Apoyo un¨¢nime a la ley de muerte digna en Andaluc¨ªa

El Parlamento de Andaluc¨ªa aprob¨® ayer por unanimidad la Ley de derechos y garant¨ªas de la dignidad de la persona en el proceso de la muerte, la conocida como ley de muerte digna. La norma sali¨® adelante con el voto de los tres grupos de la C¨¢mara (PSOE, PP e IU), pero los populares forzaron que se disgregaran del texto los art¨ªculos 18, 21 y 27 para que se votaran por separado.

La ley andaluza es la primera de Espa?a que ordena los derechos de los pacientes terminales y las obligaciones de los profesionales que les atienden. Entre otros aspectos, eleva a la categor¨ªa de derecho las sedaciones paliativas, aunque acorten la vida, y obliga a los m¨¦dicos a retirar o no instaurar medidas de soporte vital que "s¨®lo contribuyan a prolongar en el tiempo una situaci¨®n cl¨ªnica carente de expectativas razonables de mejor¨ªa".

Los tres art¨ªculos a los que el PP se opuso recogen el deber de los m¨¦dicos a abstenerse de imponer sus propias creencias sobre las del paciente; la obligaci¨®n de los profesionales de limitar el esfuerzo terap¨¦utico; y la regulaci¨®n de los comit¨¦s de ¨¦ticas que se crear¨¢n en todos los centros sanitarios. Los populares quer¨ªan que en los dos primeros casos la norma contemplara la objeci¨®n de conciencia de m¨¦dicos y enfermeros, un derecho que ha venido reclamando la c¨²pula de la Iglesia cat¨®lica y la de los colegios de m¨¦dicos desde que empez¨® a tramitarse la ley, pero al que PSOE e IU siempre se han opuesto.

La parlamentaria socialista Rosa R¨ªos volvi¨® a explicarle ayer a los diputados del PP lo que el Gobierno andaluz lleva meses explicando: que la objeci¨®n de conciencia es "una competencia estatal" y que, en cualquier caso, esta ley regula "buenas pr¨¢cticas cl¨ªnicas" y "derechos indisputables del paciente" ante los que el PSOE entienden que "no cabe la objeci¨®n".

A IU, que respald¨® el texto ¨ªntegro, le hubiera gustado que el texto abordara la eutanasia y el suicidio asistido, pero los socialistas dejaron claro desde el principio que ambos supuestos son incompatibles con las leyes estatales vigentes. "Ni se quiere ni se puede regular sobre esos asuntos", aclar¨® R¨ªos. El parlamentario de IU Jos¨¦ Manuel Mariscal pidi¨® al Gobierno central que "sea valiente" y "legisle" en estas dos materias.