"Hay que prohibir las prejubilaciones en las empresas con beneficios"
Pocos d¨ªas de tranquilidad ha tenido Celestino Corbacho desde que lleg¨® al frente del Ministerio de Trabajo. El paro no le ha dado tregua. Esta semana discurr¨ªa tranquila para ¨¦l, hasta que el presidente del Gobierno anunci¨® el mi¨¦rcoles una comisi¨®n ministerial para negociar un pacto econ¨®mico con la oposici¨®n de la que ¨¦l ha quedado fuera. De nuevo, aunque fuera por omisi¨®n, se convert¨ªa en protagonista. Corbacho (Valverde de Legan¨¦s, Badajoz, 1949) argumenta que en las conversaciones pol¨ªticas no se va a hablar ni de la reforma laboral ni de pensiones, que no tiene sentido que ¨¦l participe en ese di¨¢logo.
Desde luego en estos dos ¨¢mbitos va a tener que esforzarse. En el primero, para lograr mejores resultados del di¨¢logo social que hasta ahora. En el segundo, para vencer la resistencia que la propuesta del Ejecutivo de retrasar la edad de jubilaci¨®n ha cosechado. Ma?ana tiene una prueba de fuego importante: comparece en el Congreso para defender una propuesta que ¨¦l mismo rechazaba hasta poco antes de que el Ministerio de Econom¨ªa impusiera su criterio.
"Trabajo hubiese propuesto retrasar la jubilaci¨®n en dos tiempos"
"Seguramente ha faltado pedagog¨ªa para anunciar la propuesta"
"A largo plazo no es l¨®gica la pensi¨®n de por vida de las viudas"
"El d¨ªa que me sienta desautorizado durar¨¦ dos minutos en el Gobierno"
"Estamos en la fase final del ajuste de la econom¨ªa y del desempleo"
"Ha habido un debate falso. Una reforma laboral no crear¨¢ empleo"
Pregunta. ?Le ha convencido ya Salgado de que hay que ampliar la edad de jubilaci¨®n de 65 a 67 a?os?
Respuesta. No es un problema de que un ministro convenza a otro. El Gobierno ha puesto un debate que es inevitable acometer. Vamos encaminados a un cambio demogr¨¢fico. De aqu¨ª a 25 a?os, la poblaci¨®n jubilada habr¨¢ crecido de manera considerable. Una vez que el Gobierno lo decide, no es propuesta de un ministro u otro, sino la propuesta del Gobierno.
P. Pero no era su propuesta. As¨ª lo manifest¨® en enero.
R. El Ministerio de Trabajo hab¨ªa planteado dos temas. Uno, que la Seguridad Social tiene una magn¨ªfica salud, y eso da seguridad a todos, de manera especial a los pensionistas. Dos, que se ten¨ªan que hacer cambios en un horizonte de 2030. Deb¨ªamos abordar ese tema, pero sin prisas. Las circunstancias precipitan ese debate en el Gobierno. Se ve la necesidad de acelerar esa decisi¨®n, que en el Ministerio plante¨¢bamos con un recorrido a m¨¢s largo plazo, porque en el plano internacional se est¨¢ mirando con preocupaci¨®n a la Seguridad Social. Eso pesa. Espa?a tiene que presentar un plan de estabilidad presupuestaria a principios de febrero, se est¨¢ jugando el cr¨¦dito. Seguramente el Ministerio de Trabajo lo hubiese hecho en dos tiempos. Es probable. Lo que no hubi¨¦semos evitado es el debate.
P. ?Est¨¢n dispuestos a retirar la propuesta si la contestaci¨®n social es muy fuerte?
R. No. El Gobierno no va a retirar la propuesta. Es necesario abordar el debate. La propuesta final ser¨¢ la que acuerde el Pacto de Toledo. ?Con qu¨¦ esp¨ªritu? El de mayor consenso.
P. ?No tiene miedo a perder el apoyo de los sindicatos?
R. Los sindicatos espa?oles han dado pruebas sobradas de que son capaces de ser contundentes en el rechazo a la propuesta, pero tambi¨¦n est¨¢n dispuestos a la concertaci¨®n y el di¨¢logo. Es un signo de normalidad democr¨¢tica que un Gobierno haga una propuesta y que los sindicatos no est¨¦n de acuerdo.
