Rigor cient¨ªfico y evidencias del cambio
En los ¨²ltimos meses hemos visto en los medios de comunicaci¨®n cr¨ªticas al Grupo Intergubernamental de Expertos de Cambio Clim¨¢tico (IPCC). La coincidencia de fechas con las proximidades de la Cumbre de Copenhague nos ha llevado a pensar si exist¨ªa alguna intenci¨®n deliberada de desacreditar a la ciencia del cambio clim¨¢tico.
Existe un amplio consenso en la mayor¨ªa de la comunidad cient¨ªfica sobre el calentamiento del sistema clim¨¢tico. Esta conclusi¨®n est¨¢ m¨¢s all¨¢ de cualquier argumento, as¨ª lo demuestran los s¨®lidos datos que se desprenden del an¨¢lisis de la temperatura media global de la superficie del planeta. La evidencia del cambio clim¨¢tico en los ¨²ltimos 100 a?os no s¨®lo se puede deducir del incremento de la temperatura media global sino tambi¨¦n de los cambios observados en el retroceso de los glaciares, la reducci¨®n del hielo en el ?rtico, as¨ª como de los cambios en los comportamientos de la naturaleza.
El IPCC basa su trabajo en la literatura cient¨ªfica revisada y sus procedimientos y evaluaciones responden a un proceso riguroso y transparente, en el que participan cient¨ªficos reconocidos y de diversas disciplinas procedentes de un gran n¨²mero de pa¨ªses. Por ello, sus informes, sujetos de manera adicional a amplia revisi¨®n de expertos y Gobiernos, son imparciales, abiertos y objetivos. Las informaciones publicadas estos d¨ªas en los medios de comunicaci¨®n en relaci¨®n con los glaciares responden a un error detectado en un informe de en torno a 1.000 p¨¢ginas y que en ning¨²n momento cuestiona o invalida la principal conclusi¨®n del documento, ni las evidencias cient¨ªficas del cambio clim¨¢tico. Es m¨¢s, la detecci¨®n de este error es una prueba m¨¢s de la evaluaci¨®n constante y del an¨¢lisis contrastado del trabajo abierto del IPCC. No es descartable -aunque no sea deseable, evidentemente- que pueda identificarse alg¨²n otro error en alguno de los datos f¨¢cticos de ¨¦ste o de cualquier otro trabajo cient¨ªfico. En estos casos, s¨ª debemos ser cuidadosos a la hora de extraer conclusiones y extrapolarlas al resto del informe invalidando el conjunto del trabajo o el resto de la informaci¨®n.
Ning¨²n procedimiento de evaluaci¨®n es inmune a un mal uso puntual, por ello, debemos trabajar para asegurar que se aplican los sistemas de control de calidad que tiene establecidos el IPCC, al mismo tiempo que se mejoran y ampl¨ªan los procesos de evaluaci¨®n y revisi¨®n de sus informes.
La sociedad y sus responsables pol¨ªticos deben basar las decisiones y medidas que adopten de acuerdo con el mejor conocimiento cient¨ªfico y datos disponibles aportados por la investigaci¨®n y la observaci¨®n constantes. La credibilidad del sistema se basa en la calidad de la mejor ciencia posible y el IPCC sigue siendo una referencia de ello.
Teresa Ribera es secretaria de Estado de Cambio Clim¨¢tico.
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