Ocho horas en 'S¨¢lvame'

"Halaaa", grita el p¨²blico. Una de las transexuales m¨¢s famosas de Espa?a, La Veneno, acaba de sacarse los pechos mientras hace algo parecido a bailar. Suena la m¨²sica de un politono y la se?ora que tengo al lado deja de roncar y dar cabezadas. Levanta la vista y alucina cuando el periodista y ex nieto pol¨ªtico de Franco Jimmy Gim¨¦nez-Arnau dice: "Veneno, ven, que yo te toco el tibur¨®n". La se?ora se parte de la risa.

Viernes 9 de octubre. Bienvenidos al circo m¨¢s punk de la televisi¨®n. Son las 2.30 y llevo ocho horas encerrado en el amplio plat¨® del programa de televisi¨®n S¨¢lvame, de Tele 5, en una nave a las afueras de Madrid. Mi misi¨®n: asistir como p¨²blico a S¨¢lvame diario (de 15.45 a 19.00) y a S¨¢lvame deluxe (viernes, de 21.45 a 2.30) y descubrir por qu¨¦ dos millones de personas han devuelto el liderazgo de audiencia a la cadena de Fuencarral. M¨¢s de 100 emisiones en antena. Con un 19,4% del share (2.080.000 espectadores), reinan en la franja de la tarde.

"Es una cena de Navidad con c¨¢maras. Tenemos lo mejor de lo peor" (Ra¨²l Prieto, codirector)

Durante estas horas he visto c¨®mo se acorralaba a una madre que "presuntamente" hab¨ªa abandonado a su hija, c¨®mo la cu?ada de Roc¨ªo Jurado trataba de vender una nave industrial a las afueras de Madrid y c¨®mo un presentador pide candidatos en directo para echar un polvo. Me he enterado tambi¨¦n de la talla que usa Mar¨ªa Teresa Campos y que una chica mon¨ªsima est¨¢ ("presuntamente" tambi¨¦n) saliendo con un famoso bailar¨ªn de flamenco. Nada de lo que he visto ni o¨ªdo hoy me interesa un pimiento. Entonces? ?por qu¨¦ me lo he pasado tan bien? ?Por qu¨¦ tengo la sensaci¨®n de no haber tirado mi tiempo a la basura, cuando seguramente s¨ª lo he hecho?

Tal vez una de las razones se llame Jorge Javier V¨¢zquez, catal¨¢n de 39 a?os, presentador y espina dorsal del programa, que mezcla dramatismo de bajura y diversi¨®n. Un maestro de ceremonias que es un g¨¦nero televisivo en s¨ª mismo. Criticado y amado a partes iguales, este hombre es un tit¨¢n. Hoy lleva ocho horas delante de una c¨¢mara sin perder la sonrisa. "Es el programa que siempre he deseado presentar", me explica durante una pausa publicitaria desde el mismo sill¨®n donde hace unos segundos se ha referido a Bel¨¦n Esteban, el gran activo del programa, como "la voz del pueblo". "Aqu¨ª puedo bajar unas escaleras, cantar, divertirme?".

Aunque la primera que me hace re¨ªr es Adelina, una se?ora de 82 a?os que se sienta a mi lado en las gradas de p¨²blico. Es de Luarca, un peque?o pueblo asturiano de 5.000 habitantes. Junto a 20 mujeres que forman la Asociaci¨®n de Mujeres Campesinas de Asturias, se ha levantado a las 7.30 para asistir gratis como p¨²blico a S¨¢lvame diario. A las 15.45, el programa est¨¢ a punto. "Tengo que tocarle el culo a Jorge Javier", me dice Adelina con sus ojos peque?os tras unas graduad¨ªsimas gafas. "Se lo he prometido a mi hija".

Suena una voz en off que anuncia al presentador y Adelina se lanza en plancha hacia Jorge Javier V¨¢zquez, que se deja magrear mientras se le escapa la risa floja. En otros programas, los de seguridad la tratar¨ªan como si fuese una terrorista. Aqu¨ª, Jorge Javier se la lleva frente a las c¨¢maras, le da un micr¨®fono y le regala cinco minutos de fama. Adelina vuelve a su asiento convertida en estrella. "Hay que re¨ªrse", me dice. "Yo tengo una hija paral¨ªtica y ya he llorado y sufrido demasiado. Este programa me encanta porque con las tonter¨ªas que hacen te r¨ªes much¨ªsimo".

