La banda sonora de Grafton Street
M¨²sicos callejeros en la calle que sirvi¨® de escenario a la pel¨ªcula 'Once'. El genio de Francis Bacon y los secretos de la cerveza Guinness. Escapada a Dubl¨ªn, a su noche agitada y a la zona de Temple Bar
Desde el odiseico retrato de James Joyce hasta el reciente s¨ª al Tratado de Lisboa, Irlanda ha buscado una identidad propia en el caprichoso mapa econ¨®mico europeo. La ¨²nica certeza en estos tiempos dif¨ªciles es el car¨¢cter afable de sus gentes. Dubl¨ªn es una capital abierta y accesible que se ha convertido en un destino prioritario para el turista espa?ol gracias a los barat¨ªsimos vuelos ofertados por Ryanair (www.ryanair.com; ida y vuelta desde Madrid, a partir de 68 euros). Este trayecto quiz¨¢ difiera del realizado hace ya m¨¢s de un siglo por Leopold Bloom y Stephen Dedalus, protagonistas del Ulises de Joyce, pero denota el invariable encanto que inunda las dos orillas del Liffey.
9.00 Sonidos callejeros
Si el tiempo lo permite, la capital ofrece un excelente caudal intelectual que transpira m¨¢s all¨¢ de los muros de sus instituciones culturales. La b¨¢sica es el Trinity College (1) (College Green), la universidad m¨¢s antigua de Irlanda. Su antigua biblioteca alberga el Libro de Kells, un manuscrito religioso medieval que data del a?o 800. Mucho antes de servir como escenario para Harry Potter y el prisionero de Azkaban, Oscar Wilde, Joyce y George Bernard Shaw pre?aron sus escritos con hallazgos hechos en este magn¨ªfico basti¨®n cultural.
A un paso de sus jardines, Grafton Street (2), una bulliciosa peatonal que se asom¨® al mundo gracias a la pel¨ªcula Once (de John Carney, 2006): un reflejo del talento de los m¨²sicos locales que inundan cotidianamente la calle y han acabado por convertirse en un reclamo tur¨ªstico tan v¨¢lido como sus tiendas de lujo. De visita obligada, Powerscourt Townhouse (3) (59, South William Street; www.powerscourtcentre.com), una mansi¨®n del siglo XVIII reconvertida en centro comercial donde se entremezclan shoppings, caf¨¦s y actividades culturales.
11.00 El verde tambi¨¦n es arte
Tras tomar un refrigerio en Grogan's (4) (15, South William Street), el pub de referencia para los escritores y artistas locales, un paseo por el parque St Stephen's Green (5) una prueba de la maestr¨ªa jardinera de un pa¨ªs dominado por el verde. Muy cerca, la casa el verde. Muy cerca, la casa de Oscar Wilde (6) (Merrion Square, 1), un ejemplo de arquitectura georgiana, y la estatua dedicada al escritor en el jard¨ªn de enfrente. En la propia Merrion Square West est¨¢ la National Gallery of Ireland (7) (www.nationalgallery.ie), con su excepcional colecci¨®n de pintura barroca italiana y de la Edad de Oro holandesa. La entrada es gratis.
13.00 La espuma de los d¨ªas
Se puede almorzar en un cl¨¢sico, el Bewleys Caf¨¦ (8) (Grafton Street, 78/79), o en un lounge moderno, el Odessa (9) (13-14, Dame Court; www.odessa.ie). Y de ah¨ª, a descubrir los secretos que destila Guinness, una marca de cerveza convertida en la insignia de toda una naci¨®n que este a?o celebra los fastos de su 250? aniversario. En el interior de la Guinness Storehouse (10) (Saint James's Gate Brewery; 00353 1 408 48 00; www.guinness-storehouse.com; 13,50 euros) el visitante puede descubrir la elaboraci¨®n y la historia de la m¨ªtica negra disfrutando de enaltecedoras pintas a lo largo de un recorrido que culmina en el Gravity Bar, con su excepcional panor¨¢mica de toda la ciudad.
Al oeste, el antiguo Royal Hospital (modelado a imagen de Los Inv¨¢lidos, de Par¨ªs) alberga el Irish Museum of Modern Art (11) (Military Road, Kilmainham; www.imma.ie; de martes a s¨¢bado, de 10.00 a 17.30, domingos, de 12.00 a 17.30; entrada gratuita). Dirigido por el mallorqu¨ªn Enrique Juncosa desde 2003, se ha convertido en todo un faro del arte actual que, adem¨¢s, apoya a los j¨®venes artistas locales.
