Un marcador enga?oso

El marcador minti¨® en el Molin¨®n. El cero no hizo justicia a un partido intenso y bien jugado por parte del Athletic. Como ya le ocurri¨® otras veces, sobre todo en Riazor, al equipo de Caparr¨®s le perdi¨® su falta de pegada y tambi¨¦n la inspiraci¨®n del guardameta rival. Hasta el ¨²ltimo segundo, cuando Muniain y Llorente desperdiciaron una doble oportunidad a un palmo de la porter¨ªa.

Despu¨¦s de un petardazo fuera de casa, el Sporting se crey¨® en la obligaci¨®n de compensar r¨¢pidamente a su gente. Quiz¨¢ por eso ayer volvi¨® a ofrecer un arranque fren¨¦tico, por presi¨®n para recuperar los balones y ataques vertiginosos, directos. Un estilo que firmar¨ªa el Athletic de toda la vida a ojos cerrados. As¨ª lleg¨® en el minuto 1 la pugna que Barral le gan¨® a San Jos¨¦ y que le dio un buen susto a Iraizoz. El factor sorpresa le dur¨® poco al Sporting. Enseguida volvi¨® al juego trabado, de poca combinaci¨®n y nula precisi¨®n, que condena al anonimato a jugadores como De las Cuevas y Diego Castro. Una vez m¨¢s, el Molin¨®n asisti¨® al control visitante en el centro del campo. Porque el Athletic ten¨ªa m¨¢s (cuatro contra dos) y porque eran mejores, sobre todo un sobrado Javi Mart¨ªnez.

Mediado el primer tiempo, el Athletic era el due?o absoluto del partido y llegaba al ¨¢rea con asiduidad. A veces combinando con soltura y otras recurriendo al viejo truco de la prolongaci¨®n de Llorente para Toquero, o viceversa. Oblig¨® a recular al Sporting, que se sinti¨® especialmente vulnerable al final del primer tiempo. En tres minutos, Javi Mart¨ªnez, Llorente y Susaeta rozaron el gol.

La segunda parte fue un mon¨®logo del Athletic, salpicado por alg¨²n coletazo individual del Sporting. Como el de Jos¨¦ ?ngel, un zurdo cerrado al que la lesi¨®n de Sastre oblig¨® a cambiar de banda. El internacional sub 21 lo pas¨® mal a pie cambiado, pero tambi¨¦n le sac¨® partido cuando larg¨® un remate desde el borde del ¨¢rea al que respondi¨® Iraizoz. Poco despu¨¦s, Jos¨¦ ?ngel se llev¨® un disgusto mayor. Juan Pablo le meti¨® en un l¨ªo con un saque de puerta temerario del que se aprovech¨® Toquero para provocar el penalti. Juan Pablo enmend¨® su error par¨¢ndoselo a Gabilondo.