Trufa, del bosque a los viveros

La recolecci¨®n de la trufa ha estado ligada hist¨®ricamente a los cerdos por su olfato para detectar el hongo bajo tierra. En la actualidad, la normativa s¨®lo permite el uso de perros adiestrados que no tienen precio en el mercado.

Anta?o, toda la trufa que se recolectaba era silvestre, procedente sobre todo de encinas y robles ubicados en los montes de ?lava, Navarra, parte de Castilla-La Mancha y de Castilla y Le¨®n, Arag¨®n, Catalu?a, Comunidad Valenciana, La Rioja y sobre todo, Arag¨®n. Hay encinas en cuyas ra¨ªces se siguen produciendo trufas al cabo de varios siglos de vida. Hoy se mantiene la recolecci¨®n de la trufa silvestre, la trufa negra en Espa?a. Pero la realidad es que en las ¨²ltimas d¨¦cadas han experimentado un fuerte desarrollo las plantaciones de trufas que suponen en la actualidad el grueso de la oferta. Aunque hay otros pueblos, como Navaleno en Soria, localidades de las sierras de ?lava o Navarra, donde la trufa es una producci¨®n importante, Sarri¨®n, en Teruel, se hallar¨ªa a la cabeza de la producci¨®n de trufa, e Inotruf como una de las empresas l¨ªderes en la producci¨®n de plantas de vivero para las nuevas plantaciones.

Inotruf inici¨® su actividad hace m¨¢s de quince a?os en ese pueblo turolense de la mano de Juan Mar¨ªa Estrada, un catal¨¢n que hab¨ªa adquirido sus conocimientos sobre el sector en el seno de la firma francesa Agritruf. Era el resultado final de un largo proceso durante m¨¢s de una d¨¦cada de experiencias y estudios hasta elegir Sarri¨®n como el lugar adecuado para el desarrollo de unas plantaciones propias, 30 hect¨¢reas y para poner en marcha un vivero.

La producci¨®n de plantas para la obtenci¨®n de trufa se concreta en la micorrizaci¨®n o colocaci¨®n de micelios de trufa en las ra¨ªces de los plantones. Inotruf tiene una producci¨®n anual de unos 100.000 plantones micorrizados, la mayor parte de los cuales se comercializan en Espa?a, aunque una parte se vende en Italia y Francia.

La trufa es un hongo que crece asociado a las ra¨ªces de algunas plantas como encinas, robles, as¨ª como avellanos, casta?os o almendros. Requiere suelos pobres; es fundamental que sean calizos y con un Ph superior a 7,5 puntos. Aunque las plantas se adaptan a los climas duros, la producci¨®n es mejor si dispone de agua. Las plantaciones truferas suelen tener un marco de entre 200 y 300 ¨¢rboles, lo que, a un precio por plant¨®n de unos seis euros, supone una inversi¨®n base por hect¨¢rea de unos 1.500 euros. Las plantas inician su producci¨®n al cabo de seis a?os y puede estar produciendo con normalidad hasta los 40 a?os. Hoy hay subvenciones para estas plantaciones en el marco de la pol¨ªtica de forestaci¨®n de tierras agr¨ªcolas.

La recolecci¨®n de la trufa se sit¨²a entre los meses de noviembre a febrero. La producci¨®n media por hect¨¢rea se sit¨²a entre los 20 y los 30 kilos, aunque puede llegar a los 70 kilos. Los precios medios percibidos por los recolectores pueden llegar a los 300 euros kilo.

La superficie trufera en Espa?a se sit¨²a en unas 7.000 hect¨¢reas, de las que algo m¨¢s de 1.000 se hallan en Soria y donde destaca Sarri¨®n en Teruel con unas 3.000 hect¨¢reas. Ello sit¨²a a la localidad como uno de los puntos de producci¨®n de trufa m¨¢s importante en la UE donde se comercializa parte importante de su producci¨®n. -