La doctrina Ur¨ªa se abre paso
Desde 1982, ning¨²n diputado del PNV se ha visto obligado a votar en contra de su conciencia en asuntos como el aborto. Desde entonces, los nacionalistas vascos siempre han permitido a sus parlamentarios que votaran en conciencia y les ha dado libertad de voto.
La diferencia ahora es que el PNV ha decidido votar en bloque a favor de la tramitaci¨®n del proyecto de ley del aborto, es decir, a favor de que se modifique la actual legislaci¨®n. No habr¨¢ libertad de voto, ni voto en conciencia.
En la legislatura pasada, los diputados del PNV tuvieron libertad de voto sobre la ley de matrimonio homosexual. Vot¨® a favor Margarita Ur¨ªa y otros, como Emilio Olabarr¨ªa y Pedro Azpiazu, no asistieron a la votaci¨®n.
Ur¨ªa, ahora vocal del Consejo General del Poder Judicial, ha trabajado activamente para que el PNV modifique su posici¨®n sobre el aborto. En el Consejo, Ur¨ªa elabor¨® un informe que, finalmente, no pudo ser aprobado en el Pleno, porque el presidente, Carlos D¨ªvar, antepuso sus convicciones religiosas e impidi¨® que saliera adelante.
El informe de Ur¨ªa es el que ha servido de base para que la direcci¨®n del PNV fije ahora su posici¨®n ante el debate del aborto. La incorporaci¨®n de los nacionalistas vascos a la mayor¨ªa favorable a la reforma de la ley supone quebrar el argumento del PP de que no hay consenso social y pol¨ªtico, porque suma muchos m¨¢s votos de los precisos como ley org¨¢nica. S¨®lo el PP votar¨¢ en bloque en contra.
El documento del PNV supone, adem¨¢s, un giro importante porque justifica la ley de plazos y defiende el aborto como un derecho, tal y como sostiene el proyecto de ley del Gobierno.
El grupo parlamentario del PNV presentar¨¢ entre siete y diez enmiendas agrupadas en tres bloques. Uno para que se regule la objeci¨®n de conciencia con el objeto de que, tal y como sostienen tambi¨¦n los grupos minoritarios de la izquierda, se garantice que es un derecho individual. Es decir, que todos los centros sanitarios atiendan a las mujeres, aunque su personal se haya acogido individualmente a la objeci¨®n de conciencia.
Otro bloque ser¨¢ para garantizar que no hay invasi¨®n de competencias auton¨®micas sobre sanidad. Y el ¨²ltimo, en l¨ªnea con el informe de Margarita Ur¨ªa, se refiere a la capacidad de las mujeres de entre 16 y 18 a?os. El PNV rechaza que sea necesario el permiso de los padres y respecto a la informaci¨®n propondr¨¢ una soluci¨®n intermedia, seg¨²n la cual, el personal sanitario podr¨¢ mantener la confidencialidad cuando la mujer se niegue a informar a sus padres por antecedentes de malos tratos, violaciones o conflicto familiar.
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