16.00 El otro lado
?Se atreve a cruzar el r¨ªo Liffey? El salto tiene su recompensa. Desde el IMMA, atravesando, por ejemplo, el puente de James Joyce (12) de Santiago Calatrava, se encuentra el inagotable Phoenix Park, uno de los parques urbanos m¨¢s grandes de Europa, donde se pueden avistar ciervos salvajes con facilidad (que es a¨²n mejor que una visita a su zoo).
Est¨¢ junto a Stoneybatter (13), uno de los barrios en auge. Su estructura de casitas unifamiliares de dos plantas no impide que se est¨¦ gestando una peque?a revoluci¨®n cultural en sus callejuelas. Los alquileres relativamente bajos atraen aqu¨ª a j¨®venes creadores (cineastas, m¨²sicos, artistas digitales) que se congregan en torno a la Joinery Art Gallery (14) (Rosemount Terrace, 6; Arbour Hill; www.thejoinery.org). Algunos de sus puntos de reuni¨®n son la Liliput Store (Rosemount Terrace, 6), un deli con exquisitas recetas vegetarianas; Plan B (Manor Place, 56, Stoneybatter), un diminuto italiano con pastas hechas a mano, y Walshes (Stoneybatter, 6), el pub local.
18.00 La guarida del artista
De regreso al centro, por la orilla izquierda, cada puente luce una identidad distintiva. Girando por Capel Street entramos en Henry Street, la otra gran peatonal comercial de la ciudad, tambi¨¦n poblada por m¨²sicos callejeros y pasacalles. Sus callecitas laterales descubren puestos de flores y frutas que nos llevan hasta la Hugh Lane Municipal Gallery (15) (Charlemont House, Parnell Square North). En ella, el arquitecto David Chipperfield ha encajado la exacta reproducci¨®n, con cientos de elementos originales, del ca¨®tico estudio londinense de Francis Bacon -que naci¨® en Dubl¨ªn en 1909-. El James Joyce Centre (16) (35, North Great Georges Street) queda a un paso.
19.30 Devotos al templo
Bajando por O'Connell Street cruzamos de nuevo el r¨ªo para sumergirnos en Temple Bar (17), un SoHo bullicioso. El pub que bautiza el barrio, The Temple Bar (47-48, Temple Bar), fundado en 1840, representa esta religi¨®n con m¨¢s de 450 variedades de whisky y actuaciones de m¨²sica tradicional. Una escena que se repite a cada paso. No todo es birra. En City Discs (Unit 2, Temple Bar Lane South; www.citydiscs.ie) se cultiva el culto al vinilo y al CD. Y en el Irish Film Institute (6, Eustace Street; www.irishfilm.ie) se organizan ciclos de cine, coloquios, cursos... Una pasada por su Meeting Square Market, donde venden desde cr¨ºpes hasta quesos, despierta los sentidos. Pero para aplacarlos de verdad hay que cenar en Gruel (68, Dame Street). Su carta, sencilla y barata, mezcla sin complejos sabores del mundo.
22.00 No todo es caf¨¦ irland¨¦s
Dubl¨ªn es tan manejable que permite el callejeo nocturno. En Whelan's (18) (25, Wexford Street; www.whelanslive.com) act¨²an celebridades en peque?o formato. Quien se atreva a descubrir la noche gay hortera, no puede faltar en The George (South Great George's Street). Quien prefiera lo gay moderno tiene Pantibar (19) (7-8 Capel Street; www.pantibar.com). Los amantes del billar encuentran refugio en Camden Palace (17, Watford Street).
En The Village (26, Wexford Street) alternan noches de rock con electr¨®nica. Al otro lado, en Stoneybatter, Dice Bar (20) (78, Queen Street), ambiente oscuro para la bohemia outsider. Y la noche se entrega al techno en Sugar Club (8, Lesson Street), The Button Factory (www.buttonfactory.ie), The Ambassador (Parnell Square W) y Tripod (39, Lower Leeson Street); hasta llegar al popular Copperface Jack's 21 (29, Harcourt Street), donde la noche se confunde con el d¨ªa.
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