P. ?Fue idea suya retirar del plan de estabilidad la propuesta de elevar el periodo de c¨¢lculo de la pensi¨®n?
R. Fue una decisi¨®n de la propia vicepresidenta segunda.
P. ?Incluirlo y retirarlo?
R. Parece que no fue la vicepresidenta quien decidi¨® ponerlo en el informe, es lo que ella manifest¨®. Y fue ella la que decidi¨® retirarlo. No tengo ning¨²n comentario m¨¢s que hacer.
P. ?Y no ser¨ªa una idea a tener en cuenta para la renovaci¨®n del Pacto de Toledo?
R. Hay que discutirlo. Pero no debemos partir de una propuesta cerrada. Este tema no puede pasar por alto porque el sistema actual tiene puntos fuertes y puntos d¨¦biles. Les pondr¨¦ un ejemplo de un punto d¨¦bil. Si una persona se queda parada a los 55 a?os y est¨¢ as¨ª cuatro o cinco a?os, su pensi¨®n se acerca m¨¢s a la m¨ªnima que a la media. No es justo. Eso hay que corregirlo.
P. Con esa idea, el Ministerio ha dicho que quiere poner coto a las prejubilaciones. ?C¨®mo se hace, teniendo en cuenta adem¨¢s que muchas empresas p¨²blicas las promueven?
R. En algunos casos, prohibi¨¦ndolas. Una empresa que tenga beneficios, si quiere hacer un ajuste de plantilla, que lo haga. Si quiere jubilar a la gente a los 30 a?os, que los jubile, pero que pague la Seguridad Social hasta los 65. Y que por medio no haya desempleo. Hay que acabar con que una empresa en beneficios llegue a un expediente en el que la mayor¨ªa de trabajadores pasan por desempleo, y luego, jubilaci¨®n a partir de los 61. Y eso se acaba prohibi¨¦ndolo. Ahora, para ajustes de plantilla como el de Figueruelas, por ejemplo, parece razonable la figura de la prejubilaci¨®n y la jubilaci¨®n anticipada. Me parecer¨¢ m¨¢s l¨®gico resolver el ajuste con gente que tiene 59 a?os que con quien tiene 29. Aqu¨ª hay un problema cultural. Tiene que llegar un momento en que est¨¦ mal visto jubilar a la gente a los 54 a?os, aunque sea una empresa p¨²blica.
P. ?Y ha llegado ese momento?
R. Yo creo que s¨ª. ?Se imagina ahora una empresa en beneficios que se atreviera a hacer un expediente diciendo que va a ajustar la plantilla y va a prejubilar a la gente a los 47 a?os?
P. No hace mucho, Telef¨®nica y los bancos.
R. Claro que lo han hecho. Ya ese expediente de Telef¨®nica se tuvo que cambiar por declaraciones de este ministro. Pero el siguiente paso no es que se cambien las cosas, es que se proh¨ªban.
P. ?Eso es lo que quiere hacer?
R. Es lo que hay que discutir. Y lo que yo opino. ?Qu¨¦ saldr¨¢ al final? Lo que decida el Pacto de Toledo. Pero las jubilaciones anticipadas y las prejubilaciones hay que acotarlas. Y en los casos de empresas en beneficios, hay que prohibirlas directamente. Me refiero a prohibirlas. Por dos cosas, por econom¨ªa y por cultura. No puedes estar dici¨¦ndole a la sociedad que se tendr¨¢ que jubilar m¨¢s tarde y, paralelamente, eso.
P. El Gobierno puede hacerlo, independientemente del Pacto de Toledo.
R. S¨ª, pero si estamos hablando de recomendaciones del Pacto de Toledo, parece razonable que el Pacto se pronuncie sobre estas materias, que se debatan.
P. ?Entender¨¢n los ciudadanos que cuando la Seguridad Social todav¨ªa tiene super¨¢vit haya que alargar dos a?os la edad de jubilaci¨®n?
