La excelencia resultadista de un l¨ªder
Cinco meses y 252 millones despu¨¦s, el Madrid no ha definido su estilo, aunque firma su mejor arranque liguero desde 1992
—?Por qu¨¦ el Madrid no ha sido capaz todav¨ªa de hacer un partido redondo?
—"Depende de lo que entend¨¢is por redondo. Ganamos 5-0 al Xerez, 3-0 al Tenerife, 2-3 al Atl¨¦tico... Ganamos en campos como el del Espanyol o en El Madrigal. A veces se critica de una forma ficticia. ?En qu¨¦ nos fijamos para decir si un partido es redondo? ?En la fluidez del juego? Pues el nuestro es m¨¢s directo, por las caracter¨ªsticas de nuestros jugadores. Las cr¨ªticas a veces son ficticias. Las cifras, los goles y los triunfos avalan lo que estamos haciendo".
Manuel Pellegrini dice que siempre se mira m¨¢s lo negativo (los ¨²ltimos diez minutos en el Calder¨®n, por ejemplo) que lo positivo (los primeros 80 minutos en el Calder¨®n). De hecho, se incomoda cada vez que le preguntan por el juego del equipo: muchas veces pobre, intermitente e irregular. ?l tira de cifras para defender su trabajo. Y las cifras dicen que va l¨ªder, que es el equipo menos goleado junto al Bar?a y al Sevilla, y que no ten¨ªa semejante arranque liguero desde la temporada 1991-92.
"Las cifras, los goles y los triunfos avalan lo que hacemos", sostiene Pellegrini
Con Juande Ramos el equipo tambi¨¦n bati¨® r¨¦cords del mism¨ªsimo Miguel Mu?oz
Las cifras, sin embargo, no dicen que el equipo fue apeado de la Copa y ridiculizado por un Segunda B. Que cinco meses y 252 millones despu¨¦s (el dinero que ha gastado en fichajes Florentino P¨¦rez), el p¨²blico del Bernab¨¦u sigue y¨¦ndose del estadio sin saber muy bien a lo que juega el Madrid. "El problema es que se toma al Barcelona como modelo de comparaci¨®n. Pero nosotros ni somos el Bar?a ni pretendemos jugar como ellos. A lo mejor nos est¨¢ faltando hacer 90 minutos completos. Buscamos una mayor regularidad, ojal¨¢ la encontremos", se defiende el chileno.
A estas alturas de la temporada ya se hab¨ªan acabado los cien d¨ªas de margen que pidi¨® Fabio Capello cuando aterriz¨® en julio de 2006. El Madrid no jugaba a nada y el t¨¦cnico italiano gan¨® la Liga tirando de esp¨ªritu y garra. Bernd Schuster no pidi¨® margen. Lleg¨® diciendo que si hab¨ªa conseguido hacer jugar bien al Getafe, pues c¨®mo no har¨ªa jugar bien al Madrid con esa plantilla. El equipo nunca lleg¨® a jugar bien y el entrenador alem¨¢n tambi¨¦n gan¨® la Liga tirando de esp¨ªritu, garra y de Higua¨ªn. Juande tampoco pidi¨® nada. Es m¨¢s, cuando relev¨® a Schuster en diciembre de 2008 se encontr¨® con los fichajes de Huntelaar (que ni siquiera pudo disputar la Champions por un fallo del director deportivo, Pedja Mijatovic) y Lass. Un mes despu¨¦s llegar¨ªa Faubert, cuya casi ¨²nica aportaci¨®n fue quedarse dormido en el banquillo.
A Juande, igual que a Pellegrini, tambi¨¦n le avalaban las cifras. Para empezar, con ocho victorias seguidas a domicilio, bati¨® el r¨¦cord de Miguel Mu?oz de la temporada 1960-61. El t¨¦cnico manchego cogi¨® el equipo en medio de una par¨¢lisis a mediados de diciembre cuando marchaba sexto en la Liga a 12 puntos del Bar?a y sum¨® 17 victorias (10 de ellas seguidas). Fue humillado en Liverpool en Champions pero lleg¨® al cl¨¢sico en el Bernab¨¦u en segunda posici¨®n y recortando a cuatro puntos la distancia. Su Madrid jugaba un f¨²tbol m¨¢s r¨¢cano incluso que el de Capello (ocho de las 17 victorias fueron por la m¨ªnima) pero no contaba con Kak¨¢, Cristiano, Xabi Alonso y Benzema. Y s¨ª con Gago, Faubert, Javi Garc¨ªa y Huntelaar, entre otros.
A Pellegrini parece no asustarle que el Madrid todav¨ªa no juegue a nada. "Somos punteros", es su frase favorita. Empez¨® la pretemporada dando minutos a todos para ver c¨®mo pod¨ªa armar al equipo. Sigui¨® con las rotaciones hasta que se lo permitieron en la direcci¨®n deportiva. Encontr¨® a un once fijo —a la espera de que vuelva Cristiano y con Ra¨²l en el banquillo— y el equipo se pareci¨® a un equipo s¨®lo durante 60 minutos en Mil¨¢n y 75 en el Calder¨®n. Mientras el t¨¦cnico dice que ojal¨¢ encuentre regularidad, Jorge Valdano, director general y su m¨¢ximo valedor, se march¨® el s¨¢bado del Bernab¨¦u apelando a no se sabe bien qu¨¦ magia. A pregunta de cu¨¢ndo se ver¨¢ el verdadero Madrid, el director general contest¨®: "El equipo se est¨¢ armando poco a poco. A veces los equipos aparecen una tarde y luego ya se quedan...".
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