La salvaci¨®n de la creatividad
La cultura del Ruhr, la regi¨®n minera m¨¢s importante de Alemania -abarca una superficie de m¨¢s de 1.400 kil¨®metros cuadrados- se caracterizaba hasta despu¨¦s de la II Guerra Mundial por su "no-cultura", si exceptuamos la cultura propia de la industria. La familia Krupp, se?ores feudales de este enorme imperio que se convirti¨® en una m¨¢quina de guerra de Hitler, se guard¨® muy mucho de ense?ar a sus trabajadores las ideas que les pudieran haber abierto la conciencia sobre la explotaci¨®n a la que estaban sometidos. Un fen¨®meno que se produjo tambi¨¦n en las minas de plata de Potos¨ª. En aquel entonces, la asistencia al teatro estaba prohibida y la primera Universidad de la cuenca no se abri¨® hasta los a?os cincuenta del siglo pasado en la ciudad de Bochum, donde se instal¨® un teatro que se convertir¨ªa en uno de los m¨¢s c¨¦lebres de Alemania. Algunos actores y los mejores directores de escena del pa¨ªs crearon tambi¨¦n despu¨¦s de la guerra, en Recklinghausen, otra ciudad de la regi¨®n, un festival que ofrec¨ªa espect¨¢culos teatrales a cambio de carb¨®n, del que estaban muy necesitados despu¨¦s de la destrucci¨®n del pa¨ªs. Una vez m¨¢s, el arte salv¨® a toda una poblaci¨®n de la destrucci¨®n f¨ªsica y ps¨ªquica, como ocurri¨® con Eur¨ªpides en Atenas despu¨¦s de las guerras del Peloponeso.
La cuenca me dio la oportunidad de meditar sobre la experiencia teatral
Es un lugar de acogida generosa, de grandes emociones existenciales
Cuando lleg¨® el declive de la energ¨ªa del carb¨®n y el cierre de numerosas minas que llevaron al paro a cientos de miles de trabajadores, el Gobierno de Renania del Norte-Westfalia -tradicionalmente socialista- se decidi¨® no s¨®lo a reconvertir la industria a las nuevas energ¨ªas, sino tambi¨¦n a salvaguardar este "lugar de la memoria", recuperando y restaurando numerosos espacios industriales desechados. Esta extraordinaria labor, que dur¨® 15 a?os y termin¨® en el a?o 2000, deb¨ªa ser perpetuada a trav¨¦s de la reutilizaci¨®n de aquellos lugares. Fue para ese proyecto para el que el Gobierno me llam¨® en 2001. Tras visitar un lugar tan fascinante, desde una perspectiva tanto cultural como sociol¨®gica, no dud¨¦ ni un momento en decidir que mi destino, despu¨¦s del festival para ricos de Salzburgo, deb¨ªa ligarse a esa regi¨®n. Fue uno de mis momentos m¨¢s fruct¨ªferos, m¨¢s inspirados y uno de los m¨¢s gratificantes de mi carrera. Por desgracia, es una etapa de mi vida profesional casi siempre olvidada por los organizadores de conferencias, los directores de instituciones que me invitan y los periodistas que creen conocerme.
Desde el punto de vista art¨ªstico, estos lugares industriales me han devuelto la posibilidad de reflexionar en profundidad sobre la experiencia teatral: el espacio teatral no requiere una arquitectura burguesa como la del Burgtheater de Viena; el teatro puede dialogar con la luz natural y la de las estrellas de la noche; a menudo, los decorados fabricados dicen menos que el espacio vac¨ªo de un edificio; la creaci¨®n de nuevas configuraciones entre los lugares del espect¨¢culo y los del p¨²blico dinamiza la mirada y la audici¨®n.
En lo social, los trabajadores y la clase media redescubrieron su antiguo lugar de trabajo, a veces penoso, como un lugar de acogida generosa, de grandes emociones existenciales y de riquezas sensoriales. Pero, sobre todo, se dieron cuenta de que el arte les pertenec¨ªa tanto o m¨¢s que a aqu¨¦llos que habitan en la Villa H¨¹gel.
Y de este modo, una regi¨®n donde no se pod¨ªa comer un helado de vainilla en una terraza al aire libre sin que se manchara de polvo, y donde los habitantes de la villa deb¨ªan lavar su ropa blanca despu¨¦s de un partido de tenis, se convirti¨® en una regi¨®n completamente verde, donde sobre las antiguas colinas de carb¨®n se pod¨ªan contemplar ahora desde muy lejos las obras de arte de Ibarrola o de Serra. No pod¨ªa haberse tomado una elecci¨®n mejor que la de nombrar al Ruhr Capital Europea de la Cultura, justo en un momento de crisis en el que Europa no se puede salvar m¨¢s que gracias a las ideas creativas, sobre todo a nivel cultural.
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