R. Si hacemos el debate en clave econ¨®mica, no lo entender¨¢ nadie. ?C¨®mo decir a la gente que se tiene que jubilar m¨¢s tarde cuando tenemos un paro juvenil del 40%? El debate es demogr¨¢fico. ?C¨®mo va a evolucionar la poblaci¨®n en los pr¨®ximos 20 a?os? Y, por tanto, ?cu¨¢l va a ser la poblaci¨®n en 2030? Se va a producir un envejecimiento importante. Y entonces la esperanza de vida va a estar m¨¢s cerca de los 90 a?os que de los 80. Habr¨¢ 4,5 millones m¨¢s de jubilados y probablemente una poblaci¨®n activa que no habr¨¢ crecido a ese ritmo. Habr¨¢ un desfase demogr¨¢fico entre la poblaci¨®n que est¨¢ cotizando y la que no.
P. ?Y no cree que al Gobierno le ha faltado un poco de pedagog¨ªa al anunciar la medida?
R. Seguramente. La contestaci¨®n que ha tenido, porque nadie la esperaba, ha sido contundente. La pedagog¨ªa habr¨¢ que hacerla. Debemos de serenar el debate. No hemos de tener prisa, no nos acucia el tiempo, tenemos buena salud en las pensiones. Hemos tenido super¨¢vit.
P. ?Piensan introducir cambios profundos en las pensiones de viudedad?
R. Parece razonable que se reflexione sobre el concepto de viudedad, pensado en el papel que ten¨ªa hist¨®ricamente la mujer. Tenemos que ser cuidadosos. Si se va al rol de mujer de m¨¢s de 45 a?os, todav¨ªa hay muchas sin haber cotizado. Pero a largo plazo no es l¨®gica esa pensi¨®n vitalicia y un poco asistencial. No se trata de ahorrar dinero ni de poner en cuesti¨®n las rentas de las personas que tienen ahora una pensi¨®n de viudedad.
P. ?Se podr¨ªa ligar la prestaci¨®n a la renta del beneficiario?
R. S¨ª. Eso habr¨¢ que hablarlo. Parece l¨®gico que la condici¨®n y rentas se tuvieran en cuenta. Pero es un tema muy de futuro, porque todav¨ªa hoy, por desgracia, el grueso de las viudas viene de personas cuyo papel fue el de ama de casa. Pero eso no se va a mantener muchos a?os. Son cosas que hay que cambiar.
P. El anuncio de la reforma de las pensiones correspondi¨® a Salgado; el de la reforma laboral, a Zapatero, y esta semana se ha quedado fuera de la comisi¨®n que va a negociar el pacto econ¨®mico con la oposici¨®n. ?Se siente desautorizado en estos tres asuntos que le tocan tan de cerca?
R. En absoluto. El d¨ªa que me sintiera as¨ª durar¨ªa en este Ministerio dos minutos. El presidente del Gobierno sali¨® conmigo [a explicar la reforma laboral] porque as¨ª lo convinimos. Aquella semana fue horrenda, con intranquilidad en los mercados y en la opini¨®n p¨²blica, y parece razonable que el primero que tiene que transmitir serenidad en ese contexto es quien tiene la m¨¢xima responsabilidad, el presidente del Gobierno. ?Por qu¨¦ yo no asist¨ª a la reuni¨®n anterior? Porque estaba en Barcelona presidiendo el Consejo de Ministros europeo. Si no, hubiese dado yo la rueda de prensa.
En cuanto a la comisi¨®n creada esta semana, les aseguro que no es el espacio adecuado para temas laborales, que se debaten en el di¨¢logo social, ni para debatir el futuro de las pensiones, del que se habla en el Pacto de Toledo.
P. En la reforma laboral, el Gobierno plantea ampliar el contrato con despido de 33 d¨ªas. Teniendo en cuenta que el ¨²nico colectivo excluido de ese contrato es el de hombres entre 31 y 44 a?os, eso implica generalizarlo.
R. Debemos discutirlo en el di¨¢logo social. Hay que trabajar para que la temporalidad ceda en beneficio del contrato fijo. Y parece razonable discutir sobre el contrato de fomento [el de 33 d¨ªas] y la temporalidad.
P. El documento plantea limitar las causas del despido y facilitarlo por causas econ¨®micas. ?C¨®mo va a conjugar eso?
R. En Espa?a hay un debate sobre el tema del coste del despido. Pero es curioso que cuando el despido puede ser por causas objetivas [con una indemnizaci¨®n de 20 d¨ªas por a?o trabajado], el 77% se produce a trav¨¦s del despido improcedente de 45 d¨ªas previo dep¨®sito en el juzgado. ?Qu¨¦ dice el documento? Que se discuta si la normativa del despido por causas objetivas es mejorable o no.
