Ellas crean... y cobran menos

Se celebra en Madrid con fiebre futbol¨ªstica el Festival Ellas Crean 2010 aunque, por supuesto, los madrile?os, las madrile?as y lis madrile?is -el g¨¦nero de Lil¨ª ?lvarez, gran atleta y gran feminista- con m¨¢s visi¨®n de futuro est¨¢n viviendo ya el Festival Ellas Crean 2013. Como los madrile?os, las madrile?as y lis madrile?is queda un poco largo, durante un tiempo, quiz¨¢ deber¨ªan abreviarse estas tres denominaciones en las madrile?as, que incluye a los dos g¨¦neros, madrile?as y madrile?os, para que los hombres tuvi¨¦ramos la experiencia de ser gramaticalmente invisibles, al menos por unas semanas, porque ya se sabe que un hombre no puede resistir la falta de protagonismo durante mucho tiempo sin sufrir un infarto.

Un hombre no puede resistir la falta de protagonismo durante mucho tiempo

Y, por supuesto, hay tambi¨¦n mujeres muy bien dotadas para la visibilidad como, por ejemplo, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, que tiene fans incluso en Hungr¨ªa. Hay en Madrid, con motivo de este festival, fant¨¢sticas actividades de m¨²sica, danza, teatro, poes¨ªa, cine, literatura, moda, exposiciones, y agua, azucarillos y aguardiente, ahora que tambi¨¦n triunfa la zarzuela Do?a Francisquita.

En Teatro Capital, nombre inscrito en la puerta de la discoteca Capital de la calle de Atocha, aunque con menos luminosidad que el logo Capital, que viene del lat¨ªn caput, capitis, que, referida al hombre, da a su vez la expresi¨®n patriarcal del cabeza de familia, porque ya se sabe que, para la tradici¨®n mis¨®gina, el cerebro es patrimonio exclusivo del var¨®n, Basilio Rodr¨ªguez-Ca?ada, editor y presidente del PEN Club Espa?a, presenta el espect¨¢culo Creadoras en Capital. Ante un teatro lleno comienza diciendo que la historia del arte y de la cultura la han escrito los hombres y por eso las mujeres han sido excluidas de la historia. Y da los nombres de las 10 participantes en un espect¨¢culo que result¨® tan emocionante como ¨¢gil y entretenido: la poeta Ana Delgado, la novelista Marisol Esteban, la poeta y novelista Mar¨ªa Gracia, la cantante ucraniana Yuliya Klymenco, la todoterreno Charis Mundi, la cuentista Sagrario N¨²?ez, la poeta Yolanda S¨¢enz de Tejada, la poeta y novelista Salom¨¦ Ortega, la bailarina Alma Sanz y la helenista y profesora de la Universidad Aut¨®noma de Madrid Alicia Villar Lecumberri.

Escribi¨® el poeta griego Yorgos Seferis que prefer¨ªa una gota de sangre a un vaso de tinta. Este verso de Seferis lo record¨¦ en Teatro Capital porque las 10 mujeres que intervinieron actuaron desde la verdad de sus pensamientos y sentimientos y por eso todas resultaron extraordinariamente cre¨ªbles. ?Y qu¨¦ es ese vaso de tinta del que habla este poeta griego, que, en sus versos, aparentemente, es agn¨®stico pero que cree en Dios tanto como los hinchas del Atl¨¦tico de Madrid creen en Forl¨¢n y en el Kun Ag¨¹ero? Ese vaso de tinta es el discurso falso de cualquier persona en los ¨¢mbitos p¨²blico y privado. La verdad fue el fundamento de los discursos de estas diez mujeres. Pero, naturalmente, el espect¨¢culo enganch¨® al p¨²blico porque cada una de estas mujeres demostr¨® una gran solidez profesional.

Ana Delgado, autora del libro de poemas Uvas, sexo y chocolate, hizo una observaci¨®n filol¨®gica sobre el verbo crear. Dijo que podemos decir construir y destruir pero no podemos decir crear y descrear. Al o¨ªr esta disquisici¨®n me lleg¨® desde el infierno un alarido de impaciencia de Inmanu¨ªl Ro¨ªdis, el mejor prosista griego del siglo XIX, que, en su art¨ªculo Por qu¨¦ no tiene literatura la Grecia actual, tan espl¨¦ndidamente traducido y recogido por Carmen Vilela en el libro Paseos por Atenas, declara que se abusa al decir que el poeta y el artista crean. Seg¨²n Ro¨ªdis, el poeta no crea nada, sino que simplemente siente, recuerda y combina. Aparquemos para nuestra pr¨®xima reencarnaci¨®n la discusi¨®n sobre el significado del verbo crear. Y pregunt¨¦monos, por ejemplo, qu¨¦ sintieron en el purgatorio Yorgos Seferis y Odiseas Elitis, ambos poetas galardonados con el premio Nobel, cuando Alicia Villar Lecumberri ley¨® unos versos de la poeta Kik¨ª Dimul¨¢, que ha recogido en su espl¨¦ndido libro Literatura griega contempor¨¢nea, y pidi¨® el premio Nobel para esta poeta.

La poeta y novelista Salom¨¦ Ortega ley¨® un texto excelente de su libro La alfombra de la palmera y la media luna. El poema cuenta la tragedia de nacer ni?a en El Cairo. Esa tragedia, por desgracia, con mucha frecuencia, es de alcance mundial. La secci¨®n de Sociedad de EL PA?S (23-2-2010) acaba de dar este titular: "M¨¢s formaci¨®n=m¨¢s desigualdad". Y nos informa de que la ancestral brecha salarial entre hombres y mujeres va a m¨¢s a medida que aumenta la cualificaci¨®n de los empleos. Espa?a, tan tard¨ªa en aplicar medidas de igualdad, obtiene peores ¨ªndices que la media de la UE. En Teatro Capital tambi¨¦n revoloteaba la informaci¨®n de que el 83% de quienes cuidan a personas dependientes son mujeres.