El alcalde promotor de Tui negocia con la Xunta su plan de urbanismo
El documento ya fue rechazado por los conselleiros Cui?a, Feij¨®o y Caride
Antonio Feliciano Fern¨¢ndez Rocha, alcalde de Tui imputado desde hace dos a?os por los delitos de prevaricaci¨®n, cohecho, tr¨¢fico de influencias, contra la ordenaci¨®n del territorio y sobre el patrimonio hist¨®rico, se entrevista hoy con el conselleiro de Medio Ambiente, Transportes e Infraestructuras, Agust¨ªn Hern¨¢ndez, para buscar una soluci¨®n al plan general de urbanismo de la localidad, sucesivamente rechazado en la ¨²ltima d¨¦cada por los conselleiros Xos¨¦ Cui?a, Alberto N¨²?ez Feij¨®o y Mar¨ªa Jos¨¦ Caride por no atender las modificaciones requeridas por la Xunta para su aprobaci¨®n.
La falta de plan general est¨¢ impidiendo el desarrollo urban¨ªstico de la localidad, sembrado por eso mismo de irregularidades y de procedimientos judiciales contra el alcalde y sus adl¨¢teres. Fern¨¢ndez Rocha es apoderado de la principal promotora local, el Grupo Protuyvi, que engloba varias empresas con esa dedicaci¨®n y del que es administrador ¨²nico Jos¨¦ Antonio Fern¨¢ndez Est¨¦vez, hijo del alcalde.
Ambos, el aparejador municipal, Jos¨¦ Mar¨ªa Melero, el ex arquitecto y dos ex secretarias municipales as¨ª como un agente forestal, comparten la imputaci¨®n -recurrida ante la Audiencia Provincial, que a¨²n no se pronunci¨® al respecto- de los delitos que se citan al principio, seg¨²n el auto judicial, por modificar la corporaci¨®n local "determinados aspectos de la normativa municipal, favoreciendo con ello, de forma deliberada, los proyectos de la empresa Promociones Tuyvi".
Demolici¨®n
Esta propensi¨®n a mezclar los negocios privados -de la familia y amigos- con la gesti¨®n p¨²blica es la causa principal de que Tui siga sin disponer de un plan general de urbanismo, seg¨²n las fuentes consultadas por este peri¨®dico. Fern¨¢ndez Rocha, y por extensi¨®n el grupo popular que encabeza, se han limitado en la tramitaci¨®n municipal a simular que segu¨ªan las indicaciones requeridas por la Xunta en lo relativo, fundamentalmente y sin ¨¢nimo exhaustivo, a edificabilidades (que incrementan caprichosamente), a zonas verdes (sin correspondencia con la edificabilidad y computando al efecto calles peatonales, la superficie de fuentes o el mismo monte Aloia), o a suelo industrial, que se quiere extender como un anillo en torno a la parroquia de Ribadelouro.
Mientras se ha tramitado de esa manera el plan general, el casco hist¨®rico ha quedado fuera de ordenaci¨®n y, como consecuencia, sin acceso a las ayudas que, como ¨¢mbito de tal condici¨®n, le corresponden. El efecto m¨¢s impactante de esa pol¨ªtica se resume en el edificio Beira Mi?o, un bloque de unas 40 viviendas que se construy¨® con licencia municipal en "zona de respeto hist¨®rico-monumental" pese a las cinco ¨®rdenes de paralizaci¨®n de la Direcci¨®n Xeral de Patrimonio Hist¨®rico que, obviamente, no fueron atendidas. En 2005 el Tribunal Supremo eximi¨® al alcalde de responsabilidad penal por no encontrarle "¨¢nimo de delinquir", pero el asunto sigue pesarosamente vivo.
Al margen del procedimiento penal, en el administrativo el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia confirm¨® hace un mes otra sentencia de tres a?os antes que incluye una sanci¨®n al Ayuntamiento de 105.100 euros por su actuaci¨®n en ese caso, "as¨ª como la obligaci¨®n de reparar y restituir las cosas a su estado anterior", esto es, la demolici¨®n del edificio. Curiosamente, el Ayuntamiento s¨®lo recurri¨® contra la multa. Ahora Fern¨¢ndez Rocha acude a la Xunta en busca de ayuda y orientaci¨®n.
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