El periodista MVM
Sale el primero de los tres tomos de los art¨ªculos de V¨¢zquez Montalb¨¢n
Manuel V¨¢zquez Montalb¨¢n (MVM) llam¨® a casa para decir en qu¨¦ vuelo y a qu¨¦ hora llegaba. Para celebrarlo, Anna Sall¨¦s, su esposa, reserv¨® mesa para ellos y su hijo Daniel en el restaurante Can Sol¨¦ de la Barceloneta, adonde el refinado gourmet acud¨ªa siempre que hac¨ªan arr¨°s amb espardenyes. No lo pudo degustar: falleci¨® esa madrugada en el aeropuerto de Bangkok. De alguna manera, la comida que deb¨ªa celebrarse ese octubre de 2003 la retomaron el pasado viernes, pues en ese mismo local, madre e hijo, acompa?ados por amigos como Juan Mars¨¦, Josep Ramoneda, Pilar Aymerich y Joan de Sagarra y los editores de Debate presentaron el primero de los tres vol¨²menes de una selecci¨®n de sus mejores textos en prensa.
Manuel V¨¢zquez Montalb¨¢n. Obra period¨ªstica. 1960-1973: La construcci¨®n del columnista sorprender¨¢, como dice su ant¨®logo, Francesc Salgado, porque es la prueba de "las dificultades terribles que tuvo para abrirse camino", constata Sall¨¦s y porque, aunque no lo parezca, el periodista no naci¨® columnista. De los 43 a?os y tres meses que separan su primer art¨ªculo (en el falangista semanario El Espa?ol, junio de 1960), del ¨²ltimo (Intervi¨², octubre de 2003) mediaron m¨¢s de 9.000 art¨ªculos. En la primera entrega hay 128 de nueve cabeceras.
Militante del clandestino Felipe, sus or¨ªgenes period¨ªsticos pasaron por prensa del Movimiento: El Espa?ol y los diarios Solidaridad Nacional y La Prensa. Tres constantes: una envidiable agilidad en un estudiante en pr¨¢cticas que contrastaba con la mediocridad de los art¨ªculos del momento, una cultura fuera de lo com¨²n para sus 21 a?os (como se refleja, entre otros, en la entrevista a Juan Mars¨¦, "la primera que me hicieron", recuerda el autor entonces de Encerrados con un solo juguete) y un intentar meter goles ante la confiada defensa ideol¨®gica de esos diarios. La a ratos tan incisiva como arriesgada entrevista en la Soli a Natalia Figueroa, hija de marqu¨¦s y nieta de Romanones ("?Vas con esp¨ªritu de beneficencia?". "?Para qui¨¦n escribes, Natalia?"), es la muestra.
El primer volumen es una exhibici¨®n de las incipientes plumas del pavo real period¨ªstico que ser¨¢ V¨¢zquez Montalb¨¢n. Hay art¨ªculos de Siglo 20 (revista de 1965 de nueve meses de vida gracias a Manuel Fraga) en los que se presenta como excelente analista de pol¨ªtica internacional, faceta que en 1973 le acarrear¨¢ problemas desde el diario Tele / eXpres, escribiendo sobre Kissinger y la ca¨ªda de Allende. Tambi¨¦n el periodista que busca la ruptura en la subnormalidad formal y de fondo, ¨²nica v¨ªa para desahogarse y que puede verse antes que en Hermano Lobo (1975) en la revista de decoraci¨®n Hogares modernos (1966-1972), donde se inventa una serie con un peligroso Jack el Decorador. Y claro, la consagraci¨®n en Triunfo, con la brutal Cr¨®nica sentimental de Espa?a, el rompedor M¨¢s all¨¢ del f¨²tbol: Bar?a, Bar?a, Bar?a y hasta los guiones de La educaci¨®n de Palmira, que dibuja N¨²ria Pompeia. Revistas como CAU (de arquitectura) y Bocaccio (de la discoteca) completan la entrega.
"A partir de 1973, con su entrada en Por Favor, ya es un periodismo m¨¢s personal e implicado", justifica Salgado su divisi¨®n, que en los siguientes dos a?os completar¨¢n las etapas 1974-1986 ("ir¨¢ de Por Favor, su periodismo m¨¢s ambicioso, a la entrada de Espa?a en la OTAN, cuando cree que ha perdido de nuevo la guerra") y de 1987 a 2003 ("con la columna referente en EL PA?S a sus libros-reportaje"). La bomba MVM completaba su c¨ªrculo.
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