De cuando ¨¦ramos 'heavies'

Algunos, con la entrada en la mano y a pocos minutos del comienzo del concierto, dudaban que los cuatro barones comparecieran. Caray, con lo que se ha dicho de estos individuos en los ¨²ltimos 20 a?os, no era una teor¨ªa descabellada.

La historia es conocida: despu¨¦s de dos d¨¦cadas de reproches, la banda m¨¢s grande del rock duro espa?ol se volv¨ªa a reunir en su formaci¨®n original para celebrar los 30 a?os de vida del grupo. As¨ª que buen rollo entre todos y pelillos a la mar.

A la hora de discoteca light (20.00), los hermanos De Castro (Armando, 53 a?os, y Carlos, 54) a las guitarras, Sherpa, 60 a?os, al bajo, y Hermes Calabria, 59 a?os, a la bater¨ªa ocupaban el escenario de La Riviera. Fue una noche de homenaje a aquellos tiempos de mediados de los ochenta en el Pabell¨®n de Deportes del Real Madrid, el recinto de la Castellana que acogi¨® la ¨¦poca dorada del heavy metal.

El objetivo era rememorar los tiempos gloriosos de los ochenta

Para llevar d¨¦cadas sin verse las caras, sonaron compactos, recios y engrasados

Si ten¨ªas 16 a?os, daba miedo pasar a los aseos de aquel recinto, donde se ocultaban los heavies mayores para sus trapicheos. No sab¨ªas en qu¨¦ condiciones y de qu¨¦ humor te los ibas a encontrar. En ese pabell¨®n cosech¨® Bar¨®n Rojo sus mayores triunfos. El objetivo de anoche fue rememorar aquellos tiempos gloriosos.

El grupo cont¨® con una sala llena (2.500 personas, entradas agotadas) y un p¨²blico talludito y mayoritariamente masculino para conseguir su objetivo.

Para llevar tanto tiempo sin verse las caras, el grupo son¨® compacto, recio y engrasado. En contra de lo que se pod¨ªa ver a primera (y segunda) vista (calvas, michelines, canas y dem¨¢s erosiones por el paso del tiempo), Bar¨®n Rojo est¨¢ en condiciones profesionales muy aceptables. Ayuda lo suyo contar con un repertorio incontestable.

Arrancaron con Concierto para ellos y siguieron con una ristra de cl¨¢sicos que conforman lo mejor del rock duro en espa?ol: Son como hormigas, Larga vida al rock and roll, Los rockeros van al infierno, Resistir¨¦... No falto ni una. Hubiese sido mejor si hubieran optado por la contenci¨®n: fue un concierto muy largo (dos horas y media) y s¨ª, horror, se atrevieron con un solo de bater¨ªa.

La resurrecci¨®n de los barones originales del rock tiene fecha de caducidad: este a?o 2010 estar¨¢n de gira y luego cada uno a sus asuntos. Mejor as¨ª, porque el concierto de ayer ser¨¢ considerado como una noche de nostalgia heavy que no se enturbiar¨¢ con nuevos episodios. Para eso ya est¨¢n otros. A la salida, un enorme cartel anunciaba que Ob¨²s tiene nuevo disco. Se llama C¨¢llate. Demasiado heavy...