P. Pero ?no hay una propuesta concreta del Ministerio?
R. La clara voluntad de discutirlo y llegar a un acuerdo.
P. ?Cu¨¢nto pretende ahorrar el Ministerio con la reordenaci¨®n de las bonificaciones?
R. Nada. Se pretende racionalizar. Las hemos universalizado y han perdido inter¨¦s. Las bonificaciones no acotadas en el tiempo y para un colectivo concreto no sirven para el objeto que buscan, animar la contrataci¨®n. Estamos tirando el dinero. La idea es abandonar este modelo para ir hacia uno con l¨ªmite temporal y de colectivos.
P. ?Y eso no implica menos dinero?
R. No. Significa concentrar los recursos en un colectivo. Mi opini¨®n es que hay dos colectivos para los que las bonificaciones tienen que mantenerse: mujeres por violencia de g¨¦nero y discapacitados. Pero el colectivo con el que hay que hacer el m¨¢ximo esfuerzo es el de los j¨®venes. Durante tres a?os, no m¨¢s. Ahora hemos iniciado un proceso de di¨¢logo y los agentes sociales tendr¨¢n que decir si est¨¢n de acuerdo.
P. Pero eso algo ahorra.
R. No est¨¢ previsto as¨ª. Pero dentro de tres a?os al ministro de Trabajo -que no voy a ser yo, seguro- habr¨¢ que preguntarle qu¨¦ va a hacer cuando se acabe ese tiempo.
P. ?Se podr¨¢ hablar de una rebaja de cotizaciones sociales, aunque sea temporal?
R. En la mesa se podr¨¢ hablar de todo lo que est¨¦ en los ep¨ªgrafes enumerados [en el documento]. Pero dentro de ellos tiene que ser una discusi¨®n abierta. No s¨¦ si alguno de los participantes lo pondr¨¢ sobre la mesa. Pero si hablamos de que hay que ampliar la edad de jubilaci¨®n, parece complicado que esa medida se pueda tomar en consideraci¨®n sin m¨¢s.
P. ?Pretende compensar con un acuerdo laboral, aunque sea tibio, el desgaste sufrido con las pensiones?
R. A la larga, se reconocer¨¢ que el Gobierno no err¨® en introducir este debate. Podemos aparcarlo, aunque no lo vamos a poder evitar.
P. Sin embargo, en la reforma laboral s¨ª que ha habido una actitud distinta del Gobierno, una propuesta m¨¢s abierta.
R. S¨ª, ven¨ªamos de un proceso. Tiene un gran valor poder reanudar el di¨¢logo social. Los ciudadanos valoran que en la medida de lo posible acordemos cosas. Y el Gobierno ha hecho un papel pensando en que era necesario sentarse para discutir. Ese papel ten¨ªa ese objetivo, y creo que lo ha conseguido.
P. ?Cu¨¢ntos parados m¨¢s generar¨¢ el mercado laboral antes de que haya un acuerdo?
R. Estamos en una fase final del ajuste de la econom¨ªa y, por tanto, en el final de ese ajuste del desempleo. En el segundo semestre del a?o las cosas empezar¨¢n a cambiar.
P. Pero ?cu¨¢ndo vamos a ver creaci¨®n de empleo?
R. En el segundo semestre de este a?o se habr¨¢ producido el ajuste final del desempleo. La econom¨ªa empezar¨¢ a crecer entonces, pero eso no significa que haya una creaci¨®n de empleo potente.
P. ?Por qu¨¦ ha tardado tanto el Gobierno en admitir que hac¨ªa falta un cambio laboral para salir de esta situaci¨®n?
R. Ha habido un debate falso en Espa?a. Una reforma del mercado laboral no crear¨¢ empleo.
P. Y entonces ?para qu¨¦ se hace?
R. Es necesaria. De la crisis no saldremos hasta que la gente tenga confianza y haya cr¨¦dito. El debate lo hemos hecho al rev¨¦s. Se necesita confianza y cr¨¦dito, pero hemos convenido que cuando salgamos, el modelo econ¨®mico tiene que ser diferente. La reforma se hace porque es necesario adaptar el mercado laboral a un nuevo tiempo en el que las cosas ser¨¢n necesariamente distintas. -
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