Un cristiano en pecado mortal

El portavoz de la Conferencia Episcopal, Juan A. Mart¨ªnez Camino, con las declaraciones efectuadas el pasado d¨ªa 12 de noviembre y publicadas en EL PA?S en relaci¨®n a la ley del aborto parece querer llevarnos a siglos atr¨¢s, cuando imperaba la Santa Inquisici¨®n y a los herejes les esperaba la hoguera.

A lo largo del siglo XX no fueron tan tajantes con los poderosos, como con el Holocausto nazi, cuando el papa P¨ªo XII miraba para otro lado, o con los fusilamientos del franquismo, que justificaban, pues sal¨ªan bajo palio con el dictador. Vienen ahora a ensa?arse con el dolor de las mujeres que, aunque sea dentro de la ley, para ellas debe de ser muy traum¨¢tico abortar.

Me considero cristiano y soy votante de la izquierda, por lo tanto apoyo esta ley que est¨¢ tramitando el Gobierno, y seg¨²n el criterio de la Conferencia Episcopal estoy en pecado mortal y excomulgado, pero quiero decirle que mis faltas las tramito directamente con Jesucristo, pues intermediarios como ustedes no me sirven para nada, mi filosof¨ªa es amar y ayudar al pr¨®jimo y -como es el caso- dentro de las leyes que salen del Parlamento.

Y qu¨¦ decir de los avances de la ciencia en la investigaci¨®n con c¨¦lulas madre o selecci¨®n embrionaria que ustedes rechazan. ?Se creen que Dios estar¨ªa en contra de curar las enfermedades de nuestros hermanos.