Dos semanas entre la vida y la pol¨ªtica
El drama lleg¨® al buque tras el desembarco de tres secuestrados el pasado d¨ªa 5 - La Audiencia y el Gobierno se enzarzaron a cuenta de los dos piratas detenidos
El atunero vasco Alakrana y los 36 miembros de su tripulaci¨®n -16 de ellos, espa?oles- recuperaron la libertad a las 14.25 de ayer, tras 47 d¨ªas secuestrados por piratas somal¨ªes. El 5 de noviembre, mientras todos esperaban la liberaci¨®n tras un acuerdo sobre el pago del rescate, la situaci¨®n gir¨® hacia el drama cuando los secuestradores decidieron bajar a tres de los tripulantes a tierra y los secuestrados, presionados, difundieron mensajes ag¨®nicos pidiendo soluciones de emergencia para conseguir la liberaci¨®n.
Lo que sigue es el relato cronol¨®gico de las dos semanas de v¨¦rtigo entre la vida y la pol¨ªtica que desembocaron en final feliz.
- SOS (8 de noviembre). El patr¨®n del Alakrana, Ricardo Blach (59 a?os), lanzaba un mensaje de socorro en sus conversaciones telef¨®nicas con periodistas. "Me han puesto una pistola en la frente. Tememos por nuestras vidas. Ellos est¨¢n nerviosos, agresivos, y nosotros, muy mal, cada vez peor. Nos estamos apagando", relat¨® a EL PA?S. "El jefe de los piratas lleva cuatro d¨ªas aqu¨ª y no para de hacernos putadas. Nos escupen, nos dan patadas... Est¨¢n armados hasta los dientes y nos tienen enca?onados".
El patr¨®n pidi¨® auxilio hace 10 d¨ªas: "Me han puesto una pistola en la frente"
El espionaje militar hab¨ªa desaconsejado la captura de los dos somal¨ªes
Tras su lamento, Blach explic¨® las condiciones de los piratas para poner fin al secuestro: "O liberan a los dos [piratas] que hay en Espa?a o no s¨¦ qu¨¦ va a pasar. Quieren dinero y a esos t¨ªos. Desde el primer d¨ªa".
- El Gobierno se mueve (9 de noviembre). El Gobierno reacciona a los mensajes que lanzan los secuestrados desde el barco y asegura que trabaja "intensamente" para cerrar un acuerdo con Somalia que permita entregar a este pa¨ªs a los dos piratas encarcelados en Espa?a y cumplir con una de las exigencias de los secuestradores.
El ministro de Justicia, Francisco Caama?o, mantiene entonces que los dos piratas ten¨ªan que ser juzgados pero dejaba abierta la puerta a la posibilidad de que el juicio se celebrara en Somalia, algo que el tiempo acab¨® descartando. El problema, entonces y ahora, es que Espa?a ten¨ªa y tiene suspendidas las relaciones con Somalia desde que dicho pa¨ªs se sumiera en la guerra civil, en 1991.
En el atunero vasco, el patr¨®n respiraba aliviado por las noticias que llegaban respecto a los movimientos del Gobierno espa?ol para resolver el problema de los dos piratas detenidos. "En el barco son todo risas y pulgares hacia arriba. Los piratas est¨¢n euf¨®ricos y han dejado de maltratarnos", dec¨ªa. Aunque despu¨¦s manifestaba su desaz¨®n: "Tengo miedo a que toda esta euforia se vuelva contra nosotros si ma?ana la Audiencia Nacional nos da un rev¨¦s y esto se retrasa. Si pasa eso, ya no se van a andar con tonter¨ªas, empezar¨¢n a matarnos". Ese d¨ªa, Blanc avanz¨® una fecha para la soluci¨®n al secuestro que result¨® certera: "He hablado con el mediador y le he preguntado cu¨¢nto tiempo m¨¢s puede durar esto y me ha dicho que entre cuatro y diez d¨ªas, pero tambi¨¦n me ha dicho que a¨²n no se han puesto de acuerdo en el dinero del rescate".
- Silencio para negociar. (10 de noviembre). El presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, y el de la Audiencia Nacional, ?ngel Juanes, reciben a los familiares de los secuestrados y les piden silencio. Unos d¨ªas antes, las familias hab¨ªan estallado y responsabilizado al Ejecutivo de poner en peligro la vida de sus familiares con la mala gesti¨®n de la crisis. Cristina Blach, hija del patr¨®n del Alakrana, y Argi Galbarriatu, hermana del capit¨¢n, aceptan el ruego de Zapatero y de Juanes. A la vez, la oposici¨®n, especialmente el PP, modera sus cr¨ªticas al Gobierno. El ruido, seg¨²n la teor¨ªa del presidente, s¨®lo favorece a los secuestradores.
