De 'gorila' a 'proscrito'

Richard Fuld estaba en un pedestal. Los empleados de Lehman Brothers le adoraban. Ganaban mucho. Les premiaba con jugosas primas en efectivo y en acciones. En Wall Street, le consideraban un genio, por sus logros y sus ¨¦xitos, que convirtieron la firma en uno de los guardianes del sistema financiero a escala mundial.

Fuld empez¨® a trabajar para Lehman cuando ten¨ªa 23 a?os, en 1969. Fue escalando posiciones y en 1993 se convirti¨® en el consejero delegado del banco de negocios. Un a?o despu¨¦s se har¨ªa con el cargo de presidente de la firma, tras separarse de American Express.

La entidad ya estuvo al borde del colapso en la crisis del Long Term Capital Management, en 1998. El banquero la rescat¨®, y naci¨® el mito. Tras el 11-S volvieron las dificultades.

El papel de Fuld en ambos acontecimientos ciment¨® su figura. Pero si su ascenso fue r¨¢pido, su ca¨ªda fue vertiginosa. Cuando el 12 de septiembre cerr¨® el mercado, esas mismas acciones no se sosten¨ªan en los cuatro d¨®lares (un a?o antes cada t¨ªtulo se pagaba por unos 60 d¨®lares) y los "chicos de Lehman", cabizbajos, empezaron a limpiar sus mesas y abandonaron la sede con cajas de cart¨®n, anticipando el fatal desenlace que tendr¨ªa lugar el fin de semana. El gorila de Wall Street se convirti¨® en proscrito.

Anton Valukas, el presidente del despacho de abogados que ha elaborado el informe, evita acusar al ex jefe de Lehman y su equipo m¨¢s cercano de haber cometido alg¨²n delito financiero. Sin embargo, les responsabiliza por haber actuado con "negligencia" e incumplir sus "obligaciones fiduciarias". Esta afirmaci¨®n, junto a los detalles de sus informes, ser¨¢n, sin embargo, pruebas suficientes para apoyar demandas contra los antiguos ejecutivos de la extinguida firma financiera.

Quiz¨¢s la posici¨®n m¨¢s comprometida sea la de Erin Callan, una abogada experta en cuestiones fiscales convertida en banquera. Su nombre aparece citado en el informe. Fue la primera y ¨²nica mujer que tuvo asiento en el comit¨¦ ejecutivo de Lehman Brothers, y en pleno cataclismo se convirti¨® en la cara y en la voz de Fuld. Como directora financiera, tuvo la dif¨ªcil misi¨®n de calmar a unos inversores ansiosos.

Dick, como llamaban al ejecutivo sus fieles y cegados empleados, estuvo durante meses apartado de las finanzas. Pero su determinaci¨®n le llev¨® a resucitar de las cenizas meses despu¨¦s de firmar la carta de defunci¨®n de Lehman Brothers. Fuld, a los 63 a?os, no se da por vencido. Desde abril de 2009 ocupa un puesto en la consultora neoyorquina Matrix Advisor.