?sa, supuestamente, es una de las claves que diferencia a S¨¢lvame de otros programas de cotilleos: el humor, la desdramatizaci¨®n de los asuntos del coraz¨®n. La excusa c¨®mica, sin embargo, no suaviza el linchamiento de personajes p¨²blicos, como en cualquier otro espect¨¢culo de moral discutible. Pero es la f¨®rmula de caos controlado la que lo ha convertido en un fen¨®meno. A diferencia de otros formatos aparentemente similares (T¨®mbola, DEC), aqu¨ª los colaboradores, invitados y p¨²blico pueden salir, entrar e improvisar en el plat¨®. En un extra?¨ªsimo e in¨¦dito ejercicio metatelevisivo, todos los micr¨®fonos permanecen siempre abiertos, todo queda convenientemente registrado y amplificado. El embrollo sonoro, apabullante a ratos, es fundamento en la receta. Los m¨®viles de los tertulianos tambi¨¦n est¨¢n encendidos. Y las c¨¢maras nunca dejan de grabar: lo que ocurre en intermedios, pasillos o camerinos se emite en Internet. Lo llaman S¨¢lvame pirata. El eslogan de Gran Hermano, La vida en directo, cobra aqu¨ª un inusitado sentido.

Llevo dos horas. Kiko Hern¨¢ndez, ex concursante de GH, y la madre de otra ex concursante, con la que por lo visto estuvo saliendo (dos d¨ªas, creo), se insultan, se gritan? Diez minutos despu¨¦s se reconcilian. Adelina sigue la gresca revolvi¨¦ndose en su asiento con la emoci¨®n de quien ve un Madrid-Bar?a.

Durante la primera pausa salgo del plat¨® para hablar con los directores del programa. "Empezamos como un programa sin pretensiones que comentaba lo ocurrido en [el reality] Supervivientes", explica Ra¨²l Prieto, de 33 a?os. "Pero esto se convirti¨® en una cena de Navidad con c¨¢maras. Y empez¨® a subir la audiencia. Aqu¨ª tenemos lo mejor de lo peor". "En el estudio se saltan las normas habituales de los plat¨®s de televisi¨®n. Es una anarqu¨ªa controlada", me cuenta la otra directora, Carlota Corredera, de 35 a?os, en el mismo lugar donde un periodista deportivo, ex novio de una actriz porno, protagoniz¨® un sonado altercado con Jimmy Gim¨¦nez-Arnau ante las c¨¢maras. Un contratiempo que ha exprimido el resto de la parrilla del canal. La endogamia elevada a categor¨ªa de culto religioso: no hace falta buscar la actualidad fuera porque ¨¦sta reside en el mismo programa. La prueba: Bel¨¦n Esteban. ?Hay algo mejor que tener a la protagonista de la noticia en n¨®mina?

S¨¢lvame deluxe tiene un tono m¨¢s serio. Hoy, Violeta Santander vuelve a hablar de su novio, el tipo que presuntamente golpe¨® al profesor Neira. Desconecto un rato y hablo con Josep Tom¨¢s, de 41 a?os, uno de los directores de la edici¨®n nocturna. "Aqu¨ª se pasa de la risa al llanto en un segundo. Es una vuelta de tuerca al genero del coraz¨®n. Por primera vez se hace humor desde dentro. Los propios periodistas hacen parodia de ellos mismos, aunque a algunos les ha costado aceptar el papel".

A las 2.30, un beso de La Veneno a la c¨¢mara despide la emisi¨®n. Jorge Javier sale disparado del plat¨® y no tarda en irse a casa. "Pero no descanso hasta las 9.00, cuando nos llegan las audiencias del programa", me dice.

El s¨¢bado no tuvo un buen despertar. DEC, su competidor m¨¢s directo, que se emite en Antena 3, llev¨® el viernes como invitada a Carmen Mart¨ªnez Bordi¨², nieta de Franco y bailarina amateur. S¨¢lvame hizo s¨®lo un 14% de share (1.571.000 espectadores). ?Habr¨¢ sido mi culpa? "A veces, una pel¨ªcula buena o familiar [el viernes, La 1 program¨® Herbie, a tope] puede ser una competencia m¨¢s dura que DEC. Nosotros estamos contentos con lo que hemos hecho. Eso es lo importante", explica Josep Tom¨¢s. Una hora despu¨¦s trato de dormir. No puedo. Tengo a La Veneno grabada en la retina.