La justicia sigue trabajando. El abogado de uno de los detenidos intenta colar una soluci¨®n para lograr que su cliente sea expulsado de Espa?a mediante la aplicaci¨®n del art¨ªculo 57 de la Ley de Extranjer¨ªa. Si la fiscal¨ªa pide una pena menor de seis a?os, se puede tramitar la expulsi¨®n de Espa?a del detenido. La Fiscal¨ªa mantiene la prudencia y contesta al letrado que, de momento, no va a tomar ninguna iniciativa.
- ?C¨¢rcel en Somalia? (11 de noviembre). El Gobierno se mueve y sugiere que una soluci¨®n para los dos piratas detenidos ser¨ªa que cumpliesen su condena, la que sea, en Somalia. La ministra de Defensa, Carme Chac¨®n, apuesta por esta v¨ªa aunque sin detallar el camino para alcanzar el objetivo. Se tratar¨ªa, seg¨²n precisaron fuentes del Ejecutivo, de suscribir con el Gobierno Federal de Transici¨®n de Somalia un acuerdo de cumplimiento de penas, a trav¨¦s de un canje de notas, que entrar¨ªa en vigor de inmediato. Aun as¨ª, el traslado s¨®lo podr¨ªa ejecutarse una vez celebrado el juicio y con sentencia firme.
- Conflicto entre el Gobierno y con los jueces (12 de noviembre). La Audiencia Nacional entra en escena con una nota ins¨®lita donde culpa al Gobierno del traslado de los piratas detenidos a Espa?a.
El comunicado sostiene que "ning¨²n juez de la Audiencia Nacional ha reclamado para s¨ª la competencia del caso ni exigi¨® que se presentara denuncia alguna". Los piratas que mantienen secuestrados a los 36 miembros de la tripulaci¨®n del Alakrana reclaman la devoluci¨®n de sus compa?eros para liberar a los rehenes. Al conflicto con la Audiencia se une otro desatado en el propio Gobierno. Los ministros se enzarzan en disputas respecto a la decisi¨®n estrat¨¦gica de detener a los dos piratas y trasladarlos a Espa?a.
La Cadena Ser hace p¨²blico un informe del Centro de Inteligencia de las Fuerzas Armadas (CIFAS), elaborado 10 horas antes de la detenci¨®n de los dos piratas implicados en el secuestro del Alakrana y ahora encarcelados en Espa?a, en el que desaconsejaba su captura, alegando que podr¨ªa elevar la tensi¨®n, perjudicar la negociaci¨®n e incluso provocar represalias.
El Ministerio de Defensa difundi¨® una nota en la que aseguraba que el general Julio Rodr¨ªguez (Jemad), "a la luz de los diversos informes que ten¨ªa en su haber, orden¨® a la fragata Canarias
proceder a detener a los piratas en flagrante delito de pirater¨ªa". Seg¨²n la nota, esta decisi¨®n fue asumida por unanimidad de la comisi¨®n de coordinaci¨®n, integrada por la vicepresidenta Fern¨¢ndez de la Vega, los ministros de Asuntos Exteriores, Defensa y Medio Ambiente; y el director del CNI.
- La Audiencia acelera (16 de noviembre de 2009). La Fiscal¨ªa de la Audiencia Nacional acelera el proceso abierto a los dos piratas detenidos en Espa?a que bloquean la soluci¨®n al secuestro del Alakrana en Somalia. El juez Santiago Pedraz, que instruye el caso, recibe un escrito del fiscal donde le pide que concluya cuanto antes las investigaciones para poder juzgar a los dos piratas detenidos en Espa?a por el secuestro del atunero Alakrana.
En el escrito se solicita que transforme las diligencias en sumario porque las penas de c¨¢rcel que va a solicitar superan los nueve a?os. La fiscal¨ªa estudia pedir seis a?os por cada uno de los 36 delitos de detenci¨®n ilegal y cuatro m¨¢s por robo y uso de armas. En total 220 a?os para cada uno. El fiscal pide tambi¨¦n al juez que concluya la investigaci¨®n y eleve el caso a la Sala de lo Penal para que pueda iniciarse cuanto antes el juicio.
- Entre el reparto del bot¨ªn y el juicio. (17 de noviembre). A la vez que los secuestradores se reparten el bot¨ªn en la cubierta del atunero vasco Alakrana, en la Audiencia Nacional el juez Santiago Pedraz concluye la instrucci¨®n -probablemente la m¨¢s r¨¢pida para un caso con este tipo de delitos de toda la historia judicial espa?ola- y eleva el sumario a la Sala de lo Penal, que decidir¨¢ en los pr¨®ximos d¨ªas la fecha del juicio. Con la tripulaci¨®n del Alakrana liberada tras el pago de 2,7 millones de euros, todav¨ªa queda una inc¨®gnita por resolver: el futuro de los dos piratas encarcelados en Espa?a.
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