La Iglesia presiona al PNV para que retire su apoyo a la ley del aborto
El obispado de Bilbao reclama al viejo partido democristiano que "recapacite"
La Iglesia cat¨®lica quiso ayer hurgar en las supuestas heridas del PNV a cuenta de su anunciado apoyo a la ley del aborto que prepara el Gobierno. El obispo auxiliar de Bilbao, Mario Iceta, sali¨® ayer a la palestra para pedir a la formaci¨®n nacionalista que "recapacite" una posici¨®n que, seg¨²n argument¨®, no se inclu¨ªa en el programa electoral y ha provocado un profundo malestar entre "mucha gente" e incluso "algunos mandatarios" con el que ¨¦l mismo habr¨ªa consultado. La decisi¨®n del PNV, sin embargo, se adopt¨® por unanimidad, tanto en la direcci¨®n (EBB) como en la Asamblea Nacional. En la misma el partido manifiesta su acuerdo con una ley de plazos que permita el aborto libre hasta las 14 semanas, o 22 en caso de riesgos o malformaci¨®n.
La renovaci¨®n generacional en el partido explica el cambio de rumbo
La posici¨®n ha provocado preocupaci¨®n entre una parte de sus bases m¨¢s veteranas. Aunque supeditado a la aprobaci¨®n de una decena de enmiendas parciales, el pronunciamiento choca a priori con el ideal humanista y cristiano que tradicionalmente ha guiado la acci¨®n del partido. En declaraciones a Radio Euskadi, tras leer el documento elaborado al respecto por la ejecutiva jeltzale, el obispo auxiliar censur¨® que el PNV sustente su apoyo a la modificaci¨®n de la ley bajo la premisa de que "el aborto es una realidad socialmente aceptada", una actitud que "contrasta llamativamente" con su ideolog¨ªa fundacional y que "no responde", en su opini¨®n, "a lo que muchos de sus votantes piensan". Ni siquiera a lo que opinan algunos mandatarios. El senador I?aki Anasagasti manifest¨® el lunes su disconformidad con el hecho de que la reforma faculte a abortar a las j¨®venes de 16 y 17 a?os sin que est¨¦n informados sus padres. Seg¨²n declar¨®, es "una aut¨¦ntica barbaridad" que espera corregir con la enmienda parcial de su partido encaminada a "comunicar" el caso a la familia.
Salvo cr¨ªticas aisladas, el respaldo a la reforma legal propuesta por el PSOE se aprob¨® sin mayores aspavientos. Mero s¨ªntoma de un partido que abandon¨® su car¨¢cter confesional en 1977 y que ha sabido interiorizar el cambio de valores que ha experimentado la sociedad vasca en las dos ¨²ltimas d¨¦cadas. Su inicial orientaci¨®n democristiana se ha evaporado con el tiempo en favor de unos ideales m¨¢s cercanos al socialismo liberal. Una formaci¨®n laica y humanista, como suele autodefinirse, "a la que ninguna cuesti¨®n humana le es ajena".
El relevo generacional y la incorporaci¨®n de mujeres a los altos cargos se antojan como las principales causas de la evoluci¨®n protagonizada por el PNV desde los a?os noventa. "No hay que olvidar que la direcci¨®n la conforman en la actualidad personas de entre 40 y 50 a?os", explica el soci¨®logo y polit¨®logo Ander Gurrutxaga, para quien "nada tienen que ver" las figuras actuales con las de pasadas d¨¦cadas. "Las periferias discordantes se han ido quedando en el camino", asegura. Una idea que comparte la ex diputada peneuvista y actual vocal del Consejo General del Poder Judicial Margarita Uria. "El posicionamiento del partido va en consonancia con la mayor¨ªa de la sociedad. Y luego all¨¢ cada uno con las creencias que tenga en casa".
En efecto, no hay que remontarse demasiado en el tiempo para recordar el apoyo al matrimonio homosexual en el Congreso la pasada legislatura. Tampoco hay que mirar muy atr¨¢s para analizar las pol¨ªticas de empleo, asistencia social o atenci¨®n a la inmigraci¨®n que hasta el pasado mayo impuls¨® la formaci¨®n nacionalista desde el Gobierno vasco. Unas iniciativas que incluso se pueden tachar de "progresistas" en muchos casos y que han facilitarodo la convivencia jeltzale en el Ejecutivo auton¨®mico junto a distintos partidos de izquierda.
Con la excepci¨®n del primer mandato de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, en cambio, la principal fuerza nacionalista del Pa¨ªs Vasco nunca ha sintonizado de igual modo con el PP, un partido tradicionalista y m¨¢s cercano, en principio, en lo que a ideolog¨ªa respecta. La fricci¨®n entre ambas formaciones, que militaban unidas en la Internacional Dem¨®crata Cristiana, lleg¨® al culmen en el a?o 2000, cuando los populares forzaron la expulsi¨®n jeltzale de la coalici¨®n por sus contactos con ETA. El PNV no dud¨® entonces en denunciar el giro conservadurista de la IDC (hoy Partido Popular Europeo), un pronunciamiento que confirm¨® su alejamiento de la derecha. Hoy milita en el Partido Dem¨®crata Europeo, junto a grupos centristas, como La Margarita, en Italia, o la UDF del franc¨¦s Fran?ois Boyrou.
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