rtel de Valencia, se podr¨ªa hacer una escena parecida, un grupo numeros¨ªsimo de extras huyendo o atacando, protagonizando una escena ins¨®lita, a punto de crear un mundo nuevo, o, mejor dicho, un mundo rancio. ?Tantos implicados? ?C¨®mo pueden guardar un secreto tantos implicados? Ah¨ª hay m¨¢s gente que en Wally. Pero ?d¨®nde est¨¢ Wally? En Valencia, por ejemplo, ?qui¨¦n acompa?aba a Wally? Y en Madrid, ?qui¨¦n ocultaba a tanta gente como la que ha aflorado ahora?
La verdad es que ahora se explica uno por qu¨¦ ha puesto tanto ¨¦nfasis el PP (en Valencia, en Madrid) en decir que esto era un invento de EL PA?S y de la SER, es decir, de los medios del grupo Prisa. Dec¨ªan que era un invento porque no era un invento. Lo del invento era como uno de los macguffins (excusa argumental) que usaba Hitchcock y que le gusta citar a mi admirado Juan Cueto. Lanzaron desde el principio esa cortina de humo ("es un invento, son cuatro trajes"), les hicieron el coro los medios que ahora se rasgan las vestiduras, y la gente fue mirando hacia otra cosa; por ejemplo, hacia los medios que insist¨ªan.
Pero se les desbarat¨® el macguffin, apareci¨® la polic¨ªa y mand¨® a parar. Esto va en serio, debi¨® decir Rajoy, y el ¨¢gora se llen¨® de susto. Algo huele a podrido, dijeron todos. Y G¨¦nova pidi¨® decisiones "contundentes". Nabokov, el autor de Opiniones contundentes, estar¨ªa asombrado de saber qu¨¦ sentido de la contundencia tiene el partido de Rajoy.
Ahora he rebobinado lo que le dec¨ªa Ricardo Costa, a quien Dios guarde, a Ana Pastor en Los desayunos de TVE, cuando el escudero de Francisco Camps decidi¨® salir a la palestra para decir que ¨¦ramos unos manipuladores mentirosos. Y aparte de los gestos peculiares que Costa le hac¨ªa a Ana y a la c¨¢mara, me estuve fijando en lo que dec¨ªa de nosotros. Si ¨¦l rebobina ahora y lee de nuevo lo que dijo, seguro que se avergonzar¨¢ un poco. Tan s¨®lo un poco; pero se inventar¨¢ otro macguffin para que la gente mire hacia otro lado mientras ¨¦l reparte abrazos y muecas. Es un actor. En ?gora hubiera sido un extra impagable.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.