El Banco Pastor gan¨® 103 millones, un 38% menos

El presidente del Banco Pastor, Jos¨¦ Mar¨ªa Arias Mosquera, se enfrenta cada a?o a los periodistas, que siguen la presentaci¨®n de los resultados anuales desde Internet, con el mismo semblante haya o no haya crisis. Ayer volvi¨® a dar lecciones de c¨®mo transmitir confianza al auditorio pese a comunicar unos resultados penalizados por la situaci¨®n econ¨®mica.

El beneficio de la entidad cay¨® un 38%, hasta los 103 millones de euros, y la morosidad ha escalado del 3,66% al 4,88%, aunque sigue por debajo de la media del sector. En los ¨²ltimos doce meses el Pastor ha tenido que hacer frente al cierre de 55 sucursales y termina el a?o con una plantilla de 4.269 personas, 273 menos. Las bajas se han producido a trav¨¦s de prejubilaciones y por la venta de la divisi¨®n de Seguros Generales a Axa.

La buena noticia es que su colch¨®n de provisiones ha crecido hasta niveles in¨¦ditos gracias a sacrificar el beneficio de todo un trimestre e inyectarlo, junto con ganancias extraordinarias, en reservas.

M¨¢s solvencia

Los fondos para cubrir insolvencias aumentaron un 68% hasta sumar 829 millones de euros. Sin vencimientos de deuda a la vista, dando los mismos cr¨¦ditos (no m¨¢s) que el a?o pasado y con la mirada puesta en la captaci¨®n de ahorro, Arias asegur¨® que el suyo est¨¢ "entre los bancos m¨¢s eficientes" y que seguir¨¢ aplicando una pol¨ªtica de prudencia para incrementar la solvencia. Sus indicadores en este aspecto han mejorado considerablemente en un a?o de fuerte impacto de la crisis. "Fortalecer el balance es tanto o m¨¢s importante que los beneficios", zanj¨®. Record¨® que el 70% de los activos dudosos cuentan con garant¨ªas reales, y que sus activos inmobiliarios son "de calidad".

A la pregunta de moda, sobre si en el horizonte ve posibles fusiones, Arias respondi¨® que "no hay noticias", es decir, no hay nada de nada: "Que seamos objeto de deseo es bueno, pero de ah¨ª a cualquier planteamiento hay un abismo".

Sobre temas de actualidad, no quiso decir una palabra de la fusi¨®n de las cajas. Se limit¨® a opinar que, si fuesen empresas cotizadas, su reestructuraci¨®n ya se habr¨ªa hecho "r¨¢pido y en silencio". Preguntado por las causas de la crisis, no dud¨® ni un segundo: "La culpa la tiene la naturaleza humana, la ambici¨®n desmedida y la percepci¨®n err¨®nea de la realidad".