P¨²blico y privado

Pareci¨®, oyendo en la radio la intervenci¨®n de Zapatero ante los representantes de las empresas norteamericanas en Espa?a, que su tono era m¨¢s realista y con m¨¢s incertidumbres que el que horas antes hab¨ªan empleado la vicepresidenta econ¨®mica, Salgado, y el jefe de los parlamentarios socialistas, Alonso, en el debate sobre los Presupuestos de 2010.

No se puede asegurar que hubiese contradicciones, porque en cuesti¨®n de tonos los matices est¨¢n a veces en los o¨ªdos de quien escucha y no en quien los protagoniza. Dijo ZP: "Ni la recuperaci¨®n est¨¢ asegurada ni, menos a¨²n, su velocidad, especialmente si pensamos en la velocidad suficiente para crear empleo". Nada nuevo, y sin embargo se entendi¨® que lo dijo de otro modo. Salgado y Alonso insistieron en aquello de lo que se estaba saliendo; Zapatero, en lo que faltaba por llegar.

Los lugares con menores tasas de pobreza son Navarra y el Pa¨ªs Vasco, justo los que tienen un sistema de concierto

Quiz¨¢ porque al mismo tiempo que se discut¨ªan las cuentas p¨²blicas aparec¨ªa la Encuesta de Condiciones de Vida (ECV) del Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE). Esta ECV se realiz¨® entre abril y julio de 2008, es decir, antes de que la econom¨ªa espa?ola entrase en el trimestre del infierno (enero-marzo de 2009), que fue cuando probablemente se toc¨® el fondo del pozo. Cuando se elabor¨® la encuesta, el 26,2% de los consultados pensaba que en los pr¨®ximos 12 meses la situaci¨®n econ¨®mica de su hogar empeorar¨ªa.

Algunos de los datos de la ECV son muy relevantes para establecer una cartograf¨ªa de la sociedad espa?ola, en los momentos de la primera fase de la Gran Recesi¨®n: el porcentaje de personas que se encuentra por debajo del umbral relativo de pobreza en Espa?a es del 19,6%; las comunidades aut¨®nomas con mayores tasas de riesgo de pobreza son Extremadura (38,4%) y Andaluc¨ªa (28,9%), mientras que las que cuentan con los menores porcentajes son Navarra (6,5%) y Pa¨ªs Vasco (8,5%), justo quienes se rigen por el sistema de concierto en su relaci¨®n con la Hacienda. Uno de cada tres hogares no puede ir de vacaciones fuera de casa ni siquiera una semana al a?o, y tres de cada 10 considera que no tiene capacidad para hacer frente a gastos imprevistos.

Es muy sugerente ir estableciendo analog¨ªas entre las grandes cifras de los Presupuestos del Estado y la percepci¨®n que los ciudadanos tienen de sus cuentas privadas y de sus propios presupuestos familiares. Mientras las primeras denotan un desplome de la recaudaci¨®n y el crecimiento espectacular del coste de la deuda p¨²blica y el desempleo, los de las familias expresan su deuda privada (el 32% de los hogares ten¨ªan pagos pendientes de pr¨¦stamos para la compra de su vivienda principal) y los retrasos de los pagos: m¨¢s del 5% de los hogares tuvieron retrasos a la hora de abonar gastos de hipoteca o alquiler, recibos de gas, comunidad, electricidad, etc¨¦tera.

Asimismo, tendr¨¢ mucho inter¨¦s comparar en su momento esta encuesta con la del a?o siguiente, para establecer con rigor las secuelas